Crítica: «Star Wars. Darth Vader. 1», de Kieron Guillen y Salvador Larroca
Resumen de la Crítica
General
Guión
Dibujos
Personajes
Historia
Edición
Para fans de Star Wars
Flojo cómic cuyo máximo interés supone completar la nueva historia que nos ofrece Marvel.
Planeta Cómics sigue la publicación de las nuevas series Star Wars editadas por Marvel. A Star Wars, que comenzó a publicarse el mes pasado, le sigue esta serie centrada en el villano de la franquicia por antonomasia: Darth Vader. Al igual que con aquel título, el número uno se lanza a un precio promocional de tan solo 1 €. Imposible resistirse. Lo mismo sucederá el próximo mes, con el lanzamiento de la miniserie Princesa Leia.
Los autores vuelven a ser escogidos entre las estrellas de la casa: Kieron Guillen, prolífico autor que ha trabajado sobre todo con los mutantes y con el nórdico dios del martillo, y Salvador Larroca, nuestro compatriota primer español ganador de un premio Eisner, por Iron Man, y colaborador habitual en series como X-Men.
Este primer número de Darth Vader transcurre simultáneamente a la serie Star Wars, con un Dart Vader en horas bajas, acusado de negligencia por la destrucción de la Estrella de la Muerte e intentando redimirse a los ojos del Emperador. Ahora su misión es cerrar un turbio negocio con Jabba el Hutt, capturar a los rebeldes y… lo que realmente quema al orgulloso Vader, quedar relegado a las órdenes del nuevo primado Tagge. Vemos al protagonista más frío y violento que nunca, inexorable en la búsqueda de sus objetivos… su venganza. Esta dureza se muestra en la escena inicial, cuando es recibido en la guarida del Hutt. Y ese rencor se puede contemplar en una de las escenas finales, cuando contrata los servicios de dos nuevos cazarecompensas, los facilitados por Jabba… dos personajes que parece tendrán mucho que decir en la serie.
Cualitativamente y tomando solo como referencia sus primeros números, este Darth Vader me ha parecido considerablemente menor a la serie Star Wars. Si bien tenemos a un protagonista en dificultades y cuya supervivencia y rango está pendiente de un hilo, no se consigue transmitir nunca esa sensación y tenemos delante al mismo señor oscuro de siempre, impertérrito. Los dibujos de Larroca tampoco destacan de manera especial y se limitan a narrar de manera impersonal lo poco que acontece en el episodio. El retrato de Darth Vader tampoco es su fuerte y, en ocasiones, la máscara aparece dibujada con asimetrías y desproporciones. Posiblemente sea una de esas series que deba leerse de manera continuada y a la que su cadencia mensual impide mantener en el lector el interés necesario. Eso solo lo podremos juzgar cuando tengamos unos cuántos números más en nuestras manos.
Pese a todo, sigue siendo un cómic ineludible por los fans de Star Wars, más ahora que Marvel se ha ocupado de que estas nuevas series compartan momento temporal y estén ligeramente conectadas.
De momento, el regreso de Star Wars a Marvel nos ha dado una de cal y otra de arena… El mes que viene desempataremos con Princesa Leia.
A mi el cómic me ha gustado aunque menos que el de Star Wars. Quizás sea como dices que necesita leerse los números de manera continuada pero yo pienso que no es así, creo que no han arriesgado con el acercamiento a Darth Vader y al final no nos muestran al lord Sith que ya conocemos cuando hubiera estado genial poderle ver desde otro punto de vista.
Aún así como con la de Star Wars (y la de Leia) la seguiré comprando.
Tienes razón que se echa más en falta «notar» al lord Vader como verdadero protagonista. Y no sé si a ti te pasa lo mismo, pero noto a Pacheco algo fuera de lugar. Aun así pienso hacer lo mismo que tú, Isaías, y seguir la serie.
Gracias por comentar!