Crítica de Alaloth: Champions of The Four Kingdoms, para PC (Steam).
Valoración
GRÁFICOS
SONIDO
JUGABILIDAD
DURACIÓN
Un RPG tan exigente como satisfactorio.
Alaloth: Champions of The Four Kingdoms es un RPG que nos presentará un gran desafío, con combates que recuerdan a los Souls, así como cantidad de objetos y armas para conseguir, mientras disfrutamos de una experiencia muy recomendable a todos los niveles.
Cuatro eran los reinos que vivían en paz antes de la llegada de Alaloth: La Republica de Larastir, El Reino Bendecido de Edherest, La desolación de Baga y la extensión de Karak-Hohn. Cada uno de estos reinos estaban formados por una colección de casas, las cuales defendían el reino.
Pero llegó Alaloth, y con él, la destrucción y sumisión de los reinos. Hasta que un grupo de campeones, decididos a restaurar la paz, emprendieron un viaje, con el objetivo de aniquilar a Alaloth y a todas las bestias que ocupaban los cuatro reinos.
Alaloth.
Con esta premisa nos llega un título realizado por Gamera Interactive para PC, un estudio italiano que ha trabajado para ofrecernos un RPG duro, complicado y repleto de diversión para aquellos jugadores que busquen un gran reto con el que disfrutar de varias horas de juego.
El título fue lanzado en Early Access para Steam hace un año aproximadamente, y se espera contar con la versión final dentro de este 2023, aún así, os podemos asegurar que el título dispone actualmente de ingredientes necesarios para que disfrutéis de una aventura espectacular y original por todo lo que puede llegar a ofrecernos, con su principio y su final, dado que se han ido añadiendo mejoras continuadas. Podríamos decir que el juego principal está finalizado, pero aún habrá algún que otro añadido extra.
Creando a nuestro campeón.
Al comenzar a jugar, y tras una introducción, la cual os hemos resumido brevemente en las primeras líneas de esta crítica, pasaremos a la selección del modo de juego, pudiendo jugar como un único héroe, o bien hacer que haya otros campeones por el mapa luchando por la victoria, lo cual hará el juego un poco más difícil de afrontar, aunque con mayores recompensas.
Una vez seleccionado el modo, pasaremos a elegir nuestra raza, pudiendo seleccionar entre humano, elfo, enano u orco. Tras la selección, pasaremos a definir el estilo de lucha de nuestro héroe, pudiendo usar armas pesadas, arma y escudo, dobles armas a dos manos o bien armas largas.
¿De qué lado estaremos?
Luego tocará el turno de elegir nuestra casa, de entre First Bells, Karak, Kagra-Keh, Ferehk-Quas, Doh-Decah, Teres-Toil, Nereh-Keh, Watchwardens, Delven-Keh o Berem-Hohn. Cada una de estas casas tienen un trasfondo más afín a un tipo de raza concreto.
Siguiendo con la creación del personaje, deberemos decantarnos por el lado de los Dioses, Demonios o Neutral, lo cual nos facilitará las relaciones con unos u otros personajes. Luego pasaremos a elegir la Deidad a la cual adoraremos, contando con mejoras de salud, crítico, magia, etc., dependiendo de cual elijamos, de entre ocho diferentes.
Pasaremos seguidamente a la creación del personaje, pudiendo seleccionar género, color de piel, pelo, cabeza, edad, cicatrices, vello facial y color del pelo. Tras esto, podremos asignar un nombre a nuestro personaje y comenzar la aventura.
Entrenar para sobrevivir.
En un principio apareceremos en una zona de entrenamiento, donde se nos enseñaran los controles básicos para manejarnos en combate. Podremos realizar ataques ligeros, ataques pesados, parry, esquivas, correr, seleccionar objetivo en combate y lanzar cuchillos a distancia. Es interesante el poder practicar los movimientos, ya que cuando nos metamos de lleno en materia, la cosa será más complicada.
Una vez finalicemos el entrenamiento, apareceremos en lo que parece ser nuestro hogar. Aquí dispondremos de un arcón, donde podremos almacenar objetos de inventario. Por otro lado, se nos permitirá, si disponemos de dinero, contratar los servicios de varios especialistas en armas, cocina u otras virtudes, los cuales nos facilitarán algunos de los trabajos que podremos realizar también personalmente. Más adelante os comentaremos un poco todo lo que podremos hacer.
Y bien, tras hablar con el Rey de nuestra zona y encomendarnos este la tarea de alzarnos con la victoria contra Alaloth, podremos salir al mapa del mundo y comenzar nuestro periplo.
Un amplio mapa que recorrer.
En el mapa del mundo apareceremos como un icono, el cual podremos mover libremente, teniendo en cuenta que por las zonas de montaña, ríos y otras zonas de difícil acceso, nos moveremos más lentamente, al tiempo que el tiempo irá pasando.
Mientras nos movemos por el mapa, podremos ver diferentes tipos de enemigos moviéndose también, pudiendo acercarnos a ellos y entrar en combate, o bien huir y refugiarnos en alguna ciudad.
Encontraremos diferentes ciudades, a las cuales podremos acceder, cambiando la vista en modo cenital, a la par que podremos pulsar un botón y ver toda la zona, con una marca de donde nos encontramos. En las ciudades podremos hablar con diferentes NPC, los cuales podrán ofrecernos misiones o información que se irá añadiendo a nuestro diario. También se nos permitirá ir a cantinas, descansar, comprar equipo, víveres, pociones… Incluso caballos para desplazarnos más rápidamente.
