Crítica: «Koa and the Five Pirates of Mara», pequeñas aventuras piratas
Historia
Jugabilidad
Gráficos
Duración
Recomendable
Juego para los más pequeños, de temática infantil y con retos plataformeros para toda la familia.
Entre tanto shooter, sandbox, soulslike y demás se nos pueden pasar por alto otros títulos que merecen ser jugados y disfrutados por toda la familia. El género estrella para todas las edades puede ser el de las plataformas y las desarrolladoras siguen apostando por sacar buenos títulos orientados, en muchas ocasiones, a cumplir ese factor «familiar»: conseguir que sea una experiencia accesible y asequible y que se pueda compartir.
Uno de esos títulos en llegar últimamente es Koa and the Five Pirates of Mara, y lo hace con toda la intención y con toda la experiencia acumulada por los estudios que hay detrás. Para empezar, los valencianos Chibig Studio, que lanzaron hace un tiempo la que puede ser considerada precuela y comparte protagonista con el título que hoy traemos. Era Summer in Mara, más orientado a la gestión de recursos. La alianza del estudio valenciano con Talpa Games y con Undercoders ha dado como fruto (tras exitoso Kickstarter) esta nueva aventura de Koa que cambia esa gestión, cultivo y pesca, por el más puro y divertido plataformeo.
Pero os podéis preguntar como es que traemos ahora este juego ya que fue lanzado hace unos meses y está disponible para todas las plataformas. La respuesta es a la vez una buena noticia: gracias a Tesura Games se ha hecho realidad el lanzamiento en formato físico del juego, en Edición Normal y Coleccionista, para PlayStation 4, PlayStation 5 y Nintendo Switch.
Vamos a convertirnos en piratas buenos
Koa y el pequeño Napopo son de nuevo los protas, sin embargo en esta ocasión van a recorrer el mundo de Mara, este particular y peculiar archipiélago, descubriendo y explorando isla tras isla y reto tras reto. La pandilla de amigas ha decidido ser piratas y Koa, para ganarse semejante título, va a tener que superar unas difíciles pruebas. El objetivo, o uno de ellos, será reunir los trozos perdidos de un mapa que configura el mundo de Mara y así poder explorarlo y terminar convirtiéndonos en el rey de los piratas.
El problema es que cada uno de esos trozos están ocultos en lo más remoto de las islas y, para acceder a ellos, vamos a tener que sortear mil peligros en forma, sobre todo, de trampas y plataformas. Por eso tendremos que hacernos a la mar y conducir nuestra embarcación, explorando cada sector de mapa que vayamos desbloqueando.
Nuestra base servirá para gestionar sencillos recursos y mejorar la embarcación, gastar las monedas que encontremos para ir a la moda y poco más. Bueno, también encontramos desafíos en forma de carreras contra nuestras amigas que, desde luego, no nos van a poner las cosas fáciles.
Exploración marítima
Pero lo interesante es lanzarse a la mar y afrontar la treintena de niveles, plataformas en 3D, que nos van a exigir nervios de acero y pulso firme. El juego tiene una curva de dificultad cuidadosamente estudiada que va progresando de manera suave pero constante, además de permitir ajustar la dificultad y ser así accesible a todo tipo de usuarios.
Cada una de las islas será uno o varios niveles por donde tendremos que saltar, correr o aprovechar el impulso que obtenemos tras pulsar el botón justo antes de tocar el suelo. Será fundamental dominar esta técnica para los niveles más avanzados y para los momentos en los que competimos con rivales que, a modo de final boss, nos retarán a realizar carreras.
Además de esto seremos capaces de agarrar objetos tales como bombas y abrir nuevos caminos o descubrir secretos ocultos en los escenarios. Combinando el salto, la carrera y los lanzamientos podremos llevar a buen término nuestra aventura y solo encontraremos verdaderas dificultades en momentos puntuales o si queremos obtener el oro. Porque esa es otra: no se trata solo de llegar al final del recorrido, sino de hacerlo en el menor tiempo posible. Y si queremos batir el record, vamos a tener que entrenar.
Precisión y variedad
Un juego de plataformas donde la precisión es clave exige que la respuesta al mando sea perfecta. No falla en este aspecto y Koa saltará y correrá con la fluidez deseada, lo que sí nos pondrá en apuros será la cámara en más de una ocasión. Porque a veces avanzas por la pantalla más rápido de lo que lo hace el scroll del juego y te toca esperar a que la imagen llegue a tu altura para poder continuar. El problema es que si nos lanzan un cañonazo (o hay en el lugar alguna trampa similar) estamos muertos. Por suerte, Koa dispone de tres vidas en cada ocasión y se nos permite errar con bastante indulgencia.
Los recorridos y los mapas son muy variados en cuanto a escenarios y encontramos muchos tipos de «habitat» que consiguen darle frescura al juego en cada desafio. Tan pronto estamos corriendo y saltando por una zona selvática como lo hacemos por una fortaleza, escalando por sus plataformas para llegar a lo más alto… o bien corremos por entornos helados, rocosos… Y todo con unas animaciones suaves y limpias, tipo cartoon, de estilo simpático.
Para mayor variedad a las fases se ha pensado en introducir niveles submarinos en los que tocará bucear y los controles cambian, añadiendo todavía más feescura y evitando que nos aburramos a lo largo de la aventura. Muy destacable que los niveles de plataformas cambien de escroll lateral a otros donde avanzamos a toda velocidad hacia el fondo del horizonte, saltando y esquivando y aprovechando aceleradores marcados en el suelo. Y jamás hemos notado (al menos jugándolo en PS5) ningún fallo en las animaciones ni en la respuesta/precisión de los movientos.
La melodía que acompaña al juego no es la adecuada a la aventura y se combina con los efectos sonoros de turno en cada situación. Hay gran cantidad de PNJs con una apariencia muy imaginativa y original. Casi todos son amistosos y colaboran y los considerados «enemigos» lo son dentro de un marco bastante inocente ya que solo nos retan o provocan como parte del argumento, para continuar esta especie de juego que es convertirse en gran pirata. Está orientado para que el jugador más joven no se sienta presionado ni intimidado y sí estimulado para continuar jugando y aceptar el reto.
Concluyendo
Tenemos un buen juego de plataformas asequible para los más jóvenes y disfrutable para toda la familia donde se nos presenta un mundo encantador de personajes muy interesantes. Su jugabilidad es adecuada a cualquier tipo de usuario primero por su buena curva de dificultad y segundo por su elección de nivel, que piensa en todos los posibles jugadores. Bebe de clásicos como Mario, el rey de las plataformas, y lleva esa misma jugabilidad a unos entornos 3D coloridos y vistosos.
Viajar por este mundo de Mara es divertido y a la vez un reto. Cierto que los jugadores más veteranos lo encontrarán excesivamente fácil, pero no es su público objetivo (PEGI 3). Su variedad en cuanto a niveles y sus carismáticos personajes sin duda cautivarán al jugador y sobre todo a los más pequeños que pueden descubrir un buen referente en el género.
Se nota cuando un juego se hace con cariño y toma como ejemplo a los mejores del género. No busca imitarlos, sino llevar esa gran jugabilidad a un título propio. Koa and the Five Pirates of Mara lo consigue en casi toda la extensión de su aventura y nos hace disfrutar a golpe de salto y de carrera.