Coloquio en la Universidad de Valencia con Alberto Rodríguez, director de «La isla mínima»
El pasado miércoles 11 de febrero la Universidad de Valencia contó con la presencia del premiado Alberto Rodríguez, director de «La isla mínima«, que se alzó con diez galardones en la última entrega de los Premios Goya.
Tras la proyección de la película en el Salón de Actos de la Facultad de Filología, Traducción y Comunicación, se llevó a cabo un coloquio moderado por Manuel de la Fuente, en el que participaron Santiago Renard y Jenaro Talens (profesores de Comunicación Audiovisual), y durante el cual el realizador habló a los asistentes sobre el proceso de creación de la película.
LA LECTURA POLÍTICA
Si bien se trata de una brillante película policial ambientada en una zona tan descentralizada como las marismas del Guadalquivir, lo que hace especial a «La isla mínima» no es sino esa lectura política la que provoca que la trama quede subordinada al convulso periodo de la Transición. Y es esa especie de reforma pactada y no de ruptura lo que se encarna en los personajes y refleja la corrupción que los define y que actúa como motor de la sociedad capitalista.
Y aquí reside, como ya ha dicho la crítica, el gran acierto de la época elegida para situar la película; ese periodo histórico en el que se mueve como pez en el agua un Javier Gutierrez transformado en un criminal torturador de una normalidad escalofriante a los ojos del espectador.
«Lo que me interesaba es aquello que hay por debajo, clave en la historia de este país«, explicó su director durante la charla. «Habíamos visto los documentales ‘Atado y bien atado’ y ‘No se os puede dejar solos’, de los hermanos Bartolomé, hechos durante la Transición. Había una crisis económica importante, el país estaba patas arriba. Era una especie de puente entre dos épocas y eso fue lo que nos llevó a situar la película en esa etapa y a plantear la historia de dos policías, cada uno de un signo político».
LA FOTOGRAFÍA DE ATÍN AYA
El director explicó que a nivel visual, la película se inspira, fundamentalmente, en fotografías de Atín Aya, fotógrafo sevillano que pasó diez años capturando las marismas.
Otra fuente de inspiración la constituye un estudio sobre imagenes fractales y cómo éstas se repiten en la naturaleza, de forma que el realizador se interesó por animarlas digitalmente en elementos como las aguas del río, dando lugar a una belleza y un cuidado en la fotografía que bien le han valido a «La isla mínima» el Goya en esta categoría.
Cada fotograma tiene un elemento que añade y altera la realidad.
Durante el coloquio, que podéis ver bajo estas líneas, no faltaron referencias a la polémica surgida tras el éxito de la serie estadounidense «True Detective», detalles sobre el proceso de creación de los personajes y elección de los actores, así como la predilección del director por la película «Magical Girl» entre las nominadas a la pasada edición de los Premios Goya.
Artículo y vídeo en homenaje a los compañeros de Comunicación Audiovisual que no pudieron disfrutar de la charla por problemas de gestión del aforo, y que nos facilitaron el acceso al recinto.
VÍDEO DEL COLOQUIO
IMÁGENES DE LA VISITA DE ALBERTO RODRÍGUEZ A LA UV
