Crítica: «Infinity Strash: Dragon Quest The Adventure of Dai», las crónicas incompletas

Hace años conocimos este shonen llamando a su protagonista Fly gracias a la publicación que, de manera incompleta, lanzó Planeta en nuestro país. Aun así, se trata de una de las aventuras de Dragon Quest que más seguidores tiene… y merecidos. Su anime consta de unos 100 capítulos (en Crunchyroll) y su manga, ahora sí, está siendo publicado por la misma editorial de manera integral .

Por eso este es el mejor momento para la llegada de su juego, avalado por Square Enix, que tiene el largo título de Infinity Strash: Dragon Quest The Adventure of Dai, y que se las prometía con todo a favor. Aunque se trata de un juego con muchas virtudes y donde vamos a pasar largas horas divirtiéndonos, también adolece de un desarrollo y narrativa extraños que no termina de encajar bien en el conjunto del juego.

Para explicarlo mejor os pedimos que sigáis leyendo, porque nosotros lo hemos jugado en PS5 y hemos recorrido su mapa-mundi, espada en mano, para traeros este completo análisis…

La historia de Dai

Desde la propia compañía nos piden restringir los spoilers hasta lo máximo, pero el inicio de la epopeya de nuestro héroe es ya archi-conocida. Dai es un huérfano que vive feliz en la Isla de los Monstruos. Unos monstruos buenos y entrañables que son su familia y una convivencia ideal liderada por el anciano/monstruo del lugar. Pero eso va a cambiar…

Primero llegarán unos falsos héroes y después comenzará a llegar la verdadera amenaza… pero también aliados, como Popp, el aprendiz de mago, y Aván, un guerrero legendario que entrenará a Dai y Popp. Y menos mal, ya que las legiones oscuras están al caer.

Y ya sabéis lo que son los shonen, un particular y orientalizado viaje del héroe en el que nuestro protagonista pasará de aprendiz a salvador de la humanidad.

La narrativa estática se apodera del juego

Este título nos cuenta hasta la mitad, más o menos, las aventuras de Dai. Si lo comparamos con el anime, lo que sucede en el juego nos lleva hasta el episodio 40, más o menos. Y nos narra lo mismo, exactamente, solo que se hace a través de imágenes estáticas bien sacadas del anime, bien mediante el cel shading del juego o bien con ilustraciones realizadas ex profeso. Eso sí, con voces y efectos sonoros increíbles, subtitulados en español, que nos meten totalmente en la historia.

Pero, ¿qué aliciente tiene si ya conoces Las aventuras de Dai? Pues que se nos permite tomar el control del personaje (o de los personajes, que podemos cambiar de uno a otro) en ciertos momentos concretos, cuando hay una batalla importante o cuando hay que realizar algún cometido como, por ejemplo, limpiar un bosque de monstruos.

Así que, conforme nos van contando la historia, se nos despliega el mapa mundi ante nosotros y en él se van abriendo indicadores de misión, que las hay de tres tipos: de combate (cuando peleamos contra un enemigo tipo boss), de exploración (cuando combatimos con enemigos pequeños y tenemos que cumplir un requisito) y de historia (aquí no jugamos y solo somos espectadores).

Combates fáciles y para toda la familia

Para los jugadores más versados, el combate va aser demasiado fácil. Los grandes enemigos que encontramos solo nos pondrán en aprietos en contadas ocasiones y, cuando memoricemos sus patrones de ataque y tengamos calculado su radio de acción, serán un mero trámite. Con los enemigos pequeños, que atacan en grupo, la cosa es más o menos igual. Son bastante inofensivos y nuestro mayor problema ahí será la cámara, ya que no permite fijarla más que en los villanos de gran envergadura.

Para terminar de simplificar el combate disponemos de tan solo un boton de golpe, que podremos combinar, eso sí, con el resto de botones asignados a las magias. Por supuesto, también podemos bloquear y esquivar, teniendo esta última acción la posibilidad de hacer parry y ralentizar el tiempo.

