Crítica: ‘El Caballero Oscuro: La Leyenda Renace’, de Christopher Nolan. Final perfecto, trilogía perfecta

Nolan ha dirigido 8 películas (la primera de ellas inédita en España). Ninguna mala. Ninguna simplemente mediocre. Todas se mueven entre lo notable y lo magistral. Por otro lado, es de los pocos directores actuales que hace cine abiertamente comercial pero no por ello menos personal. Y sin tratar como un idiota al espectador, pues sus cintas requieren que este esté bien atento durante toda la función (tan sencillo como eso), y además, siempre animan a debatir a la salida del cine. Recibe el apoyo de la crítica y la taquilla. Y el último dato: Ha cogido a uno de los tres personajes de cómic más famosos de la Historia y con él ha revolucionado el cine de superhéroes.
 

Con esta información sobre la mesa, no resulta nada extraño que de un tiempo a esta parte, haya recibido no pocas críticas. Al fin y al cabo, es un director sumamente exitoso, y cuando algo tiene éxito… Tarde o temprano va a ser atacado. Y la cinta de su autoría que más ataques ha recibido es precisamente la más taquillera, 'El Caballero Oscuro'. Bastante curioso lo de esta peli, porque en el momento de su estreno casi todo eran alabanzas, y aunque hoy la mayoría seguimos adorándola como el primer día*, y está muy bien considerada, hay un grupito de individuos que ya usan con frecuencia ESA palabra: Sobrevalorada. Sobra decir que no gustó a todo el mundo cuando se estrenó, así que no tengo nada que reprochar a los que desde el principio se quedaron a medias con el film. No, mi problema está con los que, con el paso de los años, han ido pasando del amor al odio y han dado una importancia desmedida a fallitos que son imperceptibles si no los buscas (curioso que esto no haya ocurrido con 'Batman Begins'… ¿Quizá sea que nunca ha tenido tanto reconocimiento a pesar de merecerlo igualmente? No olvidemos que es una cinta de orígenes INMEJORABLE). A esto quería llegar. Hay que desear encontrarlos. Como pensando "venga, no puede ser tan buena, algún tropezón debe haber…". Y me vais a perdonar, pero a mi esto me parece una memez. No hay películas perfectas. Simplemente hay cintas en las que lo bueno es tan bueno y de  tal magnitud, que ni se notan las fisuras. Empeñarse en encontrarlas para poder rebajarle uno o dos puntos la nota mental que todos ponemos a las pelis… Como que no lo veo. Es romper la magia intencionadamente.

Y en estas circunstancias… BUM. Se estrena la última entrega de la trilogía. La continuación directa de 'El Caballero Oscuro'. La expectativa es máxima. Y algunos, con la misma postura que la adquirida recientemente con la enterior entrega, habrán ido con los cuchillos afilados, tan concentrados en encontrar fallos que, oh, paradoja, ni siquiera prestan atención a la peli y por tanto ven errores donde no los hay. Está de más decir que este grupo no ha entrado en la película en ningún momento, no se ha dejado atrapar por esa sombra de murciélago que por tercera vez nos absorbe…

… Y no nos suelta hasta el final. Porque esta es, creo, la cinta de la saga que más rápida e irremediablemente me ha enganchado. He llegado a la conclusión de que el motivo son los personajes, ni más ni menos. Ya en las otras entregas eran geniales, pero en está ocasión, el retrato que se hace de ellos (tanto de los de siempre como de los nuevos) es mucho más cercano, humano y emocional. Se ha dicho mucho que Nolan es un director "frío", pero con esta película lo desmiente. He estado con el corazón en un puño toda la peli, porque, si bien, como ya he dicho, todos los personajes me han parecido sensacionales, es uno el que destaca sobre el resto. Me refiero, por supuesto, al propio Batman. Nolan, y sobretodo un Christian Bale que se corona (ahora sí que no admito discusión sobre quién es el mejor Murciélago), lo dan todo. Nos dan un Bruce maravilloso, pletórico, con una evolución magistral. Es en esta entrega donde más se profundiza en el personaje, donde más se le humaniza, donde más sufre. Vemos a un Batman más Batman que nunca, con las ideas más claras que nunca, más obstinado, valiente, luchador y admirable. Para aquellos que adoramos al personaje, esta cinta no deja de darnos motivos para pensar una y otra vez "buah, madre mía, es que es el mejor". Enorme. Porque esta peli no es un simple final de trilogía, sino que supone un homenaje a todo lo que hace tan genial al personaje.

