Crítica: Aqua Kitty Milk Mine Defender

Los gatos han dominado youtube e internet por completo, y ahora están dispuestos a conquistarnos en esta loco y divertido arcade desarrollado por Tikipod, que hemos probado en PlayStation 4.

Algo de historia, pero no mucho.

En primer lugar, cabe decir que Tikipod es un pequeño desarrollador británico, que a pesar de solo tener dos juegos 100% propios, como este mismo y RockBoshers DX, también se encarga de colaborar en el apartado artístico y de animación en otros proyectos como: Gravity Crash Ultra, Stealth Inc, Fluidity Spin Cycle, Stealth Bastard, Stranger’s Wrath, Gravity Crash, o el emblemático Eufloria.

Algo maravilloso que tenían los juegos de recreativas de antaño eran sus planteamientos locos y temáticas imposibles, y en este juego volvemos a vivir esta genial sensación, ya que nos encontramos ante un arcade 16 bits de los de toda la vida. Aqua Kitty: Milk Mine Defender es un adictivo shoot’em up de desplazamiento lateral, en el que nos meteremos en la piel de un adorable gatito para tratar de obtener recursos alimentarios en el fondo marino, una especie de leche de formación natural ante una repentina escasez de leche en la superficie terrestre. Los que quieran encontrar una explicación científica a por qué la leche brota del fondo del mar, y porque los gatos pueden pilotar submarinos, este no es su juego.

Aunque no se cuenta mucho sobre la historia y el trasfondo del juego, algo normal en shoot’em up, podemos intuir por el diseño de los escenarios, que en algún han existido humanos, una civilización destruida, a través de las ruinas, edificios y otros elementos que encontraremos en el fondo del mar.

Jugabilidad noventera.

La jugabilidad básica del juego es una mezcla entre los matamarcianos de toda la vida como el Space Invaders, y algo de Tower Defence, ya que no solo de matar vive el gato.

Podríamos decir que es un juego similar a Resogun y Defender de Atari 2600, pero con un enfoque en el que se tiene en cuenta más el aspecto táctico. Tendremos tres preocupaciones principales: la salud del gatito, los mineros, y las mejoras de armas. Nuestro objetivo será movernos rápidamente, ya que los mineros serán constantemente secuestrados por los enemigos, una especie de pulpos robóticos. Así que, la velocidad de reacción será fundamental, así como nuestra habilidad para esquivar el infierno de balas que se nos vendrá encima.

Para evitar el secuestro de los mineros encargados de sustraer la leche, nuestro mejor aliado será un mini radar en la parte inferior de la pantalla, donde veremos como los pulpos secuestradores son marcados como puntos rojos. En cuanto veamos uno de estos pulpos llevándose a un minero, tendremos que dirigirnos a toda velocidad a dicho punto y evitar que salga a la superficie, ya que si nos quedamos sin mineros, no superaremos el nivel.

Está será la dinámica, que irá aumentando de dificultad a través de los 25 niveles principales repartidos en cuatro áreas diferentes, y al final de cada una de estas áreas tendremos que enfrentarnos a un contundente final boss.

Hay tres modos de juego disponibles en Aqua Kitty: Fácil, Normal y Arcade. Los modos de juego fáciles y normales tienen que avanzar por los niveles, con una actualizaciones automáticas de nuestro equipo. En cuanto al modo Arcade, es similar pero hubiera sido mejor llamarlo modo “Hardcore» ya que contamos con tan solo una vida para superar el juego. También existe un nivel infinito para aquellos que desean limitarse a disparar cosas y no preocuparse por el rescate de los mineros. Todos los modos de juego podremos disfrutarlos solos en compañía de un amigo ya sea en la misma videoconsola, o modo online.

Aqua Kitty es tremendamente divertido y nos recuerda a los antiguos juegos 16 bits pero con una nuevo look retro-moderno. Cada aspecto del juego fluye a la perfección, como el líquido elemento donde nos despalzaremos para obtener el preciado y escaso alimento.

Aspectos técnicos.

Gráficamente estamos ante un conseguidísimo aspecto artístico, una variedad de colores noventera a más no poder, que resultará atemporal, y que está acompañada además de por una jugabilidad adictiva, por una banda sonora que nos mantendrá entretenidos durantes horas, y que tenéis disponible en la web oficial del juego, y que nos recordarán a los días de la C64 y la Amiga.

Como podéis imaginar, la versión que hemos probado (PS4) cuenta con todas las ventajas de las videoconsolas de Sony, es decir, obtención de trofeos, y guardado en la nube entre PlayStation 4 y PlayStation Vita. Sin duda Aqua Kitty es un juego que vale la pena probar, un homenaje a las recreativas de los 90, un juego sin pretensiones que nos da lo que parece que ofrece.