Crítica: «Recuérdanos para vivir», la necesaria Memoria

General
Guión
Dibujo
Personajes
Historia
Edición
Muy recomendable
Conmovedora mirada al pasado, a medias como homenaje y a medias como terapia
Cuando el cómic trasciende el medio y se convierte en testimonio de sucesos concretos, enmarcados en momentos históricos-sociales-políticos, y a través de sí mismos cuentan de manera única este tipo de sucesos pueden (y suelen) marcar la diferencia. Maus, Persepolis o Palestina (del que pronto hablaremos por aquí) son algunos ejemplos contundentes de esta afirmación… y ahora tenemos que sumar un nuevo título, publicado hace unas semanas por Planeta Cómic.
Recuérdanos para vivir es una novela gráfica realizada por la talentosa artista sueca Joanna Rubin Dranger que, por cierto, acudió invitada al último Cómic Barcelona (2025). Aunque si nos ponemos puristas se acerca más a un libro ilustrado que a un cómic, esta definición es solamente anecdótica y pasa a un segundo plano por el carácter tan potente y profundo que caracteriza a la obra.
A través de sus más de cuatrocientas páginas la autora nos invita a acompañarla en la investigación que realizó durante años de sus familiares desaparcidos durante la Segunda Guerra Mundial. De nacionalidad sueca y de origen judío, Joanna decide bucear en el pasado de sus ancestros, muchos de ellos desaparecidos o asesinados porque les tocó vivir de lleno la fatídica mitad del siglo pasado en este continente, momento y lugar del Holocausto.

Comienza explorando la vida de su tía Susanne, a la que idolatraba y que se quitó la vida porque la vida misma le pesaba, con el recuerdo de sus padres y otros familiares asesinados por los nazis. Susanne es el motor de la obra en parte por su intensa relación con Joanna y en parte porque fue quien le regaló Maus que, sin duda, le sirve de inspiración.
El árbol genealógico de Joanna se presentaba indescifrable al principio, con tantas ramas cortadas que hacían imposible seguir algunos caminos. Así que lo más lógico fue comenzar por su tatarabuelo materno, Aron, que desde la antigua Rusia de los zares emigró con su familia a Suecia y emigró, ya por entonces, escapando de la persecución a los judíos. La autora también reflexiona sobre estos prejuicios históricos y lo menciono por la época que vivimos con el conflicto en Gaza como está. En su reflexión deja claro, y es cierto, que medir y juzgar a las personas por su raza, etnia o grupo es tremendamente injusto.
La historia de Aron y familia es apasionante… y es solo el inicio de lo que se cuenta en este fantástico trabajo. En las páginas siguientes asistiremos a la incansable labor que realizó Joanna y que la llevó a conocer a familiares aun vivos, a toparse con un muro y no poder seguir la pista de otros y a, en la mayoría de los casos, asisitir en diferido a sus crueles asesinatos.

Esta apoteósica historia familiar se nos cuenta a través de textos que son siempre amenos y no pierden nunca la fidelidad histórica. En no pocas ocasiones destensa la narración intercalando guiños y ocurrencias… como cuando leemos bocadillos en los que habla su hija o su marido y nos revelan, un poco como metalenguaje, que su vida familiar se alteró por este trabajo que la absorvía en cuerpo y alma. Los sucesos históricos se narran siempre desde la honestidad y con abundantes documentos transcritos o dibujados.
Es uno de los ingredientes que hacen de Recuérdanos para vivir algo inolvidable: su dibujo. Ilustradora consumada elige un estilo sencillo y amable para el tono general de la obra, pero no duda en cambiarlo, endurecerlo o modificarlo, si tiene que reproducir alguna foto o documento. Si tiene que mostrar cadáveres víctimas de un pogromo (Pogromo: Masacre, aceptada o promovida por el poder, de judíos y, por extensión, de otros grupos étnicos) o escenarios dantescos o momentos concretos… la autora no esconde nada. Pero en general domina la obra ese mencionado estilo suave y sencillo que demuestra su dominio del trazo cercano al minimalismo.
Nos encontramos ante una gran obra. Material histórico de primera mano narrado en segunda o tercera generación por aquellos que vivieron uno de los episodios más negros de la Historia y que hoy, más que nunca, hay que conocer para no repetirlo. Una obra que es a su vez un acto de justicia y de reconocimiento porque, como se dice en sus páginas, olvidar a los muertos es matarlos dos veces.
A ver si todos tomamos ejemplo.
- Recuérdanos para vivir. Ihågkom oss till liv. Planeta cómic.
- cartoné. 432 pp. B/N. 32€
