Crítica: “El Día Más Brillante (2 de 2)”, de Geoff Johns, Ivan Reis y otros autores

La irrupción de la luz blanca de la vida como vertebradora de las emociones cósmicas puestas a examen en la Noche Más Oscura redefinió por completo la mitología editorial de Green Lantern de casi 60 años de antigüedad ofreciendo más preguntas que respuestas a pesar de las explicaciones creacionistas del universo DC. Las dudas proyectadas en el lector miraban hacia delante en lugar de hacia tras y se representaban en los personajes resucitados ya citados en la entrada dedicada al primer volumen. En esta segunda entrega descubrimos por fin el objetivo de la linterna blanca y donde conducen los caminos formados para Detective Marciano, Deadman, Aquaman y los demás retornados. Al contrario que lo leído anteriormente, la segunda parte del arco argumental se centrará en los tres mencionados más la pareja “Hawk” y Firestorm en las clásicas historias de redescubrimiento y superación personal para alcanzar un nuevo nivel de autoconocimiento como punto de partida para empezar de cero, siempre y cuando obtengan el visto bueno del ente luminoso, que como su improvisado heraldo, confunde al lector hasta la explicación final.

Empezando por Deadman, elegido involuntario para hallar al campeón definitivo que salvará el alma de la tierra, claramente expresa el sentir del lector ante los acontecimientos de los hechos presentados: la impotencia que le supone el desconocimiento de la entidad a la que representa y su obra. Mientras que el resto de sucesos ocurren en paralelo, el recorrido de Boston Brand es el más complejo. Primero porque no es una historia cerrada a diferencia que las del resto, y segundo porque se sigue con el deseo de obtener por fin la resolución a la aparición de la luz y su relación con el resto de coprotagonistas. La búsqueda de respuestas provocará la aparición de Batman, que se perdió la saga oscura que precedió a esta. Hecho lógico para dar empaque a este arco argumental gracias a uno de los grandes de la editorial y como inspiración de los personajes secundarios repartidos en las dos entregas. Buena excusa para adentrarnos de nuevo en una Gotham conocida por Deadman y así obtener escenas de acción dejadas algo de lado en su anterior aparición más centrada en el drama íntimo que en el exteriorizado. Ahora, más sereno, su viaje permitirá que se mueva por varios escenarios que justificarán la esencia de una historia pura de superhéroes. Sin duda lo más relevante es redescubrir a este peculiar, y a veces inalcanzable personaje, revisitando sus orígenes y momentos familiares íntimos, conectándolos con su forma de ser contemporáneo al encuentro luminoso, donde buscará el perdón de sus actos pasados que su egoísmo y escasa empatía produjeron, para disculparse y labrarse un nuevo futuro editorial más esperanzador. Su sorpresa ante los acontecimientos futuros y la identidad del campeón designado por la entidad luminosa buscará la del lector, para así alcanzar como destino final en esta ficción la redención y el perdón.

Quizá la atención más directa del público se centra en los dos pesos pesados de la saga: Detective Marciano y Aquaman. En el primero predominan elementos de terror y suspense como ocurrió en el primer volumen, pero en este caso con más épica y drama, convirtiendo a D´Kay en una gran villana dentro de la particular cosmogonía del extraterrestre como versión femenina fatal del personaje. Su discurso y métodos alcanzarán íntimamente sus dominios personales permitiéndole zafarse de sus dudas y miedos. Una historia que recorre una escenografía muy interesante como es la del planeta rojo, dando a la obra ese sorbo cósmico que tan buen sabor de boca deja con el colorido contraste entre la geografía marciana y la oscuridad del espacio exterior. A esto se une una subtrama de crimen y castigo donde sus aptitudes detectivescas se pondrán a prueba. Sin duda uno de los momentos más espectaculares y soberbios del arco nos lo va a dar la historia centrada en J´onn J´onzz en un peculiar triángulo amoroso entre este, D´Kay y el Sol. Momentazo.

El arco de Aquaman está más ligado a la historia de manual con joven elegido de por medio, con amenazas pretéritas vinculadas a relaciones paterno filiales con enemigos y aliados en varios frentes en el ambiente natural y habitual del personaje como fondo común. Gráficamente es el más agradecido, un Reis colosal ilustra criaturas marítimas imposibles zombificadas y espectaculares dobles páginas de drama y acción con elementos humanos en medio dotando a la escena de un realismo involuntario pero eficaz en emotividad.

Con Firestorm experimentaremos los últimos estertores de los Black Lanterns con el reverso tenebroso del personaje como líder de la camada negra, enfrentándose al primero en otra odisea espacial con tintes oscuros y terroríficos, colocando en el escaparate el adversario oculto de la entidad luminosa. Dotado con un siniestro sentido del humor, este recurso se posiciona como mejor aliado para que la trama sea amena y terrorífica cuando su propósito es hacer tabula rasa en el Hombre Nuclear y clarificar el camino de los alter ego que le han encarnado.

Por último, el paisaje dimensional y sobrenatural es ofrecido por Hawkman y Hawkgirl donde el peso familiar volverá a hacer acto de presencia, siendo este en todos los actores de la trama el elemento común que los conecta. En este caso el acompañamiento de Zafiro Estelar y la luz del amor se coloca como obvio aliado de la pareja por la naturaleza de su relación, siendo este el aspecto que nos recuerda que todo esto proviene del universo Green Lantern. Los que gusten de la fantasía heroica, espada y brujería en team up con superhéroes más ligados a disparar primero y preguntar después, con elementos de fantasía espacial, desde luego encontrarán aquí el espacio perfecto para desconectar del día a día.

Si los anteriores presupuestos antojan una lectura épica y dramática, de estructura clásica pero con grandes efectos especiales, sin duda la traca final es lo mejor que tiene el volumen. Justo cuando llegan las respuestas y se descubre la identidad del campeón blanco, el nivel de espectacularidad se pone a la altura de los momentos por los que se recuerdan La Guerra de los Sinestro Corps y La Noche Más Oscura. Alejada además de los lugares típicos de los anteriores y centrado en Star City, la majestuosidad de los contrincantes y los enfrentamientos junto con las cuatrofantásticas versiones de los cinco personajes citados anteriormente, consiguen encumbrar una parada más de la hoja de ruta universal johnsiana que arrancó en Green Lantern Rebirth, convirtiéndose en una de las sagas de ficción más grandes y ambiciosas de la editorial que la vio nacer.

Brightest Day 12-24, DC Comics. El Día Más Brillante nº 2, ECC Ediciones. Cartoné. Color. 336 pags. PVP: 30 €. Fecha de edición: Diciembre 2015.