Ante el inminente lanzamiento del clásico musical Annie, vienen otros a la memoria que corren el peligro de ser olvidados. Tal podría ser el caso de El invisible Harvey.
Originalmente fue una obra teatral de la escritora y periodista Mary Chase,estrenada en 1944 y ganadora del premio Pultizer el año siguiente. Su éxito fue tan grande que estuvo en cartel durante más de 4 años.Para los que son capaces de estar leyendo frente a la pantalla y además saben inglés, aquí tenéis la obra original
La versión cinematográfica de los 50 hizo justicia a esta brillante pieza. Como podéis ver aquí, nunca se le ve, pero es omnipresente en todo momento.
James Stewart interpreta a Elwood P. Wood, un simpático y excéntrico individuo cuyo inseparable mejor amigo es Harvey,un invisible conejo de 2 metros. Su hermana Veta, desesperada ante el abandono de sus amigos y conocidos por culpa del peculiar comportamiento de su hermano, decide internarle en un sanatorio mental.Pero esta decisión suya acarraerá inesperadas e hilarantes situaciones, en las que Elwood y su «amigo» jugarán un importante papel para esclarecerlas.
James Stewart realiza una de la mejores interpretaciones de su carrera. La naturaleza bondadosa y confiada de Elwood despierta una mezcla de simpatía y añoranza, ante la idea de que encontrar una persona con una mentalidad original resulta raro e inapreciable. Como consiguió Johnny Depp con Don Juan de Marco, se nos plantea la posibilidad que de lo que muchos califican de locura, pueda no ser en absoluto una desgracia: Mi madre me decia: «En este mundo, Elwood, tienes que ser o muy listo o muy agradable «. Durante años he sido listo.Recomiendo ser agradable.
Josephine Hull hace una magnífica labor como la hermana de Elwood, Veta. Frecuentemente deshecha de nervios ,consigue hacernos soltar más de una vez alguna carcajada.Todo ello le hizo merecedora del Oscar a la Mejor Actriz de Reparto.
La magia de esta película sigue latente aún hoy en día, en esta época rebosante de efectos especiales y trucos de sonido. La puesta en escena y la dirección lleva de la mano al espectador en todo momento, sosteniéndose en unos brillantes e hilarantes diálogos y en unos interpretaciones de unos actores secundarios que logran estar a la altura en todo momento. La filosofía y actitud que tiene Elwood ante la vida,emulando a Kevin Spacey en Seven, resultan quizá incomprensibles pero ineludibles a la vez. Incluso los doctores del sanatorio, aunque escépticos, caen inconscientemente bajo su influjo.
Se han hecho numerosas versiones para televisión y teatro así como numerosas alusiones y guiños a esta obra. Uno a destacar tiene lugar en ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, en la escena en que el juez Doom (Christopher Lloyd) entra en el bar preguntando si alguien ha visto un conejo;uno de los clientes le asegura que sí, y al preguntarle dónde está, éste rodea con su brazo el taburete contiguo vacío y responde: «Saluda…Harvey».
También ha sido utilizado en alguna ocasión en Los Simpsons.
Hubo rumores de que el mismo Spielberg quiso volver a llevarla a la gran pantalla, pero el proyecto acabó encallando. La última version teatral ha sido interpretada por Jim Parsons, el inolvidable Sheldon de The Big Bang Theory.
Como se dijo antes, no se le ha olvidado. Ocupémonos nosotros pues,como Elwood, en dar a conocer a Harvey a amigos y familiares, aún a riesgo de ser nosotros mismos recluidos
De lo mejorcito de la historia del cine, afirmo.
Dios!!! Como que no la he visto? Gracias por esta estupenda crítica, me pongo a visionarla enseguida!