Crítica de Helvetii, para Nintendo Switch.

Hoy nos adentramos en la mitología Celta, dentro de un mundo fantástico, en el cual tres valientes guerreros se aventuran en aras de impedir que un ser corrupto se adueñe del control de la rueda del tiempo.

Os vamos a dar buena cuenta de Helvetii, un título desarrollado por Team KwaKwa y distribuido por Red Art Games, el cual verá la luz el próximo 2 de febrero, siendo lanzado para Nintendo Switch, PS4 y Steam.

La corrupción por el poder.

Tras una introducción, en la cual se nos mostrará como el ansia de poder de una persona puede acabar condenándole, podremos comenzar la partida, donde se nos dará a elegir entre tres personajes diferentes para iniciar nuestra aventura: un guerrero(Divico), un zorro con cuerpo humano (Renart) y una mujer druida(Nammeios), cada uno de los cuales con sus habilidades propias.

Lo primero que llama la atención es el hecho de que los escenarios se componen de pantallas generadas proceduralmente. Apareceremos en una primera pantalla, pudiendo dirigirnos hacia la izquierda, derecha, arriba o abajo, según se haya configurado al cargarse cada uno de los dos actos que componen cada nivel.

Niveles cortos y hordas de enemigos.

Podremos ver en la parte derecha de la pantalla un minimapa, indicándonos donde estamos, así como hacia donde podemos dirigirnos. Al desplazarnos hacia otra pantalla, la misma quedará bloqueada por unos escudos de energía, momento en el cual nos aparecerá una horda de enemigos que deberemos eliminar para poder seguir. Una vez eliminados, nos aparecerá una pantalla con las estadísticas de combate y nuestro rango en batalla, pudiendo continuar hacia otra nueva pantalla.

El objetivo en cada uno de los actos reside en encontrar al jefe final para derrotarlo, tras lo cual podremos avanzar hasta un nuevo capítulo.

Nuestro personaje podrá saltar, realizar un ataque cuerpo a cuerpo, otro a distancia y un ataque especial, todo ello enlazable en forma de combos espectaculares que nos darán mayor puntuación al realizarlos correctamente.

Mejoras, energía…

Nuestro personaje contará con una barra de energía y otra de maná, con la cual podremos realizar los ataques a distancia o los golpes especiales. Si nos quedamos sin maná, deberemos esperar a que se recargue, pudiendo realizar únicamente los ataques cuerpo a cuerpo.

En nuestro camino podremos encontrarnos cofres con monedas, energía y maná. Algunos de estos cofres requerirán estar en posesión de llaves. Las llaves para los cofres las podremos conseguir al acabar con algún enemigo, o bien en las tiendas que podremos encontrar en cada acto.

En las tiendas, tendremos como anfitrión un búho, con el cual podremos dialogar para conocer algunos aspectos de la zona en la que nos encontremos, o bien acceder directamente a su tienda, para hacernos con alimentos que recuperarán nuestra energía y otros que nos darán más fuerza, vitalidad o inteligencia, entre otros. También podremos hacernos con otros objetos valiosos para nuestro periplo.

El poder de los Dioses.

Explorando, también podremos encontrar unos altares, en los cuales, dando como ofrenda una parte de nuestra energía y maná, conseguiremos que un Dios se nos una como un ataque especial añadido, lo cual nos será de gran utilidad, sobre todo ante los temidos jefes finales.

Cuando acabamos una zona, y antes de pasar a la siguiente, apareceremos en un campamento con los otros dos personajes principales del título, pudiendo conversar con ellos y descubriendo algunos aspectos de los mismos y de la historia. Luego podremos descansar para recuperar fuerzas de cara a un nuevo capítulo, o bien jugar a los dados, apostando monedas que podremos doblar con suerte, o bien perderlas…

Muerte y resurección. Prueba otra vez.

Pero lo más curioso de este título reside en el hecho de que si nos quedamos sin energía, se habrá acabado nuestra aventura, debiendo comenzar de nuevo desde el principio, sea cual sea el capítulo en el cual nos encontremos. Esto nos puede dejar descuadrados en un principio, pero pronto descubriremos que el personaje con el que hayamos jugado, conservará todas las mejoras que hayamos conseguido hasta el punto donde hayamos llegado, lo cual hará que nos resulte un poco más fácil avanzar de nuevo.

Por otro lado, si accedemos al menú de pausa del juego, nos aparecerá un número de semilla, con el cual podremos acceder a una partida en cualquier momento, con las cualidades del personaje que estemos manejando en cada momento. Así, si hemos aumentado nuestra energía, o tenemos cualquier tipo de mejora de habilidades, comenzaremos la partida con las mismas, pudiendo aniquilar a los enemigos más débiles de los primeros niveles de una forma más sencilla.

