Crítica: «Liga de la Justicia: Año Uno», re-explorando los orígenes.

Con el subtítulo de «Año Uno» se aprovechó para contar algunas de las primeras aventuras de muchos de nuestros héroes más conocidos. No nos engañemos, que la mayoría de estas historias no tienen mayor trascendencia sino echar la vista atrás y revivir episodios no contados que, en realidad, poco aportan o poco cambian lo ya conocido. Batman inauguró esa moda del Año Uno y, gracias a Miller y Mazzucchelli, no se ha vuelto a igualar. Allí teníamos la primera vez que Bruce patrullaba las calles, dándose de frente con la brutal realidad de querer ser un vigilante enmascarado. Añadía detalles que, en aquellos lejanos años 40, los cómics estaban poco interesados en profundizar. Ese tremendo cómic de Batman fue el inicio, como decíamos, y tras su éxito se editó el Batman Año Dos y el Año Uno para muchos personajes: Batgirl, Robin… incluso en la competencia!

No podía faltar, por supuesto, el Año Uno dedicado al grupo más famoso de la editorial. Así llegaría a publicarse en 1998 una serie limitada de doce números con el título de Liga de la Justicia: Año Uno, que ahora recopila ECC Ediciones en un tomo de lujo, dentro de la línea dedicada a los grandes autores que han puesto su talento al servicio de la JLA. Mark Waid, Brian Augustyn y Barry Kitson serían los encargados de sacar adelante esta serie. Y no se les dio nada mal.

Se nos cuenta como cinco héroes coincidieron enfrentándose a unos seres alienigenas y descubren que no se les da nada mal cooperar, de hecho eso es lo ideal ante amenazas tan poderosas como aquellas, que por separado hubieran sido indefendibles. Flash, Green Lantern, Detective Marciano, Canario Negro y Aquaman coinciden pues por vez primera en esta aventura. Pronto descubren que la aparición de tantos aliens no es fortuita y que, además, uno organización criminal trama algo aprovechándose de la llegada de estos seres a la Tierra. Pronto también saltarán las chispas entre los héroes, algunos competirán por ser líderes y otros no terminarán de encontrar su sitio en el grupo, sintiéndose rechazados por algún motivo u otro. Aquaman es un recién llegado a la superficie y padece cierto racismo, el mismo que J’onn J’onz, el último marciano que solo encaja entre nosotros gracias a su capacidad de metamorfosearse. Canario Negro descubrirá un oscuro secreto del pasado de su madre, a la que idealiza, y esto le llevará a no fiarse del todo de sus nuevos compañeros…

Los secretos que hay entre los miembros de la recién formada Liga de la Justicia están a punto de destruirla… pero algo inherente en el grupo surgirá, y los lazos entre ellos se irán consolidando a medida que avanza la historia. Es curioso volver a ver estos personajes en sus comienzos como grupo, con el vicio adquirido de la individualidad y como ese deje poco a poco va desapareciendo. Se aprovecha para recuperar personajes de la época, como los Metal Men o La Patrulla Condenada, entre otros muchos… y no deja de ser interesante ver a Superman o Batman como meros secundarios, sin formar todavía parte del grupo. Insólito e interesante.

La trama que atraviesa los doce números tiene ese sabor antiguo del cómic clásico de superhéroes, con grandes conspiraciones y villanos de opereta que hábilmente son eclipsados para ofrecer un gran final a la altura. El mérito de elaborar una serie tan bien pensada recae en Mark Waid, Brian Augustyn y Barry Kitson. Primero, con guiones adecuados al momento y personalidad de cada uno de los héroes… Aquaman crédulo, inocente y ninguneado… Green Lantern soberbio y colérico… Incluso Green Arrow, que aparece como puntual aliado, es el Oliver Queen del cómic clásico. El dibujo puede pecar de cierta sensación de agarrotamiento en las figuras, pero el tono colorido y vibrante de las aventuras, sumado a un entintado virtuoso y ese regusto a lo clásico que jamás abandona la lectura, es más que suficiente para satisfacer al lector de este género.

Liga de la Justicia: Año Uno es un cómic divertido y respetuoso con el género y sus personajes, que remueve los orígenes del grupo sin desestabilizarlos, al contrario, consigue integrar esta nueva historia a unos orígenes ya conocidos. Muy recomendable a los incondicionales de la Liga y a los que quieran conocer el origen de su formación, pues respeta el tono original y lo adapta al lenguaje actual. No está mal para un cómic hecho hace 20 años que nos habla de otro que tiene ya casi 50.

• Liga de la Justicia: Año Uno. ECC Ediciones
• edición original. JLA: Year One núms. 1-12 USA. DC Comics
• cartoné.  328 pp. color. 31 €