Resumen de la Crítica
Valoración
Una novela ágil y fresca
Una novela que nos llevará por el mundo de los enigmas matemáticos, mientras conocemos las inquietudes de un joven sacerdote, así como los retos que su investigación le planteará.
Rafael Ayerbe nos trae en forma de novela corta su primera obra, y lo hace ofreciéndonos una historia de misterio ambientada en Sevilla, su ciudad natal.
Cristóbal será el protagonista que nos guiará a través de las 115 páginas de esta trama, un joven que a los dieciocho años se prepara para ser nombrado sacerdote, accediendo a la Orden de los Testigos de la Cruz. Dicha orden realiza una obra claramente misionera por vocación, con un alto sentimiento religioso, lo cual atrae desde el principio al protagonista.
Poco más de un año después del acceso de Cristóbal a la Orden, una publicación por parte de un grupo de matemáticos, en la cual ponen en controversia a los Religiosos de los Testigos de la Cruz, hace que emplacen a Cristóbal para matricularse en la Universidad, con el fin de investigar a los autores del artículo y desentramar un misterio basado en las matemáticas, el cual se remonta a la época de los griegos.
El paso de Cristóbal por la Universidad supondrá un nuevo reto en su vida, debiendo replantearse nuevas cuestiones en su vida, sobre todo cuando aparece en escena Helen, una chica con la cual descubrirá todo un mundo de nuevas sensaciones enfrentadas.
Llama la atención, desde un primer momento, la fluidez con la que la historia es contada, la cual, si bien es corta, deja un buen sabor de boca en su conjunto.
El autor ya refleja en sus primeras páginas la intención de ofrecernos una historia ágil, que no nos quite mucho tiempo, y eso es exactamente lo que nos ofrece, una trama divertida, la cual se lee de un tirón, sin centrarse en demasiadas descripciones y directa a la acción.
Se echa en falta un poco más de robustez, ya que la historia da para mucho más, aunque no desmerece el esfuerzo por el autor al ofrecernos un producto consumible a corto plazo, con una calidad a la altura.
Rafael Ayerbe irrumpe en el mundo editorial con una Opera Prima que da ganas de más, de que tome el testigo de ofrecernos algo más grande. Calidad se le nota de sobra, seguiremos sus pasos, convencidos de que llegará a sorprendernos en un futuro.
