Crítica: PROPHET, vol III: IMPERIO. Esperada reunión familiar.
Resumen de la Crítica
General
Guión
Dibujo
Personajes
Historia
Edición
"Debes prepararte. Algo está viniendo"
Esta obra alimenta la inteligencia y la creatividad imaginativa de quien lo lee como puede ser la novela literaria más universal de todos los tiempos.
Si en las anteriores críticas de la epopeya cósmica que supone la serie Prophet habíamos destacado la cantidad ingente de ideas, conceptos y mitologías que cada escenario e individuos esconden, en este tercer volumen lejos de interrumpirse se continúan desarrollando sin solución de continuidad. Por ello y para no ser reiterativos, no vamos a detenernos en este apartado. Lo que sí vamos a hacer es presentar el tercer acto que recopila los nums. 32, 34 a 38 USA de la serie original. En este caso y comprobada la inmensidad expansionista y voraz del aparato militar terrano repescamos a un viejo amigo que nos regaló uno de los mejores momentos de la obra, el primer Prophet. Personaje por el que Brandon Graham, de una manera portentosa, nos presentó su particular visión de la Tierra dentro de miles de años. Puesto que fue el primer clon que permitió el despertar del imperio, ha sido elevado a los altares por sus iguales y bajo el nombre de Nuevo Padre Prophet tiene un papel de peso, si bien bajo el yugo de las Madres quienes en realidad son las que tiran de los hilos. Por otro lado, el viejo Prophet continúa con su particular tour de force para reunir cuantos más pueblos sea posible para enfrentarse en mínimos de igualdad contra la maquinaria bélica de los antiguos propietarios del planeta azul. Lo que resulta una sorpresa es que más allá del espacio controlado, parece surgir una amenaza que puede poner en jaque todo lo construido en su día por el imperio renacido gracias al ímpetu del Nuevo Padre Prophet, así como lo iniciado por el viejo Prophet. De ahí que podamos entenderlos como socios ignorantes uno del otro. En cualquier caso, como anteriormente comentamos, esta información se sucede a lo largo de los números que comprenden este tomo de manera pausada y lenta porque es el relleno lo que importa, como ya comenté anteriormente, los avances argumentales no dejan de ser una excusa para detenernos en lo que importa: la creación de una ficción con tantas peculiaridades que expande y mejora la potencial imaginación del lector. Esta obra alimenta la inteligencia y la creatividad imaginativa de quien lo lee como puede ser la novela literaria más universal de todos los tiempos.
En su primer número autoconclusivo, nos encontraremos con esas razas alienígenas que en el primer arco del volúmen Remisión tanto nos fascinaron para presentarnos a Jhon Ka, una prophet mujer que dará mucho que hablar a lo largo de la obra a partir de este punto. En una historia tierna en el fondo pero cruel en la forma, seremos testigos de la violencia que representan las madres del imperio como cabezas pensantes (y nunca mejor dicho visto su apariencia gráfica) y como motores del ansia terrano cuando uno de los clones tiene un hálito de esperanza de realizarse en sociedad al margen de sus directrices primarias. Un número fantásticamente dibujado por Simon Roy, que es quien se encarga del dibujo en el ámbito del Nuevo Padre Prophet como vimos en el primero tomo, y que nos enseña una parte más de lo que se puede convertir la tierra en un lejano futuro. Como esto es la justificación para que Jhon Ka y el citado Prophet se conozcan, a partir de aquí nos adentraremos al interior del mundo Prophet, a sus elementos sociales, como si de un documental de los usos y costumbres de una ciudad romana se tratara, de una forma cautivadora conoceremos a los prophets del placer (alucinante!), a su organización política (y bárbara y medieval), a sus estancias privadas y a lo mejor de todo: el particular zoológico prophet. Como todos han estado disgregados a lo largo y ancho del espacio ocupado por el imperio cada uno ha sido acondicionado para sobrevivir a los distintos hábitats en los planetas o satélites donde han estado insertados. De tal modo que vemos a unos clones peludos para soportar climas gélidos, otros con cuatro brazos, gigantes, simiescos, voladores, insectoides, y mi favorito el Prophet Estelar que puede surcar el espacio y que a su vez tienen un uso de navegación estelar. Como se puede observar, el clon visto anteriormente en los dos volúmenes previos con cola reptiliana no esta solo. Como en Remisión, Simon Roy será el encargado de deslumbrarnos manejando a la perfección la cantidad de datos e información suministrada por Graham para deleitarnos con su portentoso talento y sentido narrativo en paisajes tan extremos y pesadillescos como los que aquí exhibe. Por el otro lado, y al igual que en anteriores encuentros, Giannis Milonogiannis será el encargado de ilustrar las aventuras del viejo Prophet con la curiosidad de que como el cerco se estrecha entre los dos protagonistas, el viejo y el nuevo, ambos se reparten los seis episodios alternándose el dibujo, arrojando un resultado gráfico muy interesante porque demuestra claramente en que escenario se mueve la acción. Además, esta alternancia permite comparar ambos trabajos gráficos ya que incluso comparten página, ambos de estilo sucio pero mas fino el del segundo, si bien más disperso este que el primero, mucho más firme y contundente.
Por otro lado, los homenajes a los viejos mitos creados por Rob Liefeld en el presente contexto vuelven a tener presencia con personajes como Suprema y Troll, este último que ya apareciera en anteriores arcos, con un aspecto muy diferente al clásico ratón de biblioteca que conocimos en la previa encarnación de la serie, recuerda a diseños muy mangacas o de anime aprovechando este comentario con el desarrollo de Suprema que evoca precisamente a ese tipo de dibujo (japonés) con una aparición espontánea que recuerda a obras de terror orientales, así como la presencia fantasmal vía telepática de las madres para enfrentar a los hermanos prophets, como la criatura que puede desestabilizar las bases de poder del imperio. Entiendo que hay una clara influencia en estos diseños de las clásicas obras de terror que tan bien realizan esas industrias que consigue una diversidad conceptual que ensalza todavía más la oferta gráfica que vende Prophet.
Sentando las bases de la resolución final del caso, este arco clarifica mucho el destino final de los protagonistas. Las piezas que se iban presentado de forma escueta van ganando peso e importancia a la vez que se unen para dar respuesta a los interrogantes planteados en origen, retrotrayéndose además a las creaciones liefeldianas de los primeros años de la editorial Image con un encaje brillante, pleno y rotundo que encumbra todavía más esta pedazo de obra.
Prophet nums 32, 34 a 38 USA, Image Comics. Prophet vol III: Imperio, Aleta Ediciones. Rústica. Color. 154 pags. PVP: 13,95 €.