Crítica: «Los Mundos de Valken. Océanos en llamas», de Nacho Fernández

La trayectoria editorial de Grafito Editorial es tan corta como excelsa. Tanto en nuestra web como en nuestro podcast hemos dado buena cuenta de sus publicaciones (Cazador de Sonrisas y Chorizos. Atraco a la española) porque por su calidad, en todos los sentidos, así lo obligaba. Llegamos ahora a su nueva publicación, la tercera, que se aleja de las anteriores por género pero mantiene el sello y la impronta de Grafito: la calidad.

Si la trayectoria editorial de Grafito hemos dicho que era corta, pasa todo lo contrario con la del autor de Los Mundos de Valken, Nacho Fernández. ¿Qué aficionado no habrá visto/leído alguno de sus hiperconocidos Dragon Fall? Esa parodia nacional de la obra de Akira Toriyama que causó revuelo y expectación como pocas. Desde entonces (mediados de los ’90) Nacho no ha dejado de trabajar a ritmo frenético y, por mencionar solo algo de sus últimas obras, mencionaremos el regreso del Supergrupo, aquellos entrañables superhéroes cutres que debutaron en Super López.

Los Mundos de Valken es su nueva obra, aunque también es vieja… pues parte de un antiguo proyecto que nunca llegó a germinar, hasta que llegaron los editores de Grafito, claro.

Este primer tomo, titulado Océanos en Llamas, sirve para presentar la gran nación de Valken y su particular escenario galáctico… una especie de imperio cimentado por los viajes espaciales a través de su sistema solar (formado por tres soles) y una buena cantidad de planetas. Junto a Keena y su tripulación visitaremos uno de esos mundos, un mundo acuático, y buscaremos las respuestas que nuestra protagonista persigue… pero también asistiremos al resurgir de una antigua raza, los Volg, a los que se creía diezmados tras ganarles en cruenta guerra de más de dos siglos de duración. Este conflicto renacido llevará a la Gobernadora Kryel y sus Casas Nobles a enfrentarse a sus  antiguos enemigos, ahora más peligrosos que nunca, tras descubrir una antigua tecnología que les permite desplazarse de forma inmediata por el espacio. Ese será el conflicto global… pero nuestros protagonistas jugarán baza fundamental en el mismo, mientras resuelven sus enigmas privados.

No está mal el argumento, pero Nacho es capaz de añadirle un extra: revelarnos desde cero una civilización completamente nueva. Diseño de mundos, gobiernos, planetas, ciudades, naves espaciales, razas, personajes y un inacabable etcétera. Todo es completamente nuevo, surgido de la cabeza de Nacho… donde orcos, marines espaciales, Nostromo, estetica steampunk y mil lecturas/películas más se agolpan y se mezclan y son, sin duda, el germen que ha originado y formado este magnífico cómic. De entre toda esta vorágine de fantasía destaco algunos conceptos (solo algunos, para no destripar) que me encantan. El concepto de los siervos: Una raza humanoide creada en laboratorio para ser explotada como trabajadores, guerreros o concubinas. Esta raza, abocada a la condición de esclavos, comienza a mostrar síntomas de rebeldía ante la concepción de su propia individualidad… pese a las mermas que genéticamente se les imputaron. El otro concepto que capta mi atención es el diseño de todo este nuevo mundo de fantasía y, en concreto, sus naves y vehículos. Su concepción está explicada por el propio autor en los estupendos extras que incluye el cómic, y esto dota de más encanto a la obra, pues Nacho comparte esos momentos con nosotros y consigue que los interioricemos aun más y entendamos por qué nos han estado sonando diseños y arte.

Los Mundos de Valken, Océanos en Llamas es un tomo de introducción a este nuevo y rico universo creado por Nacho con su particular, personal, estilo. Quizá la incursión por primera vez sea excesivamente abrupta, pues Nacho no tiene piedad en ahorrar detalles ni terminología, con lo que en ocasiones puede llegar a ser abrumador. La disposición de las viñetas y los bocadillos, que le dotan de dinamismo, también consiguen en ocasiones despistar y colapsar al lector… Se hace no recomendable, sino obligado, dedicarle una segunda lectura y (muy importante) leerse primero el cómic de seis páginas incluido como extra. Pero, ¿es esto un desacierto? Lo es si el cómic cae en manos de un lector poco paciente o con ganas, simplemente (y legítimo) de pasar un rato de vacía diversión.

La edición de Los Mundos de Valken por parte de Grafito es la acostumbrada: extraordinaria. Un tomo lujosamente encuadernado en rústica con solapas, con papel de alta calidad y con numerosos extras. Póster y cómic-introducción además de una lámina firmada por el autor. Además, y como viene siendo habitual, la versión digital es un absoluto regalo, 2’50 €. Podéis echarle un vistazo en la propia web de Grafito Editorial

Recomendable para los lectores habidos de buenas y nuevas historias, de ciencia-ficción potente, de cómic nacional de calidad. Enhorabuena a Grafito editorial por esta apuesta y a Nacho Fernández por concebir los mundos de Valken: ha conseguido que reservemos hueco en la estantería para los futuros tomos.