Crítica: «Usagi Yojimbo Saga 2», llega el Inspector Ishida
Resumen de la Crítica
General
Guión
Dibujo
Personajes
Historia
Edición
Muy Recomendable
La saga del conejo samurai sigue imparable y renovándose en cada entrega
Continuando con la edición completa de las aventuras de Usagi Yojimbo, Planeta Cómic publica el segundo tomo de su etapa en Dark Horse, aunque en realidad se trataría del cuarto, contando con aquellos magníficos volúmenes que recopilaban la saga del conejo ronin en su andadura por Fantagraphics. Como pasaba en el anterior, el volumen se divide en tres capítulos separados por sendas introducciones a cargo de maestros del cómic, en este caso Lynn Johnston, Will Eisner y Max Allan Collins. Cada uno de ellos narra su acercamiento a la obra y muestran su respeto por la obra y el autor, con sincera admiración y mostrando exhaustivo seguimiento de la serie. No puede haber mejor aval para ella.
Usagi continúa con su viaje de autoconocimiento por el Japón tradicional, a veces protagonizando aventuras particulares en las que ayuda a algún personaje puntual o resuelve algún misterio que asola una remota aldea… y otras, sus aventuras le llevan a mezclarse en turbias conspiraciones contra el shogunato. Una de estas conspiraciones será el hilo argumental que recorre por entero el tomo, aunque a veces lo haga solo como telón de fondo. La casualidad quiere que hasta Usagi y sus amigos llegue una carta, un manuscrito, que contiene los nombres de los señores que conspiran por el poder. Evitar que tal misiva caiga en malas manos traerá de cabeza a nuestro protagonista.
A ese argumento le sigue la aparición de Segadora: una espada ancestral de origen divino, codiciada por turbios personajes que casi le costará la vida al bueno de Usagi. En este punto, Stan Sakai aprovecha para dar una lección de mitología japonesa pues, precediendo a la aventura, incluye varios capítulos a modo de extenso prólogo donde nos cuenta, con su personal estilo, los entresijos de la creación, del mundo y del hombre, de los dioses y de sus guerras, enmarcando en un contexto legendario y fabuloso las siguientes historias de Usagi. Magistral.
Por si esto fuera poco, aprovecha la aventura de Segadora para recuperar a viejos conocidos como Gen, que ayudarán a Usagi en esta peligrosa misión. Recupera también un enemigo temible, encarnado en la siniestra figura de Jei, que el autor ha ido macerando a través de los capítulos previos, en cortas escenas impactantes, convirtiéndolo en un antagonista formidable y terrorífico y consiguiendo que su encuentro final sea un clímax de intensidad notable.
La última parte del volumen nos presenta un nuevo personaje: el inspector Ishida. Un oficial de la fuerzas del orden tan afable y encantador que pronto se gana la amistad de Usagi y el cariño del lector. Juntos (Usagi, Ishida y el lector) entramos en un verdadero relato de detectives, investigando misteriosos asesinatos que irán derivando en nuevas aventuras y ganarán en complejidad, abriendo caminos a su vez a nuevos argumentos, personajes y tramas.
Y es que lejos de mostrar cansancio o tedio tras casi dos mil páginas de historieta, Stan Sakai sabe refrescar constantemente su trabajo, ofreciendo siempre cosas nuevas que impiden perder el interés por la obra. Tampoco olvida el autor todo el camino que ha ido dejando atrás, regresando en ocasiones a antiguos lugares y recuperando pasados personajes, manteniendo una agradable sensación de continuidad y de cohesión que jamás llega a cansar. En este tomo se presentan varios personajes nuevos como el ya mencionado Ishida, sublime y encantador como un Sherlock Holmes de estilo samurai… como el rudo y justo sacerdote Shansobo, leal e inflexible… como el general Ikeda, reconvertido a campesino que encuentra su camino en la paz y el sosiego de una vida sencilla… como la hermosa Dama Arce… Y como tantos otros que siguen enriqueciendo el nutrido y maravilloso Japón, a medias histórico y a medias fabuloso, que Sakai nos muestra.
Omitiré, por no repetirme, las alabanzas a Stan Sakai como artista. Capaz de ser detallista a través de sencillas composiciones y capaz de humanizar de forma asombrosa a estos personajes con aspecto animal. Su narrativa asequible en lo visual es tan eficaz y directa como siempre y, sus guiones, contienen una profundidad y una carga de información que contrasta con la soltura y fluidez de los escritos. Detalle muy a destacar el alto contenido histórico de las historias. No solo alude al folklore yokai o mitológico, incluyendo leyendas locales, sino que utiliza elementos históricos reales para reforzar sus relatos. En esta ocasión vuelve a usar como fondo parte de la belicosa política contemporánea de Usagi y, a nivel más concentrado, localizado, nos deleita con detalles puntuales como por ejemplo el gremio de probadores de espadas y sus siniestras prácticas. Ayudan además a entender todos estos detalles los extensos escritos que el propio autor incluye al final, detallando de manera más exhaustiva toda esa información y documentación.
Usagi Yojimbo es Stan Sakai, una obra maestra cuidada con mimo y diligencia para convertirse en una obra puntal en este mundo del cómic. No la dejéis pasar.
- Usagi Yojimbo saga. 2 Planeta Cómic.
- rústica con solapas. 672 pp. B/n y color. 35 €