Crítica: «Dominio Público», un secreto a voces

Chip Zdarsky es un guionista que ya ha demostrado de lo que es capaz encargándose con éxito de algunas emblemáticas series de Marvel, Daredevil o Spider-man, sin ir más lejos… y también de DC, con nada menos que Batman. Y como suele pasar en estos casos, no es lo mejor que puede ofrecer un creador, acotado a los límites de las grandes editoriales.

El enésimo ejemplo de esto es Dominio Público, la serie abierta que está publicando con Image y con la que vuelve a recoger todo tipo de premios y de éxitos tal y como le ocurriese con su otra serie, Sex Criminals.

Chip Zdarsky ejerce aquí como autor completo y nos cuenta una historia con demasiados, muchos paralelismos con la realidad. Un dibujante de cómics que ve como su creación pasa al cine y renta increíbles beneficios a la editorial que posee sus derechos, mientras él no ve ni un triste céntimo. El otro autor, el que hacía de guionista, es el que se lleva los parabienes y los reconocimientos. Una historia que recuerda demasiado a Stan Lee y Jack Kirby.

Pero este autor tendrá que tomar una decisión cuando aparecen ciertos documentos legales que le otorgan la autoría y propiedad intelectual del popular héroe.

A través de una relato muy bien contado, repleto de personajes reales y con diálogos divertidos y naturales, se crea una historia cercana y emotiva que nos acerca a esta realidad, aun vigente, en el mundo del cómic de superhéroes. Zdarsky sabe lo que tiene entre manos y conoce muy bien los intestinos de la industria… y aquí lo vuelca con gracia y con estilo, pero sin esconder las jugadas sucias y las manipulaciones de empresas ávidas por ganar dinero aunque sea explotando la creatividad de los demás.

Un dibujo limpio, a veces incluso demasiado impersonal, acompaña la narración con sencillas composiciones. Pero da un poco igual, porque el pulso lo lleva el magnífico trabajo literario, de construcción de personajes y desarrollo de situaciones. Y que, cuando piensas que está todo contado, el cómic te promete más.

Este primer tomo es el inicio de una serie prometedora que aun no cuenta con un segundo volumen… al menos sabemos que el autor vuelve a retomar el proyecto y continuará la historia este mismo verano, con nuevos números.

Planeta Cómic opta por publicarlo en TPB, recopilando ese primer arco argumental. Suficiente para saber que estamos ante un grandísimo cómic, ganador de momento de un Eisner el pasado año. Parece que Zdarsky se establece, definitivamente, como uno de los mejores guionistas en el panorama del cómic americano. Un canadiense que pisa fuerte en terreno yanki y al que seguimos desde hace tiempo. Porque este hombre no baja el nivel.

• Dominio Público 1. Planeta Cómic
• edición original. Public Domain 1-5 USA. Image
• cartoné. 128 pp. color. 17,95€