Crítica: «Nioh 2», samuráis contra yokais.
Resumen de la Crítica
Historia
Jugabilidad
Gráficos
Muy Recomendable
Dificulta, acción sin tregua ni respiro y una dificultad exigente pero asumible. Añade dosis ingentes de yokais y tienes un cóctel que nunca falla.
En febrero de 2017 llegó un título que recogía el sistema de juego de los reverenciados Dark Souls. Era Nioh y adaptaba esa dificultad endiablada a una nueva ambientación… el Japón de los samuráis. Concretamente nos llevaba al año 1600 y nos ponía al control de Williams, un marinero inglés que llegaba a las costas niponas y encontraba un país envuelto en las guerras y poblado de violentos y monstruosos yokais.
Además de la consabida alta dificultad, mantenía el curioso sistema de juego colaborativo de los Souls y añadía interesantes conceptos que depuraban los combates y los complicaban de manera inteligente. Tres posturas e infinidad de armas y combinando unas (las posturas) y otras (las armas) usábamos un estilo u otro, unos combos u otros. Ambientación inmejorable, atractivo y profundo sistema de juego, gráficos notables. Nioh fue un título muy notable y su segunda parte estaba cantada. Ahora nos llega directamente a la PS4 de la mano del Team Ninja y, si os preguntáis si mantiene el nivel, solo tenéis que seguir leyendo para saberlo…
Argumento, Historia, Personajes…
La aventura transcurre a caballo saltando de época y situándose antes o después del primer Nioh, aprovechando sucesos reales de la era Sengoku y acompañando al daimyo Nobunaga en su escalada bélica. Se mezcla esta era de guerras cruentas y civiles con la leyenda, y los yokais pasan a formar parte activa en la contienda. Por desgracia, la narrativa del juego no es demasiado clara y muchas veces nos encontraremos perdidos… a no ser que conozcamos algo de historia medieval japonesa. Personajes históricos reales se entremezclan con otros de ficción y en medio de esta ensalada que puede confundirnos entendemos que la acción está por encima de la narración. Aunque, no nos engañemos, una historia mejor hilvanada y más clara hubiera resultado en un juego épico.
A diferencia del anterior juego, en Nioh 2 no tenemos un personaje predefinido. Al inicio accedemos a un potente editor que nos permite modificar a nuestro gusto la apariencia que va a tener el protagonista… si será hombre o mujer, constitución, edad, cabello y un larguísimo y variable etcétera que ha llevado a la comunidad a crear auténticas virguerías. A poco que busquéis por ahí encontraréis gente que ha recreado a Big Boss, a 2B de NieR Automata… además, podemos adquirir skins variados entre los que se encuentra el protagonista de Nioh, Williams.
Como indicábamos arriba nos cruzaremos con muchos personajes, algunos pasarán a acompañarnos en momentos puntuales del juego. Es interesante comprobar como se ha cuidado la conexión con el anterior título y se incluyen personajes que o bien aparecían allí o bien tienen algún tipo de referencia. Tampoco esperéis que el juego profundice en ellos, pues la parquedad narrativa de la historia se establece también en el desarrollo de los personajes. De los yokais y enemigos finales hablamos más abajo.
¿Y como se nos narra el argumento? De dos maneras diferentes, bien con escenas cinemáticas realmente impresionantes aunque, insisto, algo atropelladas o bien con escenas animadas imitando el arte tradicional del dibujo japonés. Ambos en un inglés perfecto con subtítulos en castellano.
Estilo de juego, jugabilidad…
Como buen Souls like Nioh 2 es muy exigente en su jugabilidad. El mínimo fallo o descoordiación puede llevarte a la muerte… incluso con el enemigo más mindundi que te encuentres. Aprender los golpes y tácticas de nuestro personaje así como las rutinas y tics de los oponentes es esencial y no demasiado complicado… otra cosa es llegar a dominarlo.
Podemos empuñar nuestras armas en tres posturas distintas (postura alta, media o baja), siendo una más contundente y lenta, otra más equilibrada y otra más rápida pero menos lesiva… respectivamente. Podemos cambiar de postura según nuestro interés y combinarlas con la magia y las técnicas ninja que vamos aprendiendo conforme ganamos puntos de experiencia acabando misiones, venciendo enemigos o encontrando tesoros. También disponemos de distintas armas a distancia (arcos, mosquetes y cañones) que también podemos mejorar y depurar. El combate es la base de este juego y Team Ninja lo ha pulido hasta la saciedad, aunque bien es cierto que la base la tenían y solo han mejorar algunas cosillas… e incluido los contragolpes y algún detalle más.
Además de poder mejorar todas nuestras técnicas con un inmenso árbol de habilidades disponemos de infinidad de armas. Elige la que más te guste (dos de ellas, entre las que podemos alternan en el combate) y lánzate a matar yokais. Desde katanas a lanzas, martillos de guerra y dobles hachuelas, gujas y tonfas. Hay de todo. Cada arma con sus combos y sus ataques exclusivos, con opción de mejorarlas y aplicarles daños elementales, magia, etc. Una locura.
