Crítica de Cotton Fantasy, para Nintendo Switch
Valoración
GRÁFICOS
SONIDO
JUGABILIDAD
DURACIÓN
Un cute'em up fantástico
Vuelve una nueva entrega de Cotton, con una belleza artística digna de ser disfrutada de principio a fin. Da gusto recibir títulos que antes se quedaban en oriente. Los amantes de este tipo de juegos estamos de enhorabuena.
El 30 aniversario de la saga Cotton dio el pistoletazo de salida el pasado año, con la llegada a occidente de Cotton Reboot, del que dimos buena cuenta en nuestra crítica:
Esta saga, tal y como comentamos entonces, había tenido un gran éxito en Japón, siendo bastante complicado acceder a algunos de sus títulos lanzados en tierras niponas. Pero parece ser que hay bastante gente interesada por estos lares, y muestra de ello es el hecho de que después de Cotton Reboot, hemos recibido Cotton Boomerang y Cotton 2, a los cuales se les suma el título del que hoy vamos a hablar.
Vuelve Cotton.
Desde el pasado 20 de mayo, todos los amantes de los cute’em up podemos disfrutar de Cotton Fantasy (Cotton Rock’n’Roll en Japón). Un título totalmente nuevo de la saga que nos trae ININ Games, contando con el estudio Saizensen para su producción, y tomando como base el trabajo realizado por Rocket–Engine con Cotton Reboot.
Y, ¿qué nos ofrece esta nueva entrega? Pues, para empezar, una historia muy similar a las ya conocidas. Alguien está haciendo desaparecer los Willows, y el hada Silk recibe el encargo de investigar que está ocurriendo, debiendo volver a convencer a Cotton para que la acompañe en busca de los Willows perdidos, con lo que ello conlleva, ya que la brujita de la túnica azul sólo desea comer esos maravillosos dulces.
Disparos a tope.
Embarcándonos en el modo historia, se nos ofrecerá la posibilidad de elegir entre 6 personajes diferentes en un principio, pudiendo desbloquear alguno más después. Cada uno de estos personajes dispondrán de unas características propias a la hora de lanzar ataques, lo que asegura horas de rejugabilidad para disfrutar del control de cada uno de ellos.
Sea cual sea el personaje que elijamos, veremos aparecer un mensaje advirtiéndonos de que la historia se va a basar totalmente en Cotton, no apareciendo durante nuestra aventura ninguna referencia a los otros personajes jugables, más allá de que los podamos controlar y pasarnos todo el juego con ellos, pero la gracia está en vivir toda la historia con Cotton, lo cual no desmerece el hecho de poder disfrutar de los niveles con los otros personajes.
Niveles frenéticos.
Deberemos recorrer un total de 16 niveles que mezclan los típicos con un jefe final, con otros más tipo bonus stage, donde disfrutaremos de una vista en tercera persona mientras intentamos hacernos con el mayor número de tazas de té posible.
Entre nivel y nivel nos irán apareciendo secuencias de la historia, con dibujos estáticos y alguna pequeña animación en la cual iremos descubriendo que está pasando y porqué, lo cual no quiero destripar, pues al ser un juego relativamente corto, lo mejor es disfrutarlo totalmente con detalle.
Los niveles de acción tienen una vista con scroll lateral 2D, mezclado con efectos 3D que logran dar mayor profundidad en su conjunto. Así, deberemos abrirnos paso a base de disparos y ataques especiales, pudiendo recolectar cristales de colores que variarán nuestro estilo de disparo, siempre que llevemos a Cotton. Con los otros personajes, partimos con unos estilos de disparo predefinidos que podremos ir alternando o potenciando al subir de nivel.
Cotton puro y duro.
Hay que decir que estamos ante un juego bastante difícil, pero al contar con la posibilidad de continuar cada vez que se nos acaban las vidas, podemos pasarnos todos los niveles de forma rápida. El reto está en intentar avanzar sin tener que continuar, y para ello dispondremos de un modo training, con el cual podremos practicar en cada uno de los niveles que hayamos desbloqueado previamente.
Por otro lado, la puntuación que vayamos obteniendo al aniquilar enemigos, puede quedar registrada en un ranking mundial, incitándonos a pulir nuestra destreza para escalar puestos con nuestra puntuación. Hay que tener en cuenta que si continuamos, perderemos toda la puntuación acumulada hasta el momento. Si queremos estar entre los mejores, deberemos sudar lo nuestro, y ahí reside la gracia del juego, como pasaba en los arcades de la época de los 8 y 16 bits.
Las partidas son frenéticas. Deberemos estar esquivando disparos en todo momento, sobre todo al llegar a los jefes finales, donde nuestra pericia puede dar al traste con el más mínimo fallo. Estudiar cada movimiento y repetir niveles una y otra vez, será la clave para conseguir una puntuación final digna.
Gráficos.
A nivel gráfico, el título mejora un poco más a lo visto en Cotton Reboot, con gráficos más pulidos, animaciones estupendas y una bella paleta de colores bien ejecutada en el diseño de niveles y efectos.
El fundido de 2D y 3D dota a Cotton Fantasy de una experiencia de juego excelente, dentro de este tipo de títulos. Se disfruta cada uno de los niveles, con un diseño técnico que denota un gran trabajo por parte del estudio. Las partes en las que jugamos en tercera persona dan un respiro y hacen disfrutar al jugador en todo momento.
Las secuencias correspondientes a la parte de la historia del juego, gozan de buena calidad, con dibujos que siguen la línea de sus predecesores. Aunque no estaría de más haber realizado las secuencias con dibujos animados. Habría ganado mucho en el conjunto el hecho de darnos ese puntito más de experiencia disfrutable.
Sonido.
A nivel sonoro contaremos con melodías basadas en remixes de anteriores títulos. Será fácil reconocer algunos temas, con algún que otro aliciente melódico más que borda este apartado con buena nota en general.
Los efectos de disparos, explosiones, gritos y otros tipos de efectos, quedan bien ejecutados, asegurándonos una grata experiencia de juego en todos los aspectos.
Las voces están dobladas en japonés, disponiendo de subtítulos en español, lo cual se agradece, al igual que pasó con anteriores entregas.
Conclusión.
Poco más podemos decir de Cotton Fantasy. Es un juego divertido, adictivo y con una duración que depende de como queramos jugar. Si queremos jugar como toca, es decir, sin continuar, tenemos para muchas horas de juego. Y aparte, dispondremos de tres niveles de dificultad, lo cual nos reta a intentar el más difícil todavía.
Tenéis el título disponible para PS4, Nintendo Switch y Microsoft Windows. Si os apetece un buen mata mata, con dosis de humor desenfadado y gráficos bonitos y coloridos, aquí tenéis una de las mejores propuestas actuales.
¿Otro caramelito? ¡Ops! ¡Ha desaparecido!