Crítica: «Manhole vol.1 (de 2)», un thriller casi perfecto
Resumen de la Crítica
General
Guión
Dibujo
Personajes
Historia
Edición
Imprescindible
Apasionante thriller donde el terror biológico y la investigación policial se conjugan perfectamente.
No le tenía el ojo echado a Tetsuya Tsutsui, el autor de esta obra. Pero después de leer Manhole me queda claro que se trata de un nombre que hay que seguir muy de cerca en cada uno de los proyectos que publique. Se trata de un autor completo, extremadamente competente en todas las disciplinas de este arte y con muy buenas maneras tanto en la ejecución como en el desarrollo de su obra. No es habitual dar con un creador de este nivel así, casi por casualidad, y uno se pregunta como es posible que no lo hubiera descubierto antes.
Manhole es un manga que solo consta de dos volúmenes, publicados recientemente por Planeta Cómics, donde se nos narra como una investigación policial intenta desentrañar el misterio de un hombre que aparece desnudo en pleno centro de la ciudad, víctima de una extraña infección parasitaria. Lo que aparentemente es un caso aislado, pronto comenzará a extenderse y complicarse, dejando claro que tras la infección hay una mano intencionada. Un psicópata, un asesino en serie… ¿a qué se enfrenta en realidad la policía de Sasahara?
El argumento y su evolución van a quedar ocultos en esta reseña, por ser un manga de tan corta duración y de tan intenso ritmo, poco aportarían esas revelaciones sino nada más que chafar las constantes sorpresas que guarda. Una de las excelencias que encierra Manhole es el ritmo constante de la historia, que evoluciona de manera horizontal y fluida, siempre dentro de la lógica más absoluta, con sorpresas y momentos álgidos que jamás se sienten impostados. Por ejemplo, la investigación policial siempre avanza de manera natural, una pista lleva a la otra, a un testigo o abre un nuevo camino para los agentes. Aquí no encontraréis esos forzados clichés de la típica tarjeta de visita o cajetilla de cerillas con dirección escrita que aparece en el momento oportuno para que no se estanque la investigación. Nada de eso. Las pistas son naturales, los testigos son gente normal que estaba allí o vio algo concreto, de manera que siempre tenemos la sensación de estar asistiendo a algo real, pese a que los hechos investigados se salen de la lógica.
Los personajes tienen una psicología cotidiana y responden y actúan consecuentemente a ella. El autor se toma su tiempo para presentarlos y, con el mismo desarrollo de los acontecimientos, los vamos conociendo en profundidad. Incluso Tsutsui recurre a la típica pareja de policías tan habitual de veterano+novato, pero son personajes tan bien dibujados que ese trillado concepto pierde toda importancia en favor del encanto y carisma que destilan, de la química que entre ellos se respira. Para darle más empaque de realidad, otros personajes principales son también muy normales, como ese compañero detective de policía de avanzada edad, de maneras tranquilas y serenas, apoyándose siempre en su dilatada experiencia.
A la impecable acción detectivesca y policial la acompaña una cuidada atmósfera de terror que brilla en determinados momentos, inquietante, turbadora, amenazante y siempre a punto de explotar. Gran combinación de géneros en este Manhole.
Pero si argumento, guión, atmósfera están a gran nivel… no perdamos de vista el dibujo. Con un estilo fotorealista, Tsutsui nos recrea todo tipo de situaciones de manera prodigiosa. Unos retratos/figuras impecables, unos escenarios tan cuidados como variados y unos encuadres siempre acertados. Los personajes están dibujados de manera tal que se reconocen a simple vista por sus rasgos o, para flipar, por su manera de vestir. Los escenarios urbanos son variados y tanto exteriores como interiores se recrean con obsesivo detalle. Para muestra, la escena en la que interrogan a una anciana con el síndrome de Diógenes, en cuya casa podemos ver las bolsas de basura amontonadas, las cajas apiladas y las cucarachas correteando. Impresionante. Y la narrativa que este autor tiene es otro punto a su favor… siempre buscando el encuadre justo, girando viñetas para mostrar impacto, como si perdiéramos el equilibrio ante el horror que vemos, o con esos contrapicados en los que por encima de nosotros se yergue el espanto. Jamás tenemos la impresión de que se nos escapa algo, incluso en las escenas más frenéticas nos queda claro que Tsutsui siempre opta por darnos la visión correcta y necesaria para que no perdamos detalle de nada en absoluto.
Manhole es un manga de referencia, que puede cautivar a cualquier tipo de lector, sea o no aficionado al medio. Un thriller detectivesco de terror biológico que no dejará indiferente y con un primer volumen que acaba en el cliffhanger definitivo. No lo dejéis pasar.
- Manhole 1 -de 2- Planeta Cómics
- rústica con solapas. b/n. 310 pp. 12,95 €