Parece que vivimos una auténtica «guerra de las consolas» a nivel empresarial y que ya no se limita a sacar nuevos modelos o lanzar títulos exclusivos. Hace unos días se convulsionó este mundillo cuando Microsoft realizó la mayor compra de la historia en el sector tras adquirir Activision Blizzard, que ha día de hoy todavía no se ha cerrado, por cierto. Eso convertía a los dueños de Xbox en la tercera potencia en esto del entretenimiento digital.
No eran pocos los que avisaba de movimientos similares por parte de Sony/Playstation, rumoreándose incluso la compra de Konami… pero ahora sabemos que el estudio objetivo de la multinacional japonesa era otro: Bungie. Son los desarrolladores de Destiny y creadores de Halo, una de las franquicias icónicas de Xbox (lo que no deja de ser paradójico pues parece una respuesta a lo que supuso la compra de Activision por Microsoft, creadores de Crash Bandicoot).
La compra se ha realizado por 3.600 millones de dólares y Bungie pasará a pertenecer a Sony, aunque ya se ha confirmado que sus juegos continuarán siendo multiplataforma.
