Crítica: «Transformers. Clásicos UK». Orígenes de lujo

Planeta DeAgostini Comics presenta con este volumen las primeras historias aparecidas en Reino Unido (Marvel UK) de la franquicia Transformers, que aparecieron solo cuatro meses después de su versión americana. Tenemos aquí un origen doblemente interesante: primero porque son los orígenes de estos belicosos robots y, segundo, porque se trata de la versión europea de los mismos.

Quizá me adelante en la estructura de la crítica, pero no puedo evitar el insistir desde YA en la excelente calidad de esta publicación. En un elegante tomo de casi 300 páginas tenemos no solo las primeras aventuras británicas de los Transformers, sino un increíblemente completo grupo de artículos e imágenes que son fuente impagable de información tanto sobre las publicaciones que reedita como de sus autores. El tomo tiene amplia documentación inicial que explica cómo, cuándo y porqué se publicaron estas historias. Cada una de las historias tiene, al principio de las mismas, interesantes explicaciones que sirven para detallar lo que en ellas transcurre y situarnos ante las mismas con aclaraciones de los propios autores, amén de fechas y datos varios de interés. Huelga decir que también se acompaña de todas las portadas originales, reediciones incluidas. Por si esto fuera poco, no se han olvidado de incluir las aventuras escritas, a modo de relatos, que complementaban los anuales británicos. Una edición, repito, absolutamente impecable.

Ahora echemos un vistazo a los comics que contiene… Por supuesto el tomo se inicia con la primera historia editada en UK, en septiembre de 1984, titulada «Hombre de Hierro». Con guión de Simon Furman y dibujos de John Ridgway y Mike Collins. Una historia de sabor añejo que despierta en este lector aquellos sabores de otras épocas, para nada desagradables aunque, hay que reconocer, puede «saber a poco» a los lectores más jóvenes. Estas primeras historias están estructuradas en capítulos de 11 páginas y son fieles reflejos de su época. En las primeras (las que más me han gustado), se nota cierta independencia con respecto a su publicación «hermana» norteamericana, aunque comparte protagonistas. La forma de narrar visualmente es muy distante a la acostumbrada en un comic de Transformers americano, y ahí radica uno de sus principales atractivos y lo que provoca ese efecto de deja vù al que antes me refería. Las historias finales del volumen, donde predomina la acción, son algo más dinámicas y presentan nuevos personajes y curiosidades tales como eventos navideños o los anuales publicados en UK. Cierran el volumen dos relatos cortos, curiosos, titulados Desaparecido en Combate y Perseguido (títulos de películas!), siendo lo único del tomo que no está escrito por el homnipresente  Simon Furman, sino por James Hill.

Todas las historias (12 en total), todas y cada una de ellas, tienen su prólogo explicativo, con palabras de los mismos autores, fechas, datos, anunciaos, fichas, portadas… esto ayuda al lector, 40 años después, a situarse en la época de su elaboración y entender los motivos y las razones que acompañaron a estas primigenias historias de Los Transformers. Algo negativo, pero absolutamente disculpable debido a la antigüedad del material, es el resultado final en la impresión de las páginas y en sus colores: Resultan unos dibujos algo pequeños y unos colores acartonados.

Es este un tomo absolutamente imprescindible para el coleccionista, ejemplo de elaboración exhaustiva y de cuidado hacia una franquicia. El lector nostálgico disfrutará leyendo estas pretéritas aventuras y enloquecerá ante la avalancha de información que, sinceramente, me cuesta recordar un trabajo de similar escrupulosidad. El lector veterano, testigo desde hace décadas de la batalla que libran Autobots y Decepticons, también disfrutará con semejante documento histórico. Desgraciadamente, llevar en la cabecera el nombre Transformers se presta a creer que es un título exclusivamente infantil y, aseguro, los niños son los que menos van a gozar y valorar este tomo.

Si eres padre y te gustaron los Transformers desde siempre, tienes doble excusa para hacerte con este Transformers Clásicos UK, aunque lo disfrutes tú ahora (y, de momento, no tu hijo), es un tesoro que vale la pena poseer.