XVIII Salón Internacional del Tebeo de Madrid, EXPOCOMIC 2015

Como es sabido por todo el universo comiquero patrio, los pasados días 11 al 13 de diciembre se celebró en Madrid el ya famoso y consolidado Expocomic, cita anual madrileña que vincula a la capital con el noveno arte. Como en años anteriores el evento es siempre respetado tanto por publico y profesionales del medio y ahí están sus interesantes exposiciones, eventos, stands y autores relevantes, tanto nacionales como internacionales. En este sentido, el continente de la cita se estructuraría en dos bloques, el primero con contenidos más artístico y experto y el segundo, de contenido más festivo. Como no, nos estamos refiriendo a los ruidosamente gratificantes stands, contra las silenciosas y respetuosas firmas de originales, las zonas vips, así como exposiciones de distinto ámbito, ya sean las relacionadas con Star Wars,  con Lego y las organizaciones ludicofestivas con sus habituales decorados. Todo muy variopinto y heterogéneo este primer bloque. Como decíamos, donde está la marcha, que a la postre es lo que ocupa el 80 % de la visita, es obviamente la zona “ruidosa”, esto es, las tiendas, escenarios, espacios videojueguiles y garitos de chuches y dulces. Sin olvidar las correspondientes sesiones de firmas de los autores en los puestos de las editoriales donde realizan sus trabajos, al margen del resto propuestos directamente por la organización. Aunque hay mucho comic (y es la estrella), viendo los numerosos stands con materias relacionadas con el arte secuencial, se combinan otras: literatura, cine y televisión, que por su abundante número, el término va a trascender a Expodiversión,  que para los que quieran degustar de varios postres, van a tener delante una bandeja  inabarcable para su disfrute. En cuanto a la accesibilidad, volvemos a repetir edificio, el Pabellón de Cristal. En este caso, con la apertura de la primera planta, permitiendo prestar más instalaciones al usuario así como impidiendo la saturación de espacio en la planta baja, de doble dimensión, y así dejar a sus anchas las tiendas a beneficio de la circulación del visitante. En este sentido, se agradece que se pueda transitar cómodamente por las instalaciones incluido el sábado en hora punta.

En lo que respecta a los eventos y exposiciones, he disfrutado con la presentación y colocación de todas ellas, a excepción de una, no por lo primero, sino porque combinada con un nuevo plan de la organización sumamente interesante, le pilló estratégicamente mal. Luego me explico. Aquí nos encontraríamos con las “Versiones desde nuestra Galaxia” de Star Wars, una colección deliciosa de ilustraciones de los mejores artistas españolas homenajeando el mito galáctico por antonomasia. Además, en la planta primera, lejos del mundanal ruido y bien centrado, para que no se le escape a nadie. Un privilegio ver de primera mano a los primeros espadas del comic nacional dando su particular punto de vista a vuela plancha del universo de ficción que más ha unido a los aficionados a la fantasía y a la ciencia ficción. Y esto no se queda atrás, puesto que también los estudiosos del dibujo han tenido su oportunidad de mostrar su arte y lo han compartido con los usuarios no desmereciendo sus modos respecto a los profesionales. Y ello por cortesía de la Academia C-10 dimanante de su concurso organizado. Como ya he abierto el melón Star Wars junto con C-10, pues sigamos. Y es que no sólo la academia ha organizado el concurso de ilustraciones, también el de cómic, donde estudiantes del dibujo y escritores han realizado un cómic de cuatro páginas máximo sobre un suceso inventado en el universo creado por George Lucas. Circunstancia que va  más allá de la presentación de una ilustración, ya que abarca la creación de una historia original muy limitada además en el espacio, debiendo aunar esfuerzos en encajar la historia que se quiere contar con esa limitación y la propia narrativa gráfica. Que cuadre no es fácil. Si además un buen amigo de quien escribe participó escribiendo un relato de Darth Vader contando con un dibujante estupendo y quedando terceros en las votaciones pues con más razón uno disfruta con la decisión del estudio. Por último, en lo que a temática starwarsiana se refiere, nos encontramos con la Exposición “El lado Oscuro: El Darth Vader de Salvador Larroca” donde podemos apreciar originales de las páginas de la serie Darth Vader que dibuja para Marvel, disfrutando mucho con sus originales y apreciando el curioso tratamiento que realiza con las sombras adelantándose al entintador y colorista. Lo más interesante de esta exposición radica en lo que me refería antes cuando cité esta instalación. Y ello no es otra cosa que la visita guiada por el propio Salvador Larroca explicándonos todos los entresijos de su encargo marvelita en general y los de la propias planchas aquí presentadas en particular, (unas cuantas a decir verdad). Con un montón de anécdotas tanto en la ejecución de las páginas como en las “advertencias” de los editores, la verdad es que fue muy amena y muy bien llevada por el dibujante valenciano permitiendo preguntas e interactuando mucho con el público. La pena, y ahí quería incidir, es que dio la casualidad que estaba muy cerca del escenario y coincidió además con un evento en el mismo, lo que dificultó mucho la escucha de la intervención del dibujante. Aquí, para otras ediciones, la organización debe cuidar mucho esta cuestión porque si no estabas cerca del autor no había menara de oírle y aún acercándote había problemas para ello, teniendo en cuenta que no es fácil para el orador hablar con gente pegada a su alrededor. Si no hay medios para ponerle un micrófono (por la razón que sea o por “economía procesal”) al menos que se lleve a cabo en la primera planta donde no le afecte el escenario o que no coincida con un evento en dicho espacio. Porque la idea es buenísima y ojalá se repita, con más autores si puede ser. De las mejores experiencias que he vivido en un salón de cómic a pesar de este problema.

Siguiendo con las principales exposiciones, nos encontramos con la de la obra de David Rubín, autor que a mi particularmente me encanta y quien se ha encargado del más espectacular cartel del evento jamás creado (al menos para mí), donde pudimos comprobar de primera mano como desarrolla su arte, desde el primer boceto hasta su total acabado en obras tan relevantes como Beowulf o El Héroe. Misma suerte corre la de Corto Maltés, donde pudimos degustar visualmente esta nueva incursión en el univero Pratt y apreciar el arte del dibujante español Rubén Pellejero que tan bien ha adaptado el estilo del autor italiano.

Siguiendo con los eventos en los que he podido comparecer, muy nostálgico y especial fue la de escuchar hablar de su obra al mítico Alex Saviuk, quien lleva escribiendo más de diecisiete años las tiras de prensa de Spiderman con Stan Lee siendo muy recordado por la etapa de la serie arácnida Web of Spider-Man y autor gráfico de la Novela Gráfica “Spiderman: Vidas Paralelas . Autor que estuvo la tira de años dibujando al trepamuros en un época donde servidor saboreaba cada cómic de una forma más joven e ingenua que ahora, pero que me sirvió para decidirme en que este era mi personaje favorito para toda la vida. Era la época de McFarlanre-Buscema-Saviuk en el apartado gráfico de Spidey, entre otros. Acompañado de un experto del personaje como es Julián Clemente la charla fue muy didáctica, interesante, amena y divertida, llena de anécdotas con respuestas amables a cualquier pregunta de los presentes. Una experiencia muy grata.

En lo personal, decir que como todos los años, acudir a Expocomic es un baño de satisfacción al poder combinar nuestra pasión por los cómics con los mejores amigos que de Madrid y de distintos puntos del territorio nacional venimos a esta reunión anual en este templo que hemos erigido donde profesamos nuestro amor por el arte secuencial y nuestra mutua compañía. Y que no pare!!! Nos vemos el año que viene!!!