Así vemos que el único elemento jugable del título es demasiado sencillo… para los jugadores más versados en los RPG de acción que, seguramente, serán los que se acerquen a este Infinity Strash. Sin embargo, puede ser (y es) una sensacional puerta de entrada para aquellos que comiencen o que quieran vivir una experiencia cercana al manga/anime y que sea, además, interactiva.

El crecimiento de los personajes

Al ser un juego de rol no hace falta decir que nuestros personajes evolucionan y crecen, haciéndose cada vez más fuertes, hábiles, poderosos… Pero sus parámetros suben automáticamente y solo nos deja elegir los consumibles que llevemos, nuestra vestimenta y los llamados Reminilazos, que son recuerdos del protagonista, en forma de cartas, que al equiparlos nos dan distintas ventajas: más poder de ataque, de magia, etc. Estos reminilazos se pueden combinar o mejorar para que sean más potentes yson uno de los elementos más interesantes (y desde luego original) del juego.

Para conseguir todas estas cosas bien podemos avanzar por la historia, claro, pero también tendremos que internarnos en el Templo del Recuerdo. Una especie de mazmorra donde iremos superando niveles, atestados de enemigos, cada vez más poderosos, donde conseguiremos las mejores recompensas. Hay que medir muy bien hasta donde profundizamos en el Templo, pues si nos matan, perderemos todo lo conseguido.

Esta idea es buena, hasta que se vuelve repetitiva y compruebas que te limitas a luchar contra exactamante los mismo personajes que ya has combatido en la historia.

Visualmente cumple

El aspecto visual es sensacional. Por supuesto la narración, que aunque hecha de imágenes estáticas tienen todo el encanto de la obra de Koji Inada, con ese saborcillo a lo Toriyama. Pero sobre todo los combates, que se desenvuelven rápidos y se intercalan con primeros planos, explosiones, destellos, etc. haciéndo las contiendas coloridas y vistosas.

Puede ser el apartado más remarcable del juego, ya que en esos momentos nos mete dentro del anime y nos hace combatir como si fueramos el mismo Dai… o cualquiera de sus aliados. Esto es así porque podemos alternar el control con cualquiera de ellos, en cualquier momento, pero desde luego, casi siempre apetece jugar encarnando al carismático protagonista.

En este tipo de juegos, en el que los compañeros actúan por su cuenta, la IA es muy importante y debemos decir que responde satisfactoriamente. Atacan cuando hay que atacar, rodean al enemigo, lanzan hechizos curativos si nuestro personaje es golpeado e incluso nos sacan de algún apuro. Y con los enemigos pasa igual, no se limitan a atacar a lo loco y varían sus estrategias en función de la distancia, la vida que les queda…

Concluyendo

Estamos ante un juego que se queda corto en su aspecto jugable y que podía ofrecer algo más teniendo en cuenta los parámetros actuales del género. Que el mapa se vaya desplegando conforme avanzamos por sus siete capítulos y solo nos deje acceder a espacios limitados y concretos es un demérito importante, y combinado con su combate, sencillo al extremo, hace que Infinity Strash sea un título solo apto para los no muy versados en los actionRPG o para los que dan más importancia a la historia que al juego.

Visualmente sensacional y respetando el que es ya un clásico del manga/anime, seguro que gusta a sus legiones de seguidores… pero sabemos que Square Enix es capaz de muchísimo más. Una mezcla de sub-géneros (arena fight, mussou, actionRPG) que no termina de cuajar pero que, aun así, puede dar muy buenos momentos.

Título: Infinity Strash DRAGON QUEST: The Adventure of Dai

Género: RPG de acción

Lanzamiento: 28 de septiembre de 2023

ESR/PEGI: Adolescente/PEGI 12
Desarrollador: Square Enix

Editor: Square Enix

Plataformas: XBOX Series X|S, PlayStation®5, PlayStation®4, Nintendo Switch y PC

Sitio web: https://dragonquest.square-enix-games.com/games/en-us/infinity-strash/