Crítica de MotoGP 23, para Xbox Series S.

Los simuladores deportivos de diferentes disciplinas que vienen acompañándonos año tras año, suelen ir evolucionando con mejoras, principalmente gráficas, puliendo algunos aspectos técnicos y renovando sus diferentes marcas, equipos, escuderías, etc.

Una nueva temporada.

Hoy os traemos uno de estos simuladores, el cual lleva más de 20 años trasladando toda la emoción del mundial de MotoGP a nuestras consolas y ordenadores. Os hablamos de MotoGP 23, desarrollado por Milestone y ya disponible para PC, PS5, Nintendo Switch, Xbox One, Xbox Series X|S y PS4.

En esta ocasión, se ha querido lanzar un título que pueda ser accesible para los nuevos jugadores, así como suponer un reto para aquellos veteranos curtidos en el manejo de las motos. De este modo, MotoGP 23 nos ofrecerá 4 modos de juego diferentes: Debutante, clásica, competitiva y extrema.

Accesible para todos.

En cada una de estas modalidades de juego, se nos dará la opción de probar el manejo en pista, con el fin de ver cual de ellos se adapta mejor a nuestras habilidades. De este modo, dispondremos de ayudas neuronales, transmisión semiautomática y electrónica asistida, para que la moto vaya casi sola, o llegar a pilotar sin ninguna asistencia, debiendo tomar el control de la transmisión y la electrónica de la moto.

Ciertamente, el modo debutante nos lleva bastante de la mano, haciendo que perdamos jugabilidad al no poder frenar o acelerar cuando queremos, pero su parte buena es que será muy difícil que lleguemos a caer al suelo por un mal pilotaje, pues seremos rectificados en todo momento.

Personalmente, aconsejo empezar con la clásica, ya que nos dará mayor sensación de control y avance a lo largo del juego, para lanzarnos luego a la competitiva, o la extrema, si le cogemos el gusto al control de la moto. De todos modos, siempre podremos personalizar todas las opciones a nuestro gusto conforme vayamos afianzando nuestra confianza a base de horas de práctica.

Personalización.

Tras elegir la experiencia de juego, podremos crear a nuestro piloto, pudiendo elegir entre género masculino y femenino, diferentes rostros, la edad, peso, estatura y diferentes complementos del traje, casco, guantes o botas, entre otros, así como sus colores.

El grueso del título se basa en su menú principal de juego, en el cual podremos comenzar la partida para un jugador o multijugador. Dentro del modo un jugador, se nos ofrecerán los modos rápidos, con contrarreloj, campeonato o Gran Premio. Después tendremos disponible el modo trayectoria, el cual nos permitirá ir evolucionando con nuestro piloto desde competiciones de Moto 3 hasta conseguir llegar a MotoGP. Finalmente dispondremos de un modo entrenamiento, con el fin de afianzar nuestro control gracias a los tutoriales y la inclusión de MotoGP Academy, una serie de retos que nos irán recompensando al realizar diferentes objetivos en los diferentes circuitos de MotoGP.

Si pasamos al modo multijugador dispondremos de las salas típicas para crear o unirse a una carrera, así como un modo llamado LiveGP, donde se van añadiendo eventos programados, en los cuales nos podremos inscribir y competir con otros usuarios de nuestro mismo nivel, al tiempo que ganamos puntos y vamos ascendiendo en una clasificación. Unos modos que nos darán horas y horas de diversión asegurada. Por otro lado, también podremos jugar en modo local con pantalla dividida, para picarnos con amigos en el sofá.

El modo trayectoria.

La parte más atractiva de este título es la del modo trayectoria, ya que con el piloto que tengamos creado comenzaremos en modalidad de Moto 3, dentro de una escudería. Pero no tendremos que hacer todo el Gran Premio desde el principio, si no que se nos plantearán unas cuantas pruebas finales marcándonos un objetivo para salir victoriosos, así como comunicación por redes sociales con diferentes opciones para contestar a lo que se nos pide o recrimina en cada momento. Francamente es una modalidad que nos meterá de lleno en diferentes retos, haciendo que nos dejemos la piel para ser los mejores e ir logrando subir escalones, haciendo amigos y enemigos en nuestra lucha y teniendo en cuenta los diferentes estados de humor.

Flag to Flag.

