Crítica: The Amazing Spiderman – Innecesario rejuvenecimiento
Resumen de la Crítica
Valoración
Andrew Garfield interpreta (o reinterpreta) a Peter Parker, un destacado estudiante al que sus padres abandonaron en su niñez y que vive una complicada adolescencia junto a sus tíos (Martin Sheen y Sally Field). La aventura comienza cuando Peter descubre un antiguo maletín con documentación confidencial de su padre, Richard Parker, científico que trabajaba para Oscorp. Esto le lleva a conocer a un viejo amigo de su padre, el doctor Curt Connors (Rhys Ifans) y, al mismo tiempo, a ser picado por una araña genéticamente alterada. La relación con Connors se irá complicando al convertirse éste en "El Lagarto", viéndose Peter obligado a detenerle como su alter ego, Spiderman. Entre medias, la bella Emma Stone como Gwen Stacy, la novia de Peter, y su padre, el Capitán de policía Stacy interpretado por Denis Leary.
La situación es la siguiente. Sony poseedora de los derechos del Hombre Araña, no podía dejar de perder esta oportunidad para darle a las generaciones venideras nuevas raciones de nuestro amigo y vecino Spidey, tanto en lo cinematográfico como en lo videojueguil. ¿Lo hace bien? Sí. ¿Podría haberlo hecho mejor? También.
Es cierto que si jugamos a este juego de los reboots, sorprender es complicado. Las bases están sentadas y más aún cuando se trata de un personaje como el trepamuros. Su origen es el que es. La muerte de su tío, es un mal inevitable. La historia está escrita. Ahora bien, siempre se puede ir más allá. No hace un año, la línea Ultimate de Marvel dio a luz a un nuevo Spiderman. Miles Morales, un muchacho de color que recibía unas habilidades similares a las de Peter y se convertía en su sucesor. ¿Por qué no tirar por ahí para contarnos algo nuevo? En lugar de eso, se ha vuelto a relatar lo que Raimi ya nos comenzó a contar en 2002.
Mejores efectos digitales adaptados a esta década (y al 3D) entran bien por los ojos en esta época de playstation 3. La música de Horner mola. Ver un nuevo villano como el lagarto también se disfruta, aunque podían haberle sacado más partido a la dualidad Connors/Lagarto, que además está en la misma linea exactamente que Norman Osborn: científico obsesionado, voces en la cabeza, mejora genética… Comenzar a intuir un nuevo hilo argumental centrado en los secretos de los Parker también es disfrutable aunque, de momento, sabe a poco. Ahí está también la escena post créditos que viene a decirnos que puede que, dentro de unos años, si llega a completarse una nueva trilogía del personaje, ésta apertura nos parezca una pieza interesante. De momento, cumple con las expectativas y con su fin comercial, poco más.
¿Lo mejor? La relación Peter/Gwen, la misma que al principio daba miedo y nos llevaba a pensar en una película más "romanticona" se convierte en motor y motivación del héroe y de la trama. Allí donde Mary Jane era el objeto a salvar, Gwen Stacy demuestra que también tiene agallas. Los lanzaredes creados por Peter, fieles al cómic. Que el hombre araña sea perseguido por la policía y el modo en que se va ganando la confianza de los neoyorquinos también se agradece.
¿Qué se echa en falta? El estilo desenfadado de Raimi y el toque "nerd" de Tobey Maguire. Una escena como la del mítico beso boca abajo… Webb le ha dado un tono más profundo al personaje, algo más dramático y Garfield se convierte en un Peter Parker más duro. Este amazing Spiderman no bromea tanto, tiene sus momentos, claro, pero le falta un puntito. Echamos también de menos las contrapartes: a J.Jonah Jameson (El Capitán Stacy no le sustituye en absoluto como anti-arácnido), el trabajo en el Daily Bugle, las peleas clandestinas… y la frase: Un gran poder conlleva una gran responsabilidad.
Y la gran pregunta ¿Es esta la historia jamás contada de Spiderman? Bueno, si obviamos lo que ya nos habían contado, que es la mayoría, sí, algo nuevo queda. Nueva novia, nuevo villano, nuevas minitramas, nuevo traje… poca cosa.
Las comparaciones son odiosas, pero: Del Batman televisivo al de Burton y de éste al de Nolan, hay claras diferencias tanto a nivel visual como en lo psicológico del personaje. Saltar del Spidey de Raimi al de Webb, es como ir del hombre murciélago de Burton al de Shumacher.
Así pues, The Amazing Spiderman no es mala película. Divierte y entretiene. A los chavales les encantará y los "marvelómanos" acudirán sin dudarlo (desde luego no es el explosivo blockbuster que fue "Los Vengadores" pero señores, el listón está alto), pero, a parte del rejuvenecimiento en cuanto a efectos digitales e imaginería se refiere, poco aporta. Peter Parker es quien es y este film no nos da acceso a una nueva dimensión emocional. Lo dicho, por desgracia, innecesaria. Aún no era su momento.
»Amazin Spiderman 2″ fue una mierda jaja