Pero no es el único grande. Hablemos de Bane. Un villano totalmente diferente al Joker. Si aquél era locura, caos y anarquía, este tiene un plan preciso y calculado, no deja nada al azar. Si Joker era todo lo opuesto a Batman, Bane es un reflejo oscuro del Murciélago. Y acojona. Imponente, infalible, frío, con un poderío físico abrumador y haciendo gala de una brutalidad despiadada en su técnica de lucha, Bane desprende una auténtica sensación de invulnerabilidad. Impresionante el instante en el que consigue hacer que un hombre (Dagget) se cague de miedo simplemente poniéndole la mano suavemente en el hombro y diciendo "¿Realmente crees que mandas aquí?". Y esto es solo un ejemplo. Pero al margen de esto, hay más en el personaje. Se ha comentado mucho que un giro al final de la cinta (en breve hablo de ello) se carga a Bane como villano, pero no podría estar más en desacuerdo. Creo que ese giro lo convierte en una figura trágica, en un monstruo clásico de terror. Le hace más humano, le da un trasfondo dramático que redondea al personaje. Lo único que queda en el aire es el porqué de ese acento ¿Gallego? En el doblaje español…

El tercer personaje clave es el que más expectativas me generaba: Catwoman. Mi querida Selina. Con este personaje, Nolan nos hace un "¡Zas! ¡En toda la boca!" colosal, por varios motivos. El más evidente concierne a Anne Hathaway, por la que, hace muchos meses, ninguno dabamos un duro por ella. Arrebatadora en todas sus escenas, es desde ya mi Catwoman favorita (tampoco era muy difícil, solo competía contra Michelle Pfeiffer. ¿Halle Berry? No sé de que hablas…), pues solo con su primera (y genial) aparición ya estaba viendo a la Selina de las viñetas. Básicamente, se ha hecho realidad todo lo que le pedía al personaje. Divertida, descarada y sexy, es una ladrona noble a su manera que, a pesar de acabar siendo una aliada, como no podría ser de otra manera, también es la culpable de que Batman lo pase tan mal. Detalles como que, cuando ve regresar a Bruce después de tanto tiempo, ponga una cara de alivio y emoción desmedida para, a continuación, comportarse de manera superficial y despreocupada, o que sea ella la que lleve la iniciativa en su relación con Batman (corregidme si me equivoco, pero en todos estos años de historia, creo que él nunca la ha besado a ella, simplemente se deja hacer), me han ganado por completo. Mención especial merece el cuerpazo de Hathaway, porque es lo más cerca que vamos a estar nunca de ver en pantalla las imposibles curvas que lucen las mujeres en los cómics.
 

Por otro lado, gracias a Selina, Nolan se quita la espinita de no habernos dado un personaje femenino para el recuerdo en toda su filmografía. De hecho, el tío lo hace tan bien que uno acaba con ganas de ver más a Selina, y eso que no sale poco precisamente.

Otro personaje digno de mención es el de Joseph Gordon-Levitt. Robin. ¿John Blake? al carajo, después de saber cual es su segundo nombre no pienso llamarlo de otra manera. Esto del nombre, por cierto, me parece de una brillantez extrema. De esta forma, Nolan puede decir que sí ha introducido al personaje (demasiado importante en la mitología de Batman como para obviarlo), pero… Es una versión libre. La suya. Claramente basada, eso sí, en el mejor Chico Maravilla, Tim Drake. Ni nos mintió al decir que no estaría ni ha cometido el error de no presentarnos la figura del ayudante/sucesor. Lo dicho, brillante. Y magnífico su progreso a lo largo de la cinta. De que forma tan sencilla, efectiva y creíble, por cierto, descubre quién es Bruce realmente, descubrimiento (hecho hace años, fuera de pantalla) que además sirve como un sólido punto de unión entre ambos. Un personaje clave que, creo, ha sido una grata sorpresa para todos.

Pero venga, hablemos ya del personaje sorpresa, el que más polémica ha generado. Talia al Ghul. Debo empezar diciendo simplemente… ¡JA! ¡TOMA! ¡LO SABÍA! Qué queréis que os diga, me produce una gran satisfacción haber sido de los que no se han bajado del burro en todos estos meses, por mucho que la propia Marion Cotillard afirmase con claridad que solo era Miranda Tate, sin ningún tipo de identidad secreta. Solo Miranda Tate. Pues toma. Pero debo decir que no resulta previsible en absoluto, pues nos presentan al personaje como aquella que debe llenar el vacío dejado por Rachel en detrimento de Selina, pero cuando finalmente se cambian las tornas, aún sorprendiendo, no desentona por que Nolan ha dejado pistas durante todo el film. No comprendo muy bien que es lo que tanto ha molestado de este giro, pues cuadra a la perfección, completa la trama de Ra's al Ghul en 'Batman Begins', da un nuevo matiz a Bane (atención a la mirada de Tom Hardy mientras se expone la verdad), supone la introducción de otro personaje clave para la mitología de Batman, y, sobretodo, nos da una pequeña y tremenda historia narrada en flashbacks que empezamos a conocer durante uno de los mejores segmentos del film y no se cierra hasta este giro final. Lo dicho, no comprendo las quejas.

