Crítica de Avatar: The Last Airbender – Quest for Balance, para Xbox Series S.

El título que hoy os traemos está basado en la aclamada serie de Nickelodeon, la cual, a lo largo de tres temporadas nos sumergió en las aventuras de Aang, un niño de 12 años que es el último superviviente de la tribu de los Nómadas del Aire.

Aang tiene la misión de dominar los cuatro elementos: aire, fuego, agua y tierra, con el fin de restaurar el equilibro del mundo. Pero no será tarea fácil, ya que su periplo no estará exento de peligros.

De la serie al videojuego.

Con esta premisa, Bamtang Games ha querido plasmar toda la esencia de la serie original, presentándonos Avatar: The Last Airbender – Quest for Balance, un título disponible para PC, Nintendo Switch, PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One y Xbox Series X|S, contando con su distribución gracias a Game Mill Entertainment y Meridiem Games, en su edición física.

Comenzando el juego se nos contará la historia, cuando Aang, el último Avatar, fue encerrado en un bloque de hielo durante 100 años, hasta que fue encontrado por Katara y su hermano Sokka. De este modo, y siguiendo fielmente el guion de los diferentes capítulos de la serie, encontraremos un título que mezcla diferentes tipos de jugabilidad para ofrecernos una aventura divertida y accesible para todo tipo de público.

Diferentes mecánicas, diversión asegurada.

Así, encontraremos zonas en las cuales deberemos ir explorando, resolviendo puzles, realizando misiones principales y secundarias y encarando algún que otro combate. Por otro lado, como plato fuerte, encontraremos jefes finales a los que enfrentarnos, debiendo encarar algunos con nuestras artes de combate, o bien, en ocasiones, teniendo que resolver algún que otro puzle para salir victoriosos.

Aparte, nos encontraremos en ocasiones con fases en las cuales iremos en una montura, debiendo cruzar una zona a base de esquivar obstáculos, saltar, sumergirnos en el agua en alguna ocasión y tratar de llegar al final de la misma.

También habrá ocasiones en las cuales deberemos abrirnos paso por zonas con alguna que otra plataforma y diferentes puzles que solucionar, utilizando nuestras habilidades. Estas zonas se nos presentan como una especie de pruebas, con las cuales adquiriremos dominio con los elementos.

Esta mezcla de mecánicas se irán alternando a lo largo de nuestra aventura, haciendo que la experiencia resulte bastante divertida, a la par que sencilla. Esto hace que a la larga, el juego pueda pecar un poco de repetitivo, pero tiene un punto que absorbe y nos hace seguir jugando y disfrutando de una experiencia que, sin llegar a ser lo más de lo más, entretiene, sobre todo a aquellos que sean fans de la serie.

Combates y jefes finales.

Cuando encontramos enemigos a lo largo de las zonas de exploración, los combates quedan un poco descafeinados, ya que dispondremos de diferentes combos, aunque estos quedan poco fluidos. Se echa en falta un poco más de pulido en este aspecto, pues hubiese quedado un título más redondo si se hubieran cuidado más las luchas contra los enemigos, así como contra los jefes finales.

Destaca, eso sí, la cuidada argumentación, con diálogos entre los personajes y secuencias fieles a los dibujos animados, ampliando por momentos el universo de Avatar y mostrándonos diferentes personajes a lo largo de 18 capítulos. Esto hace que podamos disfrutar de un título que nos proporcionará bastantes horas de diversión.

Como aspecto destacable, podremos manejar, aparte de Aang, a Katara y a Sokka, entre otros. Lo bueno es que cada uno de estos personajes contarán con un árbol de habilidades, con el cual podremos mejorar sus habilidades, aparte de la posibilidad de conseguir dinero para comprar alguna que otra mejora y consumibles, lo cual nos dará ese toque RPG interesante que nos mantendrá intentando avanzar por toda la aventura.

Solos o en compañía.

Si jugamos solos, habrá momentos en los cuales nos acompañen los personajes que iremos encontrando a lo largo de la aventura, pudiendo intercambiar entre unos y otros en todo momento, sobre todo a la hora de resolver algún que otro puzle, pudiendo dejar un personaje encima de un interruptor, para pulsar el siguiente y conseguir así abrir una puerta, por ejemplo.

Pero lo mejor es que también podremos jugar en modo cooperativo, disfrutando de la experiencia con algún amigo en modo local, lo cual hará que la experiencia sea más satisfactoria si cabe.

Gráficos.

A nivel gráfico, Avatar: The Last Airbender – Quest for Balance cuenta con un acabado artístico impecable, plasmando fielmente todo el arte visto en la exitosa serie de dibujos. Por un lado, dispondremos del diseño de los personajes con un cell shading rematado con texturas 3D y unas animaciones bien trabajadas, con el fin de transportarnos a la esencia de lo que pudimos ver a través de los capítulos.

Disfrutaremos de emplazamientos fieles a la serie también, con elementos bien detallados en todo momento y un buen colorido en su conjunto, haciendo que la fusión de texturas nos hagan disfrutar de una experiencia bastante satisfactoria en su conjunto.

Destacan los efectos de reflejos en agua, brillos en zonas iluminadas y zonas con humo o fuego, entre otras, dando más vida a los entornos y haciendo que disfrutemos de cada uno de los escenarios que nos encontraremos a través de sus casi 14 horas de juego.

La inclusión de secuencias animadas, así como las conversaciones, con algunas viñetas tipo cómic y un buen arte a nivel general, ponen la guinda casi perfecta al producto que se nos ofrece.

Como punto débil, los personajes dentro del juego carecen de expresiones faciales, haciendo que en muchas ocasiones veamos conversaciones entre ellos con una expresión estática, sin movimiento de labios ni gestos. Esto resta un poco de calidad al conjunto final, ya que de haber trabajado un poco más estos puntos, podría haber sido más de lo que finalmente ofrece.

Sonido.

A nivel sonoro, podremos disfrutar de algunas de las fantásticas melodías de la serie, aunque se han desaprovechado en cierto modo, pues por momentos puede quedar un tanto repetitivo, quedando incluso en alguna ocasión un poco vacío de contenido en algunas zonas. Se podría haber sacado mucho más partido de las composiciones originales.

Las voces gozan de un buen doblaje en inglés a nivel general, contando con subtítulos en castellano, lo cual es de agradecer, con el fin de seguir la historia con una mayor fluidez.

Los efectos a nivel general quedan bastante bien, creando un ambiente bastante realista, dentro del mundo que se nos presenta, con golpes, explosiones, etc.

Conclusión.

Avatar: The Last Airbender – Quest for Balance es un título divertido para todos los públicos, con una mezcla de mecánicas bastante interesante que conseguirá atraparnos de principio a fin siempre que busquemos un juego divertido, con un buen puñado de horas de diversión y sin grandes pretensiones a nivel general.

Los amantes de la serie tienen una cita obligada con este título, y aquellos que gusten de una experiencia no demasiado exigente, divertida y con la posibilidad de disfrutar solos o en compañía, tienen en este juego una buena opción a tener en cuenta.

¿Conseguiréis dominar los elementos? Aquí empieza vuestra aventura.