Crítica de Lysfanga: The Timeshift Warrior, para PC (Steam).

Un nuevo peligro se cierne sobre Antala. Tras 500 años de paz, un viejo demonio ha escapado, amenazando con devastar todo.

Siempre han existido unos protectores del reino, los denominados Lysfanga. En esta ocasión, esta misión recae sobre Imë, contando con los poderes otorgados por la mismísima Diosa del tiempo, con los cuales podrá hacer frente a los ejércitos de los Raxes.

Dueña del tiempo.

Con esta premisa se nos presenta Lysfanga: The Time Shift Warrior, una propuesta realizada por el pequeño y desconocido estudio Sand Door Studio y distribuida por Spotlight, by Quantic Dream, sí, los de Farenheit y Heavy Rain, entre otros. En España contaremos con la distribución del título por parte de Meridiem Games.

¿Y qué nos ofrece Lysfanga: The Time Shift Warrior? Pues una propuesta jugable bastante interesante, al introducir ideas frescas que mezclan todo lo bueno de un hack’n’slash con una parte táctica que nos invitará a plantearnos nuestra estrategia a la hora de enzarzarnos en cada una de las luchas que encararemos a lo largo de esta trepidante aventura.

Acción con cabeza.

Con una vista cenital, manejaremos a Imë, una protagonista que posee el don de controlar el tiempo. Esto se traduce en el hecho de que deberemos ir avanzando a través de las ciudades, mientras vamos descubriendo datos de la trama, conversando con algún que otro personaje. Pero mientras vamos avanzando, nos encontraremos con zonas en las cuales se nos presentará una horda de enemigos a batir, y aquí es donde basaremos la mayoría de la mecánica jugable del título.

Cuando nos encontramos con una «arena«, la pantalla se detendrá, permitiéndonos mover la cámara por el entorno, con el fin de identificar a los enemigos que allí se encuentran. Mentalmente deberemos pensar como vamos a actuar, antes de pulsar un botón para comenzar la acción. A partir de aquí, podremos mover libremente a nuestra protagonista, disponiendo de un tiempo límite antes de que se cierre el bucle temporal y muramos. En ese momento, volveremos a aparecer, viendo como las acciones realizadas con nuestro otro yo, se repiten en forma de sombra. Esto hace que podamos movernos hacia otro objetivo, colaborando con nuestros clones, con el fin de poner fin a todos los enemigos.

Una novedosa forma de juego.

Como podréis observar, esta forma de juego es bastante novedosa, y la verdad es que está muy bien implementada, pues nos permite una total libertad a la hora de ejecutar la aniquilación de los enemigos que se nos plantean, algunos de los cuales tienen una forma de ser eliminados que se nos presentará como un puzle, pues pueden haber enemigos interconectados que deben morir al mismo tiempo, o bien otros con escudos, a los cuales deberemos atacar de frente en una linea temporal y de espaldas, mientras nuestra sombra ataca de frente, entre otros enemigos que nos aparecerán a lo largo de la extensa historia del título.

Lo que limitará nuestra acción será el número de clones que podremos ir sacando, consiguiendo un número mayor gracias a potenciadores que iremos obteniendo durante nuestra exploración. Aparte, iremos desbloqueando ataques especiales, con los cuales ganaremos ventajas en combate, así como otros efectos mágicos que nos permitirán ser más poderosos a la hora de enfrentarnos a nuestros enemigos.

En cada una de las arenas se nos propondrá un tiempo para finalizarlas, lo cual hará que deseemos repetir las mismas, con el fin de batir el tiempo estimado de combate, dando ese punto de pique que los completistas disfrutarán en todo momento.

Táctica y acción a partes iguales.

Pese a tener esta vertiente táctica en combate, la libertad que se nos da a la hora de ejecutar las acciones resulta muy satisfactoria en todo momento, sobre todo al disfrutar de la victoria, permitiéndonos avanzar y explorar nuevas zonas, deseando ver lo que nos vamos a encontrar más adelante.

Y es que encontraremos una amplia variedad de desafíos y enemigos diferentes, los cuales pondrán a prueba nuestros instintos. Al principio todo parecerá muy sencillo, pero conforme avancemos, iremos sintiendo la tensión a la hora de afrontar un nuevo desafío, a la par que disfrutamos de la satisfacción de conseguir el éxito.

Y básicamente en esto se basa el título, en ir avanzando a través de diferentes escenarios, dentro de una historia que nos llevará unas diez horas aproximadamente para finalizar, con el punto de poder rejugar e intentar batir los tiempos de combate fijados.

Hay que decir que estamos ante un título lineal, que nos va llevando sin dar mucho margen a la exploración, más allá de rebuscar en los alrededores para encontrar algún que otro potenciador antes de seguir adelante y encontrarnos con una nueva arena, o bien alguna parte de conversación y parte de la trama.

Gráficos.

A nivel gráfico, tal y como hemos comentado en anteriores líneas, se nos presentará una visión cenital, con algunos juegos de cámara en alguna que otra zona, mostrándonos una vista trasera de la protagonista o lateral, entre otras.

El diseño de personajes, así como la protagonista, tienen un acabado que no queda nada mal, con animaciones bastante correctas y un diseño a nivel global bastante convincente, sin llegar a ser espectacular, pero consiguiendo buena calidad.

El diseño del mapeado del juego nos sumerge en diferentes ciudades, con juegos de diferentes alturas y efectos 3D, pero unicamente a nivel visual, pues la mayoría de las veces no podremos recorrer la mayoría de las zonas que podemos ver en la distancia.

En general, la fusión de animaciones con el diseño del entorno, queda bastante bien integrado. Sin llegar a ser sobresaliente, pero ofreciendo una experiencia visual bastante satisfactoria en su conjunto.

Sonido.

El apartado sonoro queda bastante bien ejecutado, con alguna que otra melodía que nos acompañará a lo largo de la aventura, sin llegar a ser memorables, pero sin hacerse cansinas a la larga. Por otro lado, los efectos de golpes, hechizos, etc., gozan de buena calidad a nivel general.

Dispondremos también de voces en inglés, con subtítulos en castellano en todo momento, contando con una interpretación buena a nivel general.

Conclusión.

El próximo 13 de febrero podremos contar con el lanzamiento de este título, el cual goza de una originalidad que me atrevería a tildar de «novedosa«, por su mezcla de acción directa con su parte estratégica, pero consiguiendo momentos de acción frenética, recomendable encarecidamente ser disfrutada con un buen mando.

Desde el 5 hasta el 12 de febrero, podéis disfrutar de la demo del título, con el fin de haceros una idea de todo lo que puede llegar a ofreceros. Pese a encontrase actualmente unicamente disponible para PC, tengo la corazonada de que Lysfanga: The Timeshift Warrior dará el salto a consolas, pues tiene un potencial muy fuerte para ser disfrutado por usuarios de diferentes plataformas.

Tenéis una propuesta con ideas frescas esperándoos. ¿Os atrevéis a aceptar el reto?