Entrando ya en la historia, creo que nos encontramos ante un film más emocional que la anterior entrega, un film que, como dije antes, apunta más al corazón que al cerebro. Empieza de forma inmejorable, presentando las piezas del puzle, un puzle en el que todo acaba encajando a la perfección.  Vemos la terrible situación de Bruce, débil y aislado de todo, al que ya ni siquiera Alfred (con muy pocas escenas, pero todas importantísimas) puede ayudar. Se le cae a uno el alma a los pies. Es a partir de la aparición de Selina cuando empieza a "reactivarse" poco a poco hasta llegar a una de LAS ESCENAS de la película, que es la reaparición, tras 8 años, de Batman. Se van las luces en plena persecución entre la poli y los hombres de Bane. Vemos la sombra del Batpod a toda velocidad. Y por fin… Aparece, con la música de Zimmer (enorme, como siempre) a todo volumen. ¡Buff!. Pura emoción. A partir de este momento la cinta pilla un ritmo vertiginoso… Hasta el primer enfrentamiento entre Batman y Bane. Sabemos que no va a acabar bien. Fuera música. Solo la voz de Bane y los jadeos y gruñidos de Batman. Asistimos a una lucha brutal en todos los sentidos, que prueba que Nolan ha aprendido mucho desde 'Batman Begins'. Y todo acaba de la única forma posible: CRACK. Muchos dudábamos de llegar a ver esa mítica escena, pero si, aquí está. Bane rompe a Batman, lo secuestra, y el ritmo se ralentiza notablemente. No es que pegue un bajón, es que necesita su tiempo para mostrar la situación de Gotham (vista principalmente a través de Robin y Gordon, quién, por cierto, se convierte por completo en el personaje del cómic), necesita tiempo para que cale en nosotros el pesimismo, para ver como avanza el plan de Bane… Y necesita tiempo para mostrarnos como el Caballero Oscuro… Renace. Oh. Dios. Mío. En serio, solo por este segmento ya vale la pena ver la película.  Es aquí donde la admiración por Bruce alcanza el punto álgido. Sentimos su dolor, su miedo, su rabia, y su extraordinaria fuerza de voluntad. Y cuando por fin asciende… Madre mía. Esta escena debería quedar atada para siempre a la palabra "épica". Pelos de punta.

Y volvemos a Gotham. El viaje personal de todos los personajes finaliza, todas las piezas ocupan su lugar, y se desata un clímax apoteósico, una última media hora que tiene de todo y que termina de redondear la peli. Es aquí, por cierto, donde queda claro que la elección de Bane como villano ha sido acertada, pues esta saga se merecía una final fight de este calibre. Una lucha muy diferente a la primera, con, esta vez sí, la música de Zimmer añadiendo emoción y épica.

Ahora, sobre el final. Realmente nos creemos que Bruce muere, pero si lo pensamos bien, no podía acabar de esa forma. Me explico: Todo fan sabe que la cruzada personal de Batman solo puede acabar con su muerte. Pero el caso es que las historias de Batman, por muchos años que pasen, seguirán publicándose, nunca terminarán. Así que Bruce jamás va morir/desaparecer de forma permanente. Nunca. Simplemente no puede ser. Y esta regla se extiende a las adaptaciones cinematográficas. Pero claro, una saga de películas sí debe finalizar, aunque en unos años sea "rebooteada". Así que la cosa estaba clara: Había que cerrar la trilogía. Pero sin matar a Bruce. ¿La única salida? Pasar página, como se dice al inicio. Nolan usa el comodín del piloto automático que creó al principio de la película y nos da un final sencillamente perfecto. Inmejorable. Batman se convierte, por fin, en un símbolo, en una leyenda que nunca acabará, algo que continuará generación tras generación, y que ahora cae en manos de Robin.
 

Y Alfred, en la terraza. Cruce de miradas con el que fuera su señor, donde se dicen todo lo que se tienen que decir. Y al lado de Bruce, Selina. Porque, si este final llegase a hacerse realidad en los cómics, es la única que podría acompañarle.
 

Robin llega a la Batcueva. Zimmer, como en el final de la anterior entrega, sublime. Fundido en negro.

Y ahora, a no ser que seáis aliens sin corazón, es cuando os levantasteis en la sala y aplaudisteis sin parar.

Porque esta película no se merece menos.

Probablemente se acabará convirtiendo en mi favorita de la trilogía, por la misma razón que 'La Última Cruzada' es mi favorita de la saga de Indy. Es la película donde mejor está el héroe, donde más se profundiza en él, donde más humano es. Es la película más épica de todas, y la más emotiva.
 

De hecho, espero que con el tiempo sea con la trilogía 'Indiana Jones' con la que se hagan equivalencias, porque espero que, como con aquella, de igual cuál sea nuestra favorita: Todos estaremos de acuerdo en que las tres son maravillosas.

Nada más. Ante esta trilogía, redonda, inmejorable, magistral, para el recuerdo, lo mejor que se ha hecho, y seguramente se hará, sobre un superhéroe, solo se puede decir una cosa:
 

GRACIAS, NOLAN.

* No debería incluirme, porque cuando se estrenó, 'El Caballero Oscuro' no me gustó nada. Era joven, estúpido, y mi acompañante, con un comentario inoportuno, me fastidió la película, que me fue conquistando a base de revisionados.

Aclaro de nuevo, que si fuiste ilusionado a ver la peli y te decepcionó, o si esta trilogía nunca te ha convencido, no tengo nada que reprocharte. Es más, te animo a debatir en los comentarios.