Reseña: «Y pese a todo…» de Juan De Dios Garduño

Ni que decir tiene que no cualquiera puede escribir bien sobre zombies. Por supuesto que es un género que vive una auténtica edad de oro y también que hay muchísimos “escritores” probando suerte con el tema.

La mayoría de esas obras son una constante cadena de tópicos del género amontonados de forma caprichosa, a veces sin ningún sentido con la única intención de dar un “golpe de efecto” y provocar supuesto espanto cuando en su mayoría solo generan verdadero asco.

No es el caso que nos ocupa.

En “Y pese a todo” Juan De Dios Garduño logra una novela intimista que en su porcentaje más elevado habla de relaciones humanas. De un padre a su hija, de un matrimonio con sus altibajos y de una amistad de toda la vida rota por una traición.

El autor no se muestra ansioso por vendernos monstruitos o por generar espanto en el espectador, todo lo contrario, se centra en explicarnos como se ha llegado a la situación que narra y focaliza su historia en tres seres humanos y un perro.

Lo mejor de todo es que el autor logra un relato muy intimista que no aburre, en la línea de Stephen King (no en vano los escenarios del relato les serán muy reconocibles a los lectores constantes del maestro de Maine).

Mediante el día a día de sus personajes, residiendo en un escenario tan apocalíptico, solitario… el autor usa los pensamientos y recuerdos para contarnos la historia de Peter y Patrick, dos hombres que eran grandes amigos desde muy jóvenes pero que vieron esta relación truncada por una traición.

Condenados a ser los únicos supervivientes (junto con la hija de Peter, Ketty y el perro de Patrick, Doggy) y viviendo el uno frente al otro esta traición del pasado impide que ambos amigos mantengan relación alguna.

Por si todo esto fuera poco a lo largo del relato nuestros protagonistas irán comprobando lo peligroso que puede ser cualquier incursión en el exterior.

Ir al supermercado más cercano para hacer acopio de lo que quede y aún sea útil y/o consumible se convertirá en un acto de vida o muerte por que al frío, la desolación y un paisaje apocalíptico y desolador se añade la presencia de unas criaturas extrañas, grotescas y amenazadoras… los albinos.

«Y pese a todo» es un relato de terror sí pero va mucho más allá es un relato de superviviencia, una historia de amistades traicionadas, del valor de la familia, de la importancia del calor humanos, es un análisis de la desesperación y la soledad, de la desesperanza y sobre todo del mayor de los terrores que puede sentir un adulto… la consciencia de que no es posible proteger a los tuyos de todo en todo momento.

Si bien es cierto que el relato alcanza cotas muy altas en su descripciones más terroríficas es sin duda en lo cotidiano, en lo humano, en el día a día tan monstruoso y amenazante como la más monstruosa de las amenazas.

Para cualquiera será muy sencillo identificarse con uno de los dos protagonistas y llegar a entenderlos de tal forma que te encontrarás a ti mismo ante un crisol de tus propios sentimientos y te descubrirás queriéndoles, odiándoles, enfadándote y preocupándote por ellos.

Es sorprendente lo fácilmente que logra el desarrollo de la historia, meterte en ella y vivirla en primera persona porque en definitiva este libro logra trasmitir sentimientos y provocar reacciones, algo muy complejo que autores con mucha fama no siempre consiguen con la misma fuerza que Garduño cuyas palabras atraviesan tu alma como el filo de un cuchillo bien afilado.

En definitiva, Garduño tiene fuerza y talento y si logra que la pereza no se apoderé de él podríamos estar ante nuestro rey del terror patrio.

Si os habéis quedado con ganas de más, podéis escuchar el programa especial Apocalíptico, en el cual participó el autor Juan De Dios Garduño y habló sobre «Y pese a todo…», además del género en general.