Crítica: «Mortal Kombat 1», una sangrienta genialidad

No voy a soltar el rollo del origen de la franquicia y de todo aquello que Ed Boon y John Tobias crearon y desarrollaron en 1992. Creo que es mejor intentar captar vuestra atención hablando (escribiendo) directamente de este Mortal Kombat 1 o, como mucho, de las impresionantes entregas que se están lanzando desde que NetherReal Studios se hace cargo de su desarrollo.

Mortal Kombat X, Mortal Kombat 11, los impresionantes Injustice… y, sin embargo, todos ellos se quedan pequeños ante esta maravilla de Mortal Kombat 1. Un reinicio de franquicia que sabe a gloria y con la que han echado el resto y son capaces de llevarla (o regresarla) hasta el podium de los juegos de lucha.

Lo que ofrece esta entrega va más allá de lo esperado en muchos sentidos y va a cautivar tanto a los fans de la saga como a los que se acerquen por primera vez. O incluso, y entre los que me incluyo, a aquellos que hemos jugado a la serie de manera irregular pero siempre disfrutando de su casquería y originales personajes. Nunca me ha terminado de convencer su historia, ni siquiera en sus versiones cinematográficas. Pero eso a cambiado.

Mortal Kombat 1 está disponible desde el 14 de septiembre en Switch, Xbox SerieS/X, PC y PS5, que es la versión que nos ha llegado gracias a Warner Bros Games, que hemos jugado/disfrutado y de la que os hablo en las próximas líneas.

El primer golpe mortal: el apartado gráfico

Parece que empezamos por el final, pues este apartado suele llegar más avanzadas las reseñas que hacemos en la web. Pero el aspecto visual de este Mortal Kombat es tan apabullante y llama tanto la atención, desde el primer minuto de juego, que he optado por traerlo al principio.

Entiendes por qué este título es imposible que salga para las consolas de generación anterior, marcando un punto de ruptura con casi todos los títulos que estaban saliendo hasta la fecha: intergeneracionales. Incluso su versión en Nintendo Switch, lógicamente, adolece de falta de potencia y no llega, ni de lejos, a lo que se ve en PC, PS5 o Xbox Series.

Ya lo visual era un aspecto sobresaliente en los juegos anteriores de NetherRealm, pero con esta entrega se han salido y miran, de tú a tú, a cualquier juego puntero visualmente que se os venga a la cabeza… llámese God of War Ragnarok, por poner un ejemplo.

Donde más se disfruta este apartado es en el modo Historia, para el que no es difícil encontrar palabras de elogio.

Un Modo Historia histórico

Entre los varios modos de juego que posee Mortal Kombat 1 (y de los que luego hablamos) el Modo Historia destaca por méritos propios. Se trata de una película con cinemáticas, de más de ocho horas de duración, de aspecto visual impecable y con un argumento excelente.

Este nuevo Mortal Kombat es el reinicio de la franquicia y atraerá a nuevos jugadores que podrán disfrutar de los personajes desde cero, eso es cierto… pero también va a conquistar a los viejos seguidores de la saga. La explicación se encuentra en el título anterior, Mortal Kombat XI, en el que Liu Kang creaba un universo nuevo tras la destrucción de los anteriores. Eso es lo que da origen a estos nuevos reinos y a estos personajes renovados pero que mantienen todo su carisma anterior. Nada más cargar el juego, una rápida y elocuente escena nos pone en contexto y nos explica lo que ha pasado hasta llegar aquí.

Partimos de cero.

La historia del Modo Historia (valga la redundancia) nos lleva hasta uno de esos combates que se celebran cada cien años y en los que se mide un campeón de la Tierra con otros combatientes de otros reinos. Liu Kang hace una selección de potenciales luchadores a los que entrena durante un tiempo para que puedan afrontar los combates con cierta garantía. Así se conocerán Johny Cage y Kenshi por un lado junto a Kung Lao y Raiden. Comienza una divertida interacción entre ellos que pasarán de desconocidos a camaradas inseparables.

Por el camino y con el devenir de la historia, irán conociendo a otros aliados, a no pocos enemigos y todo se convertirá en una maravillosa pero sangrienta aventura en la que deben luchar a muerte para evitar la guerra entre los mundos y desvaratar los planes del pérfido Shang Tsung y sus aliados.

Tendremos acción, humor y cada vez que haya un conflicto, tendremos que tomar los mandos y combatir. Entonces, el increíble CGI transita a la típica pantalla de combate con una transición orgánica y con la que no se notan diferencias gráficas.

Sumad a esto el gran trabajo de doblaje que se ha hecho en el juego, con actores profesionales poniendo voces y dándole un aspecto final cinematográfico que termina de enamorarte. No hay duda de que esta «película» es notablemente superior a las películas de imagen real que se han hecho sobre la franquicia. Porque además cada escena está diseñada cinematográficamente, con transiciones, planos, encuadres, música, etc. que recuerdan una gran superproducción.

