Crítica: Darksiders 2

Esta es una de las dos reseñas que tengo pendientes por traer a la web, junto con Ni No Kuni, y que ya había comentado en el podcast. Se trata de Darksiders 2, que como su nombre indica es la secuela de Darksiders. En el primer juego nos metíamos en la piel el jinete del Apocalipsis Guerra, y en esta ocasión a su hermano Muerte, que se encargará de restaurar el caos que se había producido en la primera parte.

En este juego vamos a tener puzzles y saltos al más puro estilo de Tomb Raider y Prince of Persia, combates que no tienen nada que envidiar a los de God of War o Devil May Cry, y toques de action-RPG como Diablo, pero todo hecho de una forma muy heterogénea. Todo esto en una estructura de mundo abierto, donde el progreso del personaje significa que se nos abran nuevos mundos, a los cuales accederemos a través de portales. Cada mundo tiene sus propias zonas, personajes, misiones y una estética única que enriquecen enormemente la experiencia del juego, tanto estética como argumentalmente.

El cuanto a la duración, si tenemos solo en cuenta las misiones principales, son unas 20 horas, y si vamos descubriendo todas las partes del mundo, misiones secretas y secundarias, podemos doblar fácilmente el tiempo invertido en este título. Si que es verdad que cuando llevamos unas horas jugando, vemos cierta reiteración en la estructura de los puzzles y en ese sentido pierde la originalidad, que se compensa con otras aspectos como por ejemplo los combates, entre los que veremos por ejemplo uno contra un gigante de piedra al estilo de Shadow of Colossus. El sistema de combate cuenta con combos de más de 40 movimientos distintos, que combinaremos con las habilidades que vayamos adquiriendo mediante un árbol de habilidades (valga la redundancia).

El diseño gráfico del juego corre de la mano de Joe Madureira, dibujante de cómics que muchos de vosotros, si no todos, conoceréis por sus trabajos por ejemplo en BattleChasers, Ultimates 3, Avenging Spiderman, y que fue uno de los primeros que pusieron de moda el amerimanga, o por lo menos uno de los que más éxito tuvieron.

En este segunda entrega, a diferencia del primer Darksiders, podremos subir de nivel e ir adquiriendo nuevos objetos, tanto armas como armaduras y amuletos, mediante recompensas, diferentes sistemas de compraventa, o al encontrar cofres ocultos. Además, cada objeto que equipemos veremos como afecta en el aspecto del personaje, cosa que en su predecesor no sucedía.

Cuando terminamos el juego, desbloqueamos un modo de arena para obtener nuevos objetos y poder pasarnos de nuevo el juego en niveles de dificultad mayores.

Cabe destacar que es un juego totalmente traducido y doblado al castellano, y además con muy buena calidad tanto de voces como de texto.

Para mí es uno de esos juegos que han pasado desapercibidos o no se les ha prestado toda la atención que merecen, pero a pesar de esto lo considero uno de los mejores de su generación y además de los que más me entretuvo en su día.