Crítica: «Insexts 2», La Necrópolis.
Resumen de la Crítica
General
Guión
Dibujo
Personajes
Historia
Edición
Muy Recomendable
Un mordisco al patriarcado
Lady Bertram y Mariah marchaban del Londres victoriano tras los sucesos ocurridos en el primer tomo, para establecerse en la siempre encantadora París. Pero allí tampoco podrán vivir en paz, porque pronto descubrirán que el mal y el arte se conjuran para amenazarlas. Encontrarán una especie de culto o congregación que utiliza a las mujeres como materia prima para crear obras de arte… y no puedo ser más explícito. Todo se complica aun más cuando se topan con una entidad que ha sido despertada precisamente por las actividades del maquiavélico culto.
Marguerite Bennett y Ariela Kristantina forman tandem de nuevo en este segundo arco que, de momento, cierra la historia de nuestras protagonistas y el pequeño Will. Planeta Comic la publica en formato tomo tal y como viene haciendo con las series Aftershock, esa editorial independiente americana que está dejando su impronta con series de muy alta calidad… como es el caso.
La aventura con tintes sobrenaturales y de terror que es Insexts representa una excusa para que Marguerite Bennet nos lance a la cara el grito feminista y reivindicativo que de otro modo podría pasarnos inadvertido. Disfrazada de historia de terror gótico y con el atractivo de los sensacionales dibujos de Ariela Kristantina consigue que entendamos demandas fundamentales que, por obvias, suelen pasar desapercibidas. Un ejemplo… El Arte ha estado durante siglos vetado a la mujer, los artistas eran en su totalidad hombres. Por lo tanto la imagen que se representaba en las obras era del todo un ideal y una ilusión, distante de lo que representa (y es) en realidad, la mujer… quedando esta relegada al papel de musa e inspiradora, pero con 0% de elementos reales. Otro ejemplo… A la mujer se le ha apartado siempre de la educación (hasta bien superado el siglo XX no podían doctorarse las mujeres en muchas universidades), y esa condición de segregación no se tenía en cuenta para tildarlas de incultas o «superficiales».
Suma y sigue. Marguerite nos plantea con furia y firmeza muchos más temas similares que evidencian el carácter secundario al que estaba sumida (y en muchas ocasiones sigue estando) la mitad de la población por el simple hecho de su género.
Esto, que puede ser difícil de encajar para según que lectores, es introducido con fuerza en Insexts, estando siempre como telón de fondo y como motor de la serie. Dos mujeres que se aman y deben luchar por defender su relación que son, a su vez, monstruos. La metáfora es tan evidente como ideal para que el mensaje no tape el medio… ni viceversa.
El cómic está muy bien escrito y no es ni condescendiente con el lector ni amable con su fórmula. En ocasiones se muestra hermoso y bucólico y en otras cruelmente salvaje y gore en extremo, creando una hipnótica combinación de contrastes que no nos deja nunca indiferentes. A esto contribuye sobremanera el dibujo fuerte y con carácter de la artista indonesia que pone especial contundencia en mostrarnos la fortaleza y determinación de las protagonistas, en las formas insectoides y monstruosas que asumen y, vamos con el contraste, en recrear bellísimas escenas de amor y sexo.
Insexts no es una serie al uso y rompe con los convencionalismos de manera intencionada, provocadora e inteligente. Cuando te tiene atrapado con su relato de terror gótico, te escupe a la cara el consentimiento cruel de una sociedad por la invisibilidad y el ninguneo de todo un género que, realizado a través de los siglos, se ha convertido en algo que aceptamos de manera natural… aunque eso no lo exima de ser denigrante ni injusto.
Necesitamos más cómics como Insexts, esplendidos en su ejecución y con mucho talento tras él y, al mismo tiempo, reivindicativos y concienciadores. Las mujeres salen de caza en Insexts, y las presas son aquellos hombres que se creían cazadores e intocables.
- Insexts 2. Planeta Cómic
- edición original. Insexts 8-13 USA. Aftershock
- cartoné. 152 pp. color. 14,95 €