Resumen de la Crítica
Valoración
Entretenido
Evie O’Neill tiene un inconveniente talento para descubrir los secretos de la gente. Por culpa de este don se verá obligada a irse de su pueblo natal y mudarse a Nueva York donde la joven flapper vivirá los locos años 20. Todo sería perfecto si no fuera porque tiene que vivir con su tío y el ayudante de esté en un viejo museo esotérico que nadie visita.
Un día la policía encuentra a una chica asesinada con un extraño símbolo y llaman a su tío Will para ayudar. Evie se dará cuenta de que ese don que no le ha traído más que problemas puede ser útil para atrapar al asesino. Algo oscuro y maligno ha despertado en la ciudad que nunca duerme.
Libba Bray, la escritora de la saga de “La orden de la Academia Spence” nos trae una nueva trilogía de época, esta vez ambientada en el Nueva York de los años 20. “Los adivinos” es la primera entrega de esta saga de libros. Hace años que me leí los de “La orden de la Academia Spence” y me gustaron así que le tenía bastantes ganas a este libro, y más después de leer que se ambientaba en los años 20.
Lo primero que me llamo la atención al comenzar a leerlo fue la protagonista. A diferencia de la mayoría de protagonistas de los libros juveniles no es educada, solo piensa en pasárselo bien y en ella misma. Le gusta violar la ley seca siempre que puede, es descarada y dice palabrotas. Ella unida al pícaro carterista Sam Lloyd hace uno de los dúos más carismáticos sobre los que he leído.
La trama en sí no inventa nada nuevo. Es bastante predecible en general pero se complementa con una ambientación muy cuidada. La novela comienza con varias historias que acaban por conectarse durante la narración. En la primera parte del libro la acción brilla por su ausencia. Durante toda esta parte, la autora nos presenta el mundo de la narración y a los personajes entrelazando diferentes fragmentos de las vidas de estos y sus encuentros con las partes en las que se narran los asesinatos.
Si hay algo que destaque de la novela es la ambientación. Libba Bray nos muestra un Nueva York de los años 20 muy rico en detalles: los bares y fiestas clandestinas, espectáculos y la Ley Seca , pero también el movimiento obrero. Un retrato realista de la sociedad de la época que la autora nos ofrece con amplias descripciones a lo largo de todo el libro. Los lectores que sientan debilidad por la época de los años 20 disfrutarán este libro, pero a los que no les llame demasiado la atención no se lo recomendaría ya que hay tramas parecidas mucho mejores.
Tal vez no vaya a convertirse en uno de mis libros favoritos pero sí que continuaré con la saga, sobre todo por la ambientación y los personajes. El segundo libro lo apunto en mi lista de esperados; quiero ver cómo evoluciona la relación entre los personajes. Da la impresión que la autora ha utilizado este libro como presentación de la trama; plantan muchas semillas que espero que desarrollen en las próximas entregas.
Lo mejor: la ambientación y algunos personajes
Lo peor: la acción no es nada del otro mudo y no tiene gacho por si misma.
