Acción Mutante es una disparatada distopía en la que los feos, despreciados por la sociedad, se vengan de los ricos y guapos a través de un grupo terrorista. Divertida e irreverente, la primera película de Álex de la Iglesia deja bien claro el estilo de este particular director.
El director
Álex de la Iglesia es un reconocido director de cine que tiene en su haber títulos tan reconocidos como La comunidad (2000) o Balada triste de trompeta (2010). Este bilbaíno ha ganado el Premio Goya a Mejor director por su trabajo en El día de la Bestia (1995). También ha trabajado en numerosas ocasiones para la televisión, siendo destacable su serie Plutón B.R.B. Nero (2008-2009). Es habitual encontrar en sus películas a un grupo de actores entre los que se encuentran Santiago Segura o Terele Pávez, aunque también ha trabajado con otros de mayor proyección internacional como Elijah Wood o John Hurt en Los crímenes de Oxford (The Oxford Murders, 2008). Desde 2009 hasta 2011 fue presidente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, dimitiendo por su desacuerdo con la llamada Ley Sinde.
La trama
En el año 2012, en una sociedad que valora la posición social y la belleza por encima de todo, nace una banda terrorista llamada Acción Mutante, integrada por seres feos y deformes, pretende vengarse de los guapos y ricos mediante asesinatos y secuestros.
La distopía
La sociedad que presenta la película es tan superficial que margina e incluso castiga a todo aquél que no cumpla los cánones establecidos. El amor o el respeto están en peligro de extinción, y cada uno se ocupa de sí mismo. La policía muestra una violencia extrema (golpeando antes de preguntar) y los pobres son apartados cruelmente de la sociedad.
Como en una buena distopía, Álex de la Iglesia no se inventa gran cosa, sino que simplemente exagera ciertos aspectos de la sociedad actual para presentar un futuro indeseado. De este modo, no es difícil imaginarse un mundo como el que refleja Acción Mutante, ya que, en cierto sentido (y esto es lo más terrorífico), ya vivimos en él.
La crítica
El inicio de la película con un grito desgarrador avisa al espectador de la falta de convencionalismos presentes en la película. Rápidamente se expone la situación y se presentan a los personajes a través de un informativo de la televisión que se podría calificar, al menos, como extravagante. La descripción de los integrantes de la banda terrorista es estrambótica, especialmente la de “El Chepa”, capaz de arrancar carcajadas al espectador.
La ópera prima de Álex de la Iglesia deja clara la línea por la que discurrirá su carrera. Su peculiar estilo está impreso en cada fotograma de Acción Mutante, el mismo que presenta en otras obras como La comunidad (2000) o El día de la Bestia (1995). Existen numerosas escenas en las que se puede percibir la admiración del director por el séptimo arte, como la salida de la cárcel, con una ambientación brillante al más puro estilo de cine negro, la boda que inevitablemente recuerda a The Rocky Horror Picture Show (1975) o la personal versión que hace De la Iglesia de la cantina de Star Wars en el Planeta Asturias. Todo ello con una identidad propia, un sello personal que perdurará hasta su último trabajo hasta la fecha, Las brujas de Zugarramurdi (2013).
Con respecto a los actores, Álex Angulo, que ha trabajado en El Laberinto del Fauno (2006) o El día de la Bestia (1995) y Karra Elejalde, conocido por sus papeles en películas como También la lluvia (2010) o Los cronocrímenes (2007) son los actores que más destacan. Antonio Resines se mete en la piel del líder de Acción Mutante, un ser cruel y sin escrúpulos. El actor cántabro, conocido por sus papeles en La buena estrella (1997), Caja 507 (2002), Todos los hombres sois iguales (1997) o la serie de televisión Los Serrano (2003-2008), consigue momentos brillantes, pero no logra conectar con el espectador en todo momento.
Por su parte, los efectos visuales y el maquillaje son sobresalientes; De hecho, la película consiguió dos Premios Goya en ambas categorías y ganó el Premio a Mejor Película en el Festival de Cine de Bogotá.
Repleta de un ingenioso humor negro, que la convierte en una sátira acerca de la sociedad de la época, esta película es todo un clásico capaz de demostrar que el cine español tiene potencial para realizar películas donde el humor y el saber hacer conviven en perfecta armonía.
