Crítica de Grow Big (Or go home) para PC Windows.
Valoración
GRÁFICOS
SONIDO
JUGABILIDAD
DURACIÓN
Corto, pero entretenido.
Un título sin grandes pretensiones con el que pasar un buen rato, disfrutando de niveles entretenidos.
Hoy os traemos una propuesta jugable sencilla y divertida. Uno de esos juegos indies que suelen pasar desapercibidos, pero que pueden hacernos pasar un buen rato para descansar de grandes producciones repletas de horas y horas de contenido.
¡A por agua!
Nos referimos a Grow Big (Or go home), de Quarant Inc, un juego realizado en pixel art con una mecánica basada en puzles y agilidad, donde deberemos hacer que nuestras plantas crezcan, a través de 15 niveles enmarcados en diferentes épocas.
Nuestro personaje es un jardinero, y en cada uno de los niveles observaremos como uno o varios rayos de sol comienzan a recorrer la pantalla. Deberemos de utilizar espejos para guiar dichos rayos hacia las plantas, a la vez que utilizamos una regadera para llenarla de agua e ir regando las mismas, con el fin de que estas crezcan y, que no ardan debido a una alta exposición solar.
Moviendo espejos.
En un principio, todo resulta sencillo, ya que podremos coger los espejos e ir colocándolos estratégicamente, mientras nos dedicamos a coger agua y regar las plantas, pero al ir avanzando, la cosa se irá complicando, con la aparición de un gato que puede volcar las macetas, nubes tóxicas que deberemos quitar con un ventilador, o incluso uno de los personajes de Among Us(parece ser…), apagándonos las luces o tumbando nuestras plantas, entre otros.
Cada finalización de nivel se mide por estrellas, contando la perfección en el crecimiento de nuestras plantas y debiendo volver a empezar si no alcanzamos cierto límite, lo cual invita a tratar de terminar los mismos con la mayor cantidad posible de estrellas.
Gráficos y sonido.
Gráficamente, el título cuenta con unas animaciones que no están mal, sobre todo a nivel de nuestro personaje, enemigos, agua y plantas. Aunque se echa en falta un poco más de mimo en la creación de los escenarios.
La música acompaña bastante bien, con melodías resultonas, sin ser memorables ni hacerse pesadas en conjunto. Los efectos de sonido son bastante correctos globalmente, ofreciendo todo lo que se necesita para un juego de estas características.
Conclusión.
Hay que destacar que el juego es corto, muy corto. En unos 30 minutos podemos ventilarnos todos los niveles en plan rápido, para luego, intentarlo de nuevo con mayor número de estrellas. En este aspecto, se echa en falta un mayor número de niveles. Tal vez algún dlc o alguna actualización le daría un poco más de vidilla al título.
Y bien, poco más podemos decir del juego. Hemos querido darlo a conocer, pues el arte y la jugabilidad consiguen ofrecer una experiencia bastante agradable en su conjunto, con toques originales y graciosos desde la primera partida.
Si estáis buscando algo sencillo, os encanta (como a nosotros) el pixel art y los juegos indies, aquí tenéis una propuesta bastante chula, disponible en Steam desde finales del 2020.
¿Seréis capaces de hacer crecer las plantas? La regadera os está esperando…