Crítica: “Batman. Los confines de la Tierra”. Las cuatro pruebas de Batman.

Scott Snyder cambia de registro y nos introduce en una aventura gráfica con jefe final. Si en “Yo, mi peor enemigo” nos encontrábamos con una historia marcada por la acción desenfrenada en tiempo real con la alternancia de flashbacks para justificar las actuaciones de todos los personajes, en este caso nos ofrece un compendio de historias psicológicas conectadas por un hilo narrativo común.

La primera parte de “Los Confines de la Tierra” ofrece una propuesta visual muy panorámica excluyendo el bocadillo como elemento narrativo capital ofreciendo un microrelato ilustrado. Eso permite un mayor apoyo al dibujante Jock a la hora de ejecutar las atmósferas heladas del entorno y la angustia asfixiante que transmite su áspero estilo. En este sentido creo que el análisis de Mr. Frío (que no tuvo interpretación previa snyderiana como el resto de enemigos del volumen) y la aparición de su siniestro séquito, da como resultado un relato fantaterrorífico más que digno, totalmente alejado de los ambientes clásicos de Batman.

La segunda fase, ejecutada por Tula Lotay presenta (en mi opinión) un aspecto gráfico muy parecido al de Mike Allred pero mucho menos limpio por la intencionada degradación en el tratamiento de color, más afín a lo realizado por Jock, lo que le aleja de cualquier premisa caricaturesca del primero. Es interesante el planteamiento que hace Snyder con Poison Ivy al recordarnos las grandes posibilidades del personaje no tanto como villano per se sino como antagonista. Como representante físico de una parte fundamental del universo, como mandataria de una fuerza primordial, como protectora de un patrimonio ecológico que está más allá del bien y del mal. Siendo un relato en el que nos encontramos con una conversación pendiente entre los dos, creo que abre muchas opciones a que Ivy pueda ser analizada desde planteamientos muchos más ambiciosos por quien lo considere oportuno. Al margen de esto y su notoria invitación al debate que es su mayor virtud, no escatima en el suspense y en la sorpresa.

Giuseppe Camuncoli interpreta el discurso esquizofrénico del Sombrerero Loco en el tercer acto. Hacía tiempo que no me encontraba con el italiano y observo un acabado más depurado y pulido que en otras ocasiones, posiblemente al descartar angustiosos plazos de entrega. Esa evolución y delicadeza dan como resultado unas anatomías y expresiones grotescas y enfermizas perfectas para el viaje onírico y alucinógeno de Batman. Respeta el mismo recurso narrativo a la hora de exponer lo que piensan y lo que dicen los personajes a través de perpetuos cuadros de texto, lo que permite adentrarnos de forma más creíble a los distintos escenarios ilusorios desarrollados por su adversario.

Volvemos con Jock en la conclusión, de ritmo y ejecución más convencional. Al fin y al cabo nos encontramos con el gran desenlace, con las correspondientes explicaciones y resoluciones. Eso resta en mi opinión contundencia en los discursos, remarcando por tanto la auténtica intención del Snyder, aprovechar una minúscula excusa argumental para reimaginar a los cuatro villanos del arco.

Al igual que en la ocasión anterior, continúan los episodios de complemento protagonizados por Duke. Francesco Francavilla se reúne de nuevo con el escritor en los capítulos finales de “La Rueda Maldita” para deleitarnos con su iluminación y estilo pulp caricaturesco. El dibujante se sale a la hora de diseñar una historia fascinante y compleja, que junto con los potentes hallazgos narrativos altamente funcionales para con la inmersión en la lectura, ponen punto final a una historia totalmente fascinante.

All-Star Batman 6-9, DC Comics. All Star Batman vol. 2, ECC Ediciones. Cartoné. 144 págs. Color. Pvp: 15,95 €.