Crítica: «Un tributo a la tierra»

Reservoir Books publicó en 2020 Un tributo a la tierra del periodista e ilustrador Joe Sacco. Sacco desde hace dos décadas ha plasmado sus vivencias como reportero de guerra en numerosas novelas gráficas entre las que cabe destacar Gorazde: Zona protegida del año 2000, Palestina: en la franja de Gaza de 2001 o Historias de Bosnia de 2016. Para dotar de rigor a su obra, Sacco explora el terreno sobre el que quiere relatar su historia, realiza entrevistas a los locales y procede a contar historias personales.

En Un tributo a la tierra, el autor tenía la intención de narrar como afectaba el cambio climático a la comunidad indígena de Canadá, concretamente a la tribu de los Dene, emplazados en el noroeste del país. Sin embargo, descubrió que los indígenas seguían viviendo los efectos de un proceso de colonización violento y cruento que había impuesto una cultura extranjera en detrimento de la propia.

 Esta novela gráfica tiene dos finalidades. La primera, concienciar a los lectores de que en la actualidad se siguen llevando a cabo genocidios, en este caso, es un exterminio sistemático de tipo cultural. La segunda, alertar de los riesgos que trae consigo el maltrato medioambiental ya sea con la tala de bosques o con la construcción de oleoductos para extraer recursos naturales.

En esta crítica mordaz al capitalismo, Sacco expone el modo de vida de los Dene que son totalmente pacíficos. Usando la crónica como forma periodística expone la historia de los integrantes de esta tribu y cómo a partir de los años setenta se convirtieron en víctimas de ese sistema opresor.

Uno de los aspectos más interesantes de esta obra es que el autor, acostumbrado a ilustrar conflictos bélicos, consigue transmitir la violencia sin necesidad de dibujarla. Para ello, plasma como la deforestación ha alterado su estilo de vida. Muchos sucumbieron al consumo desmesurado del alcohol, otros tuvieron que lidiar con numerosas deudas bancarias. Para exponer la dualidad entre el mundo pre-industrial y el post-industrial traza unas viñetas con gran precisión que parten del siglo XIX.

Una de las partes más dolorosas, al menos es lo que se ha trasmitido, es como la globalización, como fenómeno homogeneizador, ahoga a las tradiciones, las creencias y las culturas minoritarias.

Sacco usa el blanco y negro, al igual que en todas sus obras, pero refleja hasta el mínimo detalle. Esta paleta monocroma se ha usado deliberadamente porque emula las crónicas periodísticas.

Un tributo a la tierra.

Edición original: Playing the land.

Cartoné, 272 pp. 22,90€.