Aparte de las ciudades, habrá también otros emplazamientos más pequeños con estatuas, bellos parajes o cataratas magníficas, entre otras. Pero lo que realmente tendremos que ir buscando, son los santuarios de los diferentes enemigos, ya que en ellos encontraremos el verdadero reto del juego.
Luchar para alzarnos con la victoria, o morir…
Deberemos adentrarnos en los diferentes santuarios distribuidos por el mapa, combatiendo contra diversos enemigos y jefes finales, con el fin de conseguir desbloquear el acceso al reino central de Alaloth. En un principio, nos va a resultar bastante complicado encarar cada uno de estos santuarios, ya que una vez entramos, podremos salir victoriosos o perecer en el intento, ya que no tendremos posibilidad de escapar una vez hayamos accedido.
Encontraremos hordas de enemigos, cada vez más complejos de encarar, con bestias e insectos gigantes que pondrán a prueba nuestras habilidades en combate. Lo bueno es que si conseguimos nuestro objetivo, tendremos buenas recompensas, tanto conforme nos movamos por cada uno de estos emplazamientos, encontrando pequeños tesoros, como al finalizar, pudiendo abrir un cofre con cuantiosos objetos y dinero, entre otras cosas.
Revivir y volver a intentarlo.
Si morimos, apareceremos en un templo, revividos y con varios días perdidos, así como parte de nuestro inventario menguado. Si conseguimos ganar, iremos subiendo de nivel, pudiendo gastar diferentes puntos de experiencia en subir fuerza, velocidad, etc. así como desbloquear ataques especiales, los cuales se nos irán poniendo en cuatro ranuras diferentes para utilizarlos.
Y en eso se basará el juego, en ir moviéndonos por el mapa, cumpliendo misiones y completando los diferentes santuarios, mientras vamos ganando experiencia y mejorando nuestro equipo, pero esto no es todo, ya que según sea nuestra clase, podremos también aprender hechizos, cocinar, reparar nuestro equipo, preparar nuevas pociones, y un montón de sorpresas más que deberéis descubrir por vosotros mismos.
La importancia de un buen equipo.
Una gran parte del juego deberemos craftear todo lo posible para ir consiguiendo dinero y experiencia, de cara a conseguir que nuestro campeón esté a la altura, ya que dependeremos de una barra de energía y otra de estamina, la cual en un principio nos bajará muy rápidamente al efectuar cualquier ataque, debiendo escabullirnos para que se recargue y poder volver a atacar. Con el tiempo, esta barra de estamina podrá ser más longeva, permitiéndonos realizar numerosos ataques continuos y destrozar a todo aquel que ose interponerse en nuestro camino.
Aparte de todo lo descrito, también podremos reclutar compañeros. Estos compañeros serán NPCs que se unirán a nosotros, ayudándonos en las áreas de combate. A lo largo de nuestra partida se nos podrán unir hasta un total de cuatro personajes diferentes, afines a si somos partidarios de los Dioses, del Demonio o Neutrales.
Gráficos.
A nivel gráfico, Alaloth: Champions of The Four Kingdoms puede recordar a RPGs clásicos, por su vista cenital y sus entornos cuidados, pero tiene ese toque moderno a nivel de texturas y modelado de los diferentes personajes, así como unas animaciones bastante dinámicas, las cuales dotan al título de una calidad bastante buena a nivel global.
Los juegos de luces, las diferentes localizaciones, los cambios entre día y noche y cambios climáticos, entre otros, hacen que disfrutemos descubriendo nuevas zonas, encarando nuevos enemigos… En suma, haciéndonos disfrutar de la magia de un buen RPG en todo su esplendor, mezclado con esos combates tan «Souls«, en los que moriremos bastantes veces antes de hacernos un poco con el control, con un fondo negro y un mensaje como el que podréis apreciar en estas líneas.
Sonido.
A nivel sonoro, el título cuenta con una buena banda sonora, la cual nos irá indicando la intensidad de la acción en todo momento, subiendo sus acordes en los momentos de tensión y dándonos una tregua cuando todo se calma.
Por otro lado, los efectos sonoros están bien conseguidos, con sonidos de choques de espadas, cortes sangrientos, gritos terroríficos, explosiones, etc. Todo bien cuidado para proporcionarnos una experiencia a nivel global bastante satisfactoria.
Conclusión.
Sinceramente, Alaloth: Champions of The Four Kingdoms ha resultado ser una de las gratas sorpresas que he descubierto este año. Sí, se ha lanzado Diablo 4, y recientemente el brutal Baldur’s Gate 3, pero este juego que os estamos hoy comentando, os puede dar también mucho juego, aparte de exigiros sudar la gota gorda para sobrevivir a cada reto.
Sus preciosos emplazamientos, el ir descubriendo partes de la historia conforme avanzamos, el buen hacer del equipo de desarrollo para conseguir pegarnos a la partida deseando mejorar y alcanzar cada reto. Es un juego muy exigente, pero muy satisfactorio en todos los aspectos, y el hecho de conseguir nuevas armas, armaduras, poderes, etc., nos invita a probar nuestro poder contra nuevos enemigos, a la par que le cogemos el punto al manejo en combate.
Por cierto… Lo hemos jugado en PC, pero cuenta la leyenda que es posible que pronto podáis llevaros una grata sorpresa los jugadores de consola. También hay que decir que, actualmente, el título solo se encuentra en inglés, pero la leyenda también habla de numerosas lenguas traducidas en breve… Es por ello que os aconsejamos seguirle la pista a Alaloth: Champions of The Four Kingdoms. Os aseguramos que os va a sorprender bastante.