Crítica: «Martha Marcy May Marlene» o de como dejar en evidencia a tus hermanas las millonarias

Se ha venido haciendo eco estos últimos meses de Elizabeth Olsen por su papel en esta película, la cual prácticamente se conoce como "la película de la hermana de las gemelas Olsen", su actuación ha sido aplaudida por la crítica y ya se esta considerando a Elizabeth como "la hermana de calidad" (recordemos un momento los trabajos en el cine de las gemelas Olsen, bien, ahora reconozcamos que tampoco es muy difícil superar sus interpretaciones, no eran películas muy dramáticas ni tampoco muy profundas.), pero todo este adulamiento no es gratuito, la chica se ha formado en buenas escuelas e incluso a estudiado el famoso método Stanislavski y huelga decir que no lo hace nada mal, pero… Aparte de estos datos ¿merece que conozcamos la película por algo más?. Pues si.

Sean Durkin fue premiado en el festival de Sudance a mejor director por Martha Marcy May Marlene y aparte de este logro, poco más puede decirse de el si exceptuamos el hablar de su potencial, que lo debe haber, no es para menos ganando tal premio por su opera prima. Por otra parte también tenemos a Brady Corbet, un chico joven de 23 años que va camino de convertirse en una de las principales estrellas del cine independiente, al que hemos podido ver en el remake americano de "Funny Games" o en la obra más cruda y bonita de Grek Araki, "Mysterios Skin" o recientemente con un pequeño papel en Melancholia de Lars Von Trier, todas muy recomendables y en las que Brady Corbet destaca más (incluso en la de Trier) que en la cinta que nos ocupa, en la cual esta desaprovechado interpretando a uno de los miembros de una secta de la que en breve hablaremos, aunque no es importante este tema.

Si leemos la sinopsis de Martha Marcy May Marlene en la que nos cuentan que Martha (Elizabeth Olsen) acaba de abandonar una secta y se ha mudado a casa de su hermana dónde una constante paranoia le hará llegar al punto de creer que alguien sigue sus movimientos, podemos llevarnos, como tantas otras veces, una impresión equivocada. ¡Tengamos en cuenta que es una película independiente premiada en Sudance!, el estilo es pausado y el avance de los hechos prácticamente nulo, no hay evolución en los personajes, es una película puramente contemplativa y a quien le empiece a echar para atrás esto no debería verla porque no va encontrarse con algo que le sorprenda, en cambio a quien este tipo de cosas no le preucupen se encontrara con una película original, sencilla y extraña. No creo que el punto fuerte de esta película sea la Dirección de Durkin, que simplemente es correcta, el peso de la calidad y fuerza del film cae en Elizabeth Olsen y en el argumento, Olsen se esfuerza por transmitir lo que siente su personaje, consiguiendo que algunas secuencias se queden grabadas gracias a esto, su interpretación es buena pero no tan brillante como nos lo han estado vendiendo, si queréis ver a alguien brillar, echarle mano a Take Shelter, que es una película análoga a esta en muchas facetas, las dos participaron en Sudance, las dos son dramas psicológicos y tratan en cierto modo la paranoia y más allá de esto, tratan la inseguridad.

En Martha Marcy May Marlene (Es la ultima vez que escribo el titulo, lo juro) nos encontramos con la historia de Martha, que efectivamente, es una chica que acaba de escaparse de una especie secta y ahora vive en casa de su hermana, el juego que nos propone la película es el de observar como Martha actúa después de haber estado dos años desaparecida a ojos de su hermana Lucy, mientras diversos Flashbacks nos muestran su vida en la Secta, y es aquí dónde la película adquiere valor pues el tema gira en torno a como Martha a cambiado sus costumbres y las a moldeado a imagen de esta extraña secta en la que se tienen diferentes valores a los que tienen Lucy y su marido, y de como reaccionan estos a ellos.

La película a mi modo de ver habla sobre un tema muy actual, nuestra sociedad y en especial los jóvenes, están viendo cosas en el comportamiento y valores que ha tenido hasta ahora la humanidad a las cuales no ven sentido y las cuestionan, ese miedo que se le ha tenido a la desnudez, el absurdo, para algunos, de la monogamia, el tabú que representa el sexo y la negación tan absoluta que se le hace a la violencia que existe tan intrínseca en la condición humana, y es hablando de estos temas, cuando, siempre dentro de su carácter contemplativo, la película deja ver el punto que persigue, a medida que Martha se adentra en sus recuerdos y sus ideas, es en este momento, entonces, cuando se da cuenta de que hay cosas que la superan, lo que creemos en la teoría nos puede llegar a horrorizar en la práctica, hay gente que cruza la linea y gente que no lo hace, y solo hay dos opciones, aceptar quien eres o refugiarte y negar quien eres.

En definitiva Martha Marcy May Marlen es una buena película, que se deja ver, y aunque no perdura consigue alcanzar sus objetivos, si a uno le gusta este tipo de cine indie, es una cita obligada. Una dirección correcta, una interpretación de una actriz que apunta maneras y parece estar decidida a abrirse paso en el mundillo, y la sensación de haber visto un producto trabajado y no una tomadura de pelo, como pasa muchas veces en este tipo de cine.

Yo por mi parte me quedo con la escena musical de la película, en la que vemos el rostro de Olsen mientras tocan la guitarra y cantan en su nombre y también con el final, que les queda muy redondo y atractivo. ¿y vosotros?