Y no acabamos. Nuestro personaje tiene sangre yokai y podemos transformarnos por breves momentos en un ser demoníaco, entonces nuestros golpes y ataques se vuelven devastadores. Nos acompañan también dos espíritus guardianes que podemos seleccionar y cuyo número aumenta conforme avanza la aventura. Ellos nos permiten realizar ataques especiales y mágicos y contrarrestar los ataque letales de los enemigos (¡cuidado cuando una luz rojiza envuelva a los enemigos!)
Los enemigos... Centrándonos en los jefes de final de nivel, como el que aparece en la captura de arriba. Algunos llegan rescatados del primer Nioh y otros debutan para la ocasión. Suelen tener una buena cantidad de ataques y memorizar sus rutinas y golpes se convierte en toda una proeza, que nos llevará a morir en varias ocasiones… pero que cuando logras alzarte con la victoria la explosión de adrenalina es importante. Los enemigos son de todos los tamaños y formas y, como suele suceder en estos juegos, los menos amenazadores en apariencia son los más complicados de vencer. Jefes intermedios también los hay, incluso algunos que destilan una zona de corrupción donde nuestra energía tarda mucho en rellenarse. Energía necesaria para realizar ataques, fintas, etc. y solo al eliminarlos restableceremos la normalidad en la zona del mapa afectada.
Fiel también a los juegos Souls like los mapas son enrevesados y circulares, de diseño admirable y en algunos puntos laberínticos… pero demasiado parecidos a los de Nioh, cosa lógica también por compartir época y localización. Sin embargo el parecido va mucho más allá y se nota el reciclado de escenarios en no pocas ocasiones… y lo mismo pasa con los enemigos, que ya se vuelven viejos conocidos de tantas veces que nos enfrentamos a ellos en el primer Nioh. Aun así encontramos suficientes novedades (en escenarios y enemigos) como para disculpar todas estas similitudes.
También incluye la opción de jugar online con hasta dos personas, ya sabéis, usando el consabido hechizo de llamada. Nosotros podemos ser invocados también por otros jugadores y ayudarles en sus partidas. Es en estos casos cuando compartimos una barra de vida común y un objetivo común, pero el juego se vuelve mucho más accesible y clemente. Pero si no podéis o queréis jugar de esta manera, Nioh 2 os permite invocar personajes controlados por la consola. Tienen una IA muy limitada (se lanzan a la batalla como posesos) pero sin duda son una ayuda estimable.
Gráficos y banda sonora…
Nioh 2 va sobrado de gráficos. Ya su primera parte lucía una solvencia importante en este aspecto y aquí se mejora, incluso. Nos da la opción de bajar los frames en favor de la calidad gráfica o de mantenerlos estables a 60 sacrificando un poco (yo no he percibido demasiado) su nitidez, pero ganando velocidad… algo que el juego pide a gritos. Jugando de esta manera las caídas y ralentizaciones han sido contadas, mínimas, y siempre cuando en pantalla se produce un combate múltiple con magias, invocaciones, PNJs, etc. Por lo tanto, el juego se muestra muy estable y no hay nada en este aspecto que limite la dinámica frenética de la acción.
De los escenarios hemos hablado un poco. Están llenos de detalles y repletos de elementos que dotan de credibilidad cada área. Poblados arrasados, interiores de castillos, bosques encantados o cuevas pestilentes… la recreación es excelente y se acompaña de sonidos envolventes (aullidos, llantos, goteos…) que redondean la experiencia y aumentan la tensión. No solo es que la muerte pueda esperarte al volver la próxima esquina, es que la estás escuchando acercarse.
Todos los personajes, todos, están modelados de manera minuciosa y se ha puesto especial empeño en magnificar los enemigos más imponentes, dotarles de elementos terroríficos y amenazadores… así como el cuidado por el detalle de armas, armaduras, etc. Salen perjudicados en comparación los enemigos humanos más básicos, que no dejan de ser clones, por muchos detalles que tengan, exceptuando contadas apariciones de samurais con grandes armas.
Impresiones finales…
Poco nos faltaría ya por contar más allá de especificar con más detalle mecánicas de combate, desarrollo de magias o habilidades, menú de compra y venta, forjado de armas, utilización de núcleos de almas, elaboración de pociones… ¿he dicho poco?
Nioh 2 es un juego con numerosas posibilidades y gran profundidad, que aumenta en horas de juego lo ofrecido por su título predecesor y, reciclando numerosos de sus elementos, los potencia y mejora para elaborar una experiencia tremendamente adictiva y exigente, gratificante también, envuelta toda ella en el magnético Japón de los samurais y los yokais. Lástima que su historia quede emborrada por una narrativa torpe que nos confunde y despista, pero que eso no os eché atrás para poder disfrutar de un gran título.
Lo mejor…
- Japón, yokais, samuráis… no hace falta decir más
- Profundo sistema de combate, exigente y gratificante.
- Gráficos, ambientación y enemigos. Todo suma.
Lo peor…
- En ocasiones es demasiado parecido al primer Nioh
- La narrativa del juego es horrible e impide seguir la historia con claridad