Crítica: «Sleeper 1. A su suerte», superhéroe demasiado infiltrado.
Resumen de la Crítica
General
Guión
Dibujo
Personajes
Historia
Edición
Imprescindible
Sensacional serie mezcla de estilos: superhéroes, criminal y espías
La premisa sobre la que se desarrolla Sleeper es tan emocionante como inaudita en el mundo del cómic de superhéroes: el agente Holden Carver se ha infiltrado en la organización criminal dirigida por el misterioso y temible Tao. Lynch es su enlace gubernamental, el único que conoce su verdadera identidad y su verdadera naturaleza. Pero todo se trunca en el momento en el que Lynch queda en coma… Carver se encuentra ahora solo, sumergido e implicado al máximo en una organización criminal de alto nivel, que aborrece y detesta, pero de la que no puede escapar porque, a todos los efectos, él no es quien es…
Ed Brubaker y Sean Phillips firman esta obra de culto que es ahora rescatada por ECC en cuatro tomos, los cuales traeremos a esta web y comentaremos de manera holgada, porque la obra lo merece. A esta nueva edición hay que añadirle la inclusión habitual de material extra, como son los bocetos de algunas páginas a lápiz de Sean Phillips. Originalmente la serie formó parte de DC, de su universo Wildstorm, por lo que no es raro verla protagonizada por meta-humanos (aunque yo seguiré llamándolos superhéroes/supervillanos) y en el caso del protagonista, Carver, encontramos unos poderes singulares: es incapaz de sentir dolor y todo daño que se le causen lo puede proyectar a quien tome contacto físico con él. Además, esa incapacidad de sentir dolor se extiende a la de no sentir miedo, nervios, etc. por lo que su respuesta en combate es siempre fría y certera.
Las combinaciones resultantes de los dos párrafos anteriores en manos de un escritor como Brubaker producen una obra sólida, seria y madura que se aleja del cómic de superhéroes tradicional y se acerca más al género del espionaje, detectives y género negro. En realidad es una mezcla de estos dos estilos tan distintos, pero que genera un producto excelente. Podemos sentir junto a Carver la presión de tener que actuar como un villano, junto a otros supervillanos, siempre cuidando de no despertar sospechas y actuando al límite de su moral. Tampoco falta el componente empático hacia alguno de sus nuevos compañeros, con los que llega a conectar de manera amistosa e incluso sentimental (genial Miss.Misery, sus poderes… su origen…) Y el colmo de la tensión argumental se produce cuando en la organización de Tao comienzan a surgir las sospechas de que hay un agente doble infiltrado… y uno de os cabecillas pone su vista en Carver.
Lo bien que maneja Brubaker todos estos elementos logra crear un ambiente de tensión que avanza siempre hacia mayores emociones y situaciones más complejas, colocando al protagonista constantemente entre la espada y la pared y haciendo gala de una gran inventiva para desarrollar las situaciones y generar otras completamente nuevas y más emocionantes. Es muy fácil quedar atrapado por el difícil trago que tiene que soportar y superar a diario este superheróico espía, con el que conectaremos desde el principio.
Contado de manera adulta y sin florituras, ayuda mucho el sobrio dibujo de Sean Phillips, que le otorga un aura de constante oscuridad, misterio y drama. Una obra de estética triste y depresiva, realizada con colores ocres que huye de cualquier atisbo de alegría o positividad. Las páginas están compuestas, todas ellas, de una curiosa manera… Sean Phillips realiza un dibujo que domina toda la página y, sobre él, superpone el resto de viñetas… y esto es así en toda la obra. Añadiendo originalidad, inmersión y un sello personal e identificativo.
Es muy recomendable la lectura de Sleeper, un cómic de alto nivel difícil de encasillar por su amalgama de géneros pero que van a disfrutar todos los lectores, independientemente del género que prefieran. Un clásico del cómic de espias, del género negro y de los superhéroes, todo al mismo tiempo y que aglutina lo mejor de todos estos géneros.