De verdad que todo lo que os diga no hará justicia y en este punto tengo que recomendar el juego encarecidamente. Solo este modo ya excusa su adquisición… pero hay más.

Otros modos de juego geniales

Podemos combatir libremente en el típico e inevitable Modo VS, sea contra la IA o sea contra otros jugadores, de manera local o remota. El Modo Entrenamiento nos deja practicar el gran número de kombos, golpes, ataques, fatalities, brutalities y lo que haga falta, incluyendo como novedad los combos aéreos, los combos kameo (que se realizan golpeando «a duo» con un compañero) y los contraataques o réplicas dependiendo del color del aura que rodee al enemigo.

También tenemos un modo de combate o Modo Torre en el que nos enfrentamos a un número determinado de duelos, escalando por una torre (de ahí su nombre) y con distintos niveles de dificultad dependiendo de la altura que esta tenga.

Pero el otro modo que llama mucho la atención y que da para jugar muucho tiempo es el Modo Invasión.

Un juego de tablero para avanzar a mamporros

En el Modo Invasión comenzaremos eligiendo jugador y acompañante (kameo), aunque podremos cambiarlos luego en cualquier momento de la partida. Entonces se nos pondrá sobre una especie de tablero, a modo de mapa cenital. Estos mapas recrean los escenarios visitados en el Modo Historia. Tendremos que movernos por un camino prefijado y combatir para poder avanzar, casilla a casilla.

Tras cada combate se nos darán recompensas a modo de monedas, consumibles, ropa y complementos, versiones nuevas de personajes (aquí encontraremos al Johnny Cage caracterizado como VanDamme y, ojo, que si lo seleccionamos… ¡escucharemos al actor de doblaje que interpreta al actor habitualmente!). También obtendremos ventajas como reliquias, medallones, etc que podremos usar en los combates. ¿Os parece poco? Pues resulta que adquirimos puntos de experiencia, como si de un RPG se tratase, y podemos subir nuestros parámetros básicos para afrontar con más garantías los combates que se nos vienen… que se van a ir complicando conforme desbloqueemos nuevos tableros/mapas.

¿Y qué pasa con la jugabilidad?

Hasta aquí los modos de juego y el aspecto técnico, que se puede resumir todo con dos palabras: matrícula de honor. Pero en este tipo de juegos hay algo fundamental: su jugabilidad.

Bien, Mortal Kombat 1 es completamente asequible para que cualquier tipo de jugador se divierta. Los más novatos o casuales, gracias a sus numerosos ataques y fáciles combos que, apenas juegues varias veces con un personaje, podrás dominar. Pero los más exigentes encontrarán también una mina en la variadísima lista de ataques, golpes y especiales, terrestres o aéreos, agarres, etc. Algunos será difícil dominarlos pero no son imprescindibles para salir victorioso en los combates.

Es decir, que el juego te permite avanzar por sus modos de juego Historia e Invasión sin necesidad de ser un «maestro»… pero si quieres exprimir el juego al completo tendrás que entrenar y dominar el arte del kombate mortal.

Y eso vale la pena, creedme. Poder hacer combos con tu acompañante, agarres especiales, etc. hace que el combate sea vistoso y divertido a rabiar. Además, y como marca de la casa NetherRealm, los ataques especiales se muestran con cinemáticas tremendas. Atentos a los agarres especiales que realizamos con el compañero/kameo y solo cuando rellenamos cierta barra (pulsando L2+R2 en PS5) y atentos a los Fatalities, que además de los nuevos podremos desbloquear los fatalities clásicos, los brutalities, etc.

Concluyendo

Mortal Kombat 1 puede ser el mejor juego de lucha que existe. Y no es una pregunta, es una afirmación. Por sus variados modos de juego se puede medir con la última entrega de Street Fighter, pero en los otros apartados no tiene rival.

Visualmente es impecable y todo lo que rodea su producción y realización… música, efectos, doblaje… merece nuestra absoluta admiración. Suma que le acompaña una historia sencillamente genial, divertida y apasionante (te aseguro que no vas a pasar las escenas de video) y ha sido concebido con gran inteligencia para atraer a nuevos jugadores o aquellos que no saben nada de este universo, pero también a los veteranos (que aprendan Marvel y DC)

Son muchos factores, y todos positivos, que me obligan a recomendarlo como uno de los títulos más disfrutables de este año (si no el que más). A partir de aquí estoy deseando conocer qué viene, como será Mortal Kombat 2. Y ya tenemos noticias de los primeros packs DLC de luchadores que llegan al juego, incluyendo El Pacificador, Ghostface o el Patriota de The Boys.

No se puede pedir más.