La satisfacción de avanzar.

Como he comentado anteriormente, en las primeras partidas puede resultar un tanto tedioso tener que volver a comenzar para intentar llegar al acto en el cual hemos perdido la vida, pero conforme cojamos el punto y vayamos acumulando monedas, vida y otros objetos, teniendo en cuenta que los actos son relativamente cortos, la cosa ya se pone más divertida, pues sentiremos el poder en nuestras manos, mejorando aún más a nuestro personaje y avanzando cada vez un poco más. Sobre todo, teniendo en cuenta que llega un punto en el cual disponemos de monedas suficientes para comprar una poción para resucitar con la mitad de nuestra energía total. Con esfuerzo y dedicación iremos avanzando cada vez más y disfrutando de las virtudes de este curioso título.

Antes de pasar a hablar del apartado gráfico hay que comentar que dispondremos de dos modos de juego, normal o difícil, pero aparte de esto, si accedemos a las opciones del juego, se nos permitirá modificar el daño que pueden hacernos los enemigos, pudiendo subirlo a un máximo de 200% o bajarlo hasta el 50%. De este modo, tendremos una pequeña ayuda a la hora de conservar la energía si bajamos el daño, o una mayor dificultad si decidimos subirlo al máximo. Por defecto, viene fijado al 100%.

Gráficos.

A nivel gráfico, tanto los escenarios como los personajes y enemigos están dibujados a mano, mostrando un fantástico diseño 2D lateral con animaciones muy bien trabajadas, así como detalles en cada uno de los diseños y movimientos activos en cada pantalla que gozan de muy buena calidad a nivel global.

En un principio, los diseños y colores me recordaron al Hades, por su estética de dibujos animados y por su temática mitológica, aunque en su ejecución, las diferencias son del cielo a la tierra, no porque sean peores en este caso, sino por su concepto, totalmente diferente y gozando de una gran originalidad.

Los efectos en los combates, sobre todo contra los jefes finales, dotan al título de espectacularidad, haciendo disfrutar al jugador de una experiencia muy divertida en todo momento. Se nota fluidez y variedad, con introducción de diferentes enemigos, así como mini jefes transitorios que intentarán ponernos las cosas difíciles en todo momento.

Tendremos también algunos escenarios con zonas de plataformeo, así como zonas en las que caer pueden ralentizarnos o acabar con nuestros huesos en un abismo, o bien pinchándonos con fosos repletos de estacas, entre otras cosas.

Sonido.

A nivel sonoro, Helvetii cuenta con una banda sonora que acompaña bastante bien a la acción, subiendo de intensidad en momentos álgidos y acompañándonos en todo momento por nuestro viaje.

Contaremos con efectos sonoros de golpes, explosiones y gritos de los diversos enemigos, así como las voces de nuestros protagonistas en la batalla. Así mismo, también contaremos con diálogos entre los protagonistas, con doblaje en inglés y todo subtitulado y localizado al castellano, con el fin de que la experiencia sea disfrutable en nuestra zona.

Conclusión.

Helvetii es un título humilde, pero con una propuesta bastante original, siempre que le demos el tiempo justo para ir saboreando todo lo que puede llegar a ofrecernos. El hecho de tener que empezar de nuevo una y otra vez, recuerda a los juegos de antaño, donde no se regalaba nada. En este caso, me ha venido a la mente algún que otro juego de páginas web donde vamos avanzando hasta un punto, consiguiendo mejoras y volviendo a comenzar desde el principio tras comprar las mismas para avanzar un poco más. Pero Helvetii va más allá, pues esa mezcla de hack’n’slash por momentos, con toques RPG, plataformas, diferentes escenarios cambiantes y grandes jefes finales, puede proporcionarnos horas de diversión y un pique continuo por seguir avanzando en busca de conocer más sobre la historia.

Tenéis una propuesta jugosa con la que disfrutar, llena de arte, sencilla pero con un punto original. La magia de los videojuegos reside en atraparnos, y Helvetii lo consigue, siempre que nos adentremos en su mundo una y otra vez, con el fin de hacernos con el control del mismo.

Personalmente, en un principio me quedé un poco en off, como un meh… Pero tras volver a la carga, quedé convencido de que estaba ante un buen título. ¿Os atrevéis tras todo lo descrito a darle una oportunidad? Yo creo que no os arrepentiréis, ya me diréis que tal la experiencia.