Según Antonio María Ávila, director ejecutivo de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), “En los últimos años se ha producido un boom. Sobretodo se ha incrementado el éxito en los mercados exteriores. Por ejemplo, China y Japón ahora son grandes consumidores de la literatura infantil y juvenil española. Además, la calidad de la misma se ve reflejada en los premios internacionales conseguidos”.
Éxito que se ve complementado con la mayor distribución de las obras como sigue comentando Ávila “En 2010 se editaron más de 12.000 títulos, incrementando un 1,9% los datos del año anterior, una tendencia que se mantiene desde hace años. Eso conlleva una gran competencia en el sector, mejorando el panorama general del sector. Hay más escritores del género y se incrementan también los ilustradores dedicados de gran calidad, elemento muy importante en la literatura infantil y juvenil, siendo una de las características más demandadas por sus lectores”.
Evidentemente, siempre hay éxitos que han destacado por encima de otros en cuestión de ventas, como por ejemplo la serie de clásicos del Grupo SM o la trilogía de Laura Gallego (Memorias de Idhún) que triunfan entre los adolescentes.
