Resumen de la Crítica
Valoración
Llegar a la universidad y entrar en un grupo vocal a capela es lo más.
Con esta premisa arranca “Dando la nota” (“Pitch Perfect”, en versión original) mostrando unos tintes de autoparodia brutales. Porque por todos es bien sabido que las actividades relacionadas con el arte, por interesantes que puedan parecernos a unos frikis como nosotros, nunca han contado con el apoyo popular en círculos llenos de jóvenes hormonados (ni de la sociedad en general, para qué engañarnos), y que ahora venga Jason Moore (creador de series como “One Three Hill”) a contarnos la fama y la gloria que puede aportar pertenecer a uno de estos grupos no puede parecernos sino una burla. Quizá una original comedia que destripara sin piedad los tópicos más teen del cine americano.
Pero no. Resulta que va en serio; y mucho. Que unirse a un conjunto de canto a capela te impulsará hacia el éxito profesional y personal, y que todas tus otras metas quedarán eclipsadas por el sueño universitario de cantar en un coro y conseguir un novio.
Y así es como el argumento acaba siendo absurdo, increíble, para dejar a un lado el gamberrismo que promete y terminar revolcándose en los propios estereotipos que desea evitar. Porque sí que es cierto que algunos de sus gags cómicos más locos desatan carcajadas (más bien nerviosas) por aquello de la vergüenza ajena, quizá salpicada por algún comentario ingenioso o simplemente bizarro. Pero esto se ve del todo anulado por el mensaje global de la cinta.
Con semejante estampa, se ha rescatado a alguna que otra joven actriz de mirada agradable y rostro virginal, que caiga bien al espectador y que sea lo suficientemente conocida para ayudar a vender el proyecto. Hablamos de una Anna Kendrick que, pese a su empeño por desprenderse de su encasillamiento en este rol con dramas como “50/50”, ha terminado por protagonizar otra comedia teen ambientada en un campus universitario que más se parece a un instituto.
Quizá Anna Kendrick no logra alejarse del papel de adolescente que le persigue desde “La Saga Crepúsculo”, pero al menos nos ha sorprendido con una voz de lo más fresca y dulce con la que ha logrado, por su parte, hacerse un hueco en Broadway.
Y es que si hay algo que realmente se encuentra a favor de la cinta son las voces del reparto (que no la música, sobremezclada y caótica en ocasiones, con canciones que no pasan de cuatro nuevos éxitos); brillantes y jóvenes actrices entre las que destacan Brittany Snow, Anna Camp (que no han salido mucho del terreno de las series) o Rebel Wilson (“La boda de mi mejor amiga”, “Despedida de soltera”), a la que han añadido para intentar hacernos creer que había algo de gamberro detrás de todo esto.
Una idea que ya nos han contado demasiadas veces y cuyo lanzamiento no sería criticable si realmente cumpliera lo que vende.