Otra de las novedades que se han añadido en esta nueva entrega reside en la climatología variable, lo cual hace que podamos comenzar una carrera con sol, y que de repente se ponga a llover (o al revés), teniendo que entrar en boxes (si queremos) y cambiar de moto y neumáticos iniciales, en el denominado Flag to Flag. Esta experiencia dota al título de una mayor sorpresa en la carrera, debiendo adaptar nuestra estrategia con el fin de terminar la carrera en la mejor posición.

El año pasado quedamos muy satisfechos con el modo que incluía el título, aquel en el cual se rememoraba la edición 2009 de MotoGP. En MotoGP 23 se echa de menos un modo similar, para mayor contenido de cara a los jugadores, pero gracias al contenido LiveGP y las novedades del modo trayectoria, creo que tampoco queda tan parco de contenido a nivel global el título que hoy revisamos.

La jugabilidad se siente bastante satisfactoria, aunque hay que advertir de que este tipo de juegos requieren horas de práctica. No estamos ante un arcade de acelerar y frenar. Aquí hay que cogerle el punto a las frenadas, con freno delantero y trasero, así como a la forma de girar en las curvas, debiendo tumbar en el momento indicado, sin acelerar ni frenar en medio de la curva y darle ritmo en los diferentes cambios de dirección.

Es interesante también el modo rewind, el cual nos permitirá rebobinar tras una mala acción, con el fin de volver al punto que deseemos y repetir la misma para obtener un resultado diferente.

Practicar y practicar.

Al principio, todo puede parecer frustrante para cualquier jugador novel. Es por ello que lo mejor es comenzar cada Gran Premio y pilotar en todas las rondas de entrenamiento, con el fin de ir aprendiendo el circuito y como movernos. Luego acceder a todas las rondas clasificatorias, para finalmente, competir en el Gran Premio y conseguir los mejores resultados.

La IA de los rivales se ha mejorado bastante, dando una mayor sensación de competitividad cuando intentamos avanzar puestos en carrera. Podemos personalizar también este punto, haciendo que sea más o menos difícil acercarnos a ellos.

Gráficos.

A nivel gráfico, se notan bastantes mejoras de texturas, luces y enfoques, con sus diferentes puntos de vista del piloto, dando un buen realismo a la simulación de este deporte de motor. Siguen quedando un poco irreales los rostros y las animaciones faciales, lo cual le daría un punto mayor de realismo al título, teniendo en cuenta la evolución actual de este aspecto en la mayoría de los juegos.

Los circuitos son bastante fieles a la realidad, y la sensación de velocidad se nota bastante, sobre todo cuando pilotamos motos de MotoGP, donde se nota el peso de estas máquinas, así como su potencia en la conducción.

Destacan algunas escenas introductorias, las cuales consiguen meternos de lleno en el mundo de la alta competición. También el detalle de todas las motos oficiales y su animación queda plasmada con un buen nivel de realismo.

La climatología se nota pulida en MotoGP 23, con cambios de sol a lluvia, nublado, efectos de gotas en la pantalla, etc.

Tal vez quedarían bien unas mejores animaciones en las caídas, o más sensación de daños en la moto, o en el mono del piloto, por ejemplo. Podría ser un aliciente más a tener en cuenta de cara a próximas entregas.

Sonido.

A nivel sonoro, los efectos de motor se notan muy bien ejecutados, así como los pasos por los pianos, derrapes, etc. Luego queda muy bien ejecutado el doblaje en español de los comentaristas, dando ese punto de emoción en cada Gran Premio.

La música no destaca a nivel general, con alguna melodía que acompaña en el menú, o en alguna secuencia, pero nada memorable en conjunto.

Conclusión.

Estamos ante una nueva entrega que quiere captar a nuevos jugadores, ofreciendo a aquellos más veteranos nuevos retos un año más. Personalmente he disfrutado mucho con todo el contenido de este año, aunque no estaría de más que se retomaran inclusiones de otros años, del tipo como el año pasado, o introducir un modo trayectoria con una historia del personaje, o incluso como en una de las entregas que jugué hace muchos años, en la cual, tras ganar todos los campeonatos, se abrían varias carreras en circuitos de exterior, con motos custom.

Si nunca os habéis adentrado en este tipo de juegos, este año tenéis la mejor opción para meteros de lleno, y aquellos que ya controláis, encontraréis bastantes alicientes para haceros con el título. Esperemos que el próximo año consigan sorprendernos para mejor. ¿Oís el rugido de los motores? ¡Esto comienza ya!