Crítica: «Universo DC Renacimiento. Batgirl 3», El Amor te hace cometer Locuras.

Hemos acompañado a Batgirl en sus nuevas aventuras y hemos insistido en el carácter positivo, juvenil y cercano de sus historias y de sus protagonistas, con un ligero bache al inicio de «Renacimiento» que, como imaginábamos, fue una aventura tan menor como esporádica. Pronto la escritora Hope Larson vuelve al nivel que tan satisfechos nos tenía… y este tercer tomo, que contiene los números 11 al 17 de la serie regular y el Annual 1, sigue la buena senda.

Para empezar, el primer número se dedica por entero a cerrar la historia que monopolizaba el tomo anterior y quedara inconclusa: la llegada a Burnside y a la vida de la heroína de un peculiar personaje, Ethan Cobblepot, el hijo del Pingüino. Es cierto que este arco argumental ha ido decreciendo en interés y su final supone una cierta decepción, quizá su interés radique en quedar listo para el futuro ese nuevo villano que hereda la ambición de su padre, mítico enemigo de Batman y cuyo hijo volveremos a ver por esta serie con toda seguridad. Tras este episodio que sirve de cierre a una saga llegan tres aventuras autoconclusivas, rápidas e interesantes, que dinamizan la serie y traen de visita personajes como Catwoman.

Una aventura en varias partes completa este tomo, Verano de Mentiras. En ella, Batgirl y Nightwing se enfrentan a una amenaza que tiene reminiscencias en su pasado común y les hace recordar momentos concretos y claves de su relación. Ambos personajes deben entretejer sus recuerdos y combinarlos con la aventura presente para desentrañar un misterio y desvelar la identidad de una peligrosa amenaza. Y así, combinando aventura y romance, la historia va avanzando en dos líneas temporales y ayuda a resolver el enigma al tiempo que refuerza ciertos recuerdos enterrados, mezclados con sentimientos confusos que se irán aclarando y corrigiendo. Aventura y romance se mezclan con habilidad en esta historia, compensando ambos aspectos de manera que no se convierte en una desenfrenada aventura ni en una historia de amor edulcorada... Hope Larson mantiene siempre el equilibrio e incluso consigue destacar con unas escenas de tensión destacables (la del centro de Rehabilitación, por ejemplo) y con unos momentos intensos de cercanía emocional entre los protagonistas.

Hemos asistido a diversas relaciones de amistad o románticas a lo largo de la serie, pero ninguna tan desarrollada como esta, ni tan bien aprovechada, recuperando aspectos del pasado que sirven tanto para subrayar la relación como para intensificar la historia y entretejer el misterio.

En el dibujo Chris Wildgoose se maneja con soltura y eficazmente, recreando acertadamente todo tipo de escenarios, presentes y pasados, urbanos o interiores, donde destacan siempre los personajes con ese trazo tan característico, a un paso del cartoon sin soltar nunca el cuidado por los detalles en fondos, ambientación, ropas… Además consigue recrear con viñetas y páginas dinámicas las escenas de combate o de tensión, que contrastan con la composición de otras escenas románticas, más tranquilas y serenas en su diseño. Aunque el cambio se nota cuando Eleonora Carlini y Inaki Miranda se encargan del dibujo en unos números concretos (aquellas historias autoconclusivas que al principio mencionaba), el trabajo de ambos raya a un nivel suficientemente alto como para no echar de menos a la genial artista habitual.

Batgirl sigue en su serie a su rollo. Dentro de la Batfamilia es la colección más divertida y desenfadada, al tiempo que es divertida y cercana… sin perder casi nunca el ritmo y no cejar tampoco en su calidad. Algo que no se puede afirmar de otras series que aparentan más sobriedad y que bajo el barniz de «adulto» no llegan ni por asomo, a competir con la resuelta y luminosa Barbara Gordon ni con la fantástica Batgirl.

• Universo DC Renacimiento. Batgirl 3. ¡El Amor te Hace Cometer Locuras! ECC Ediciones.
• edición original. Batgirl 11-17. Batgirl Annual 1. DC Comics.
• rústica. 192 pp. color. 17,50 €