Crítica: “Byzantium”: Vampiros sin identidad
Resumen de la Crítica
Valoración
Un relato engañoso que se queda en palabras y no llega a las acciones.
“Mi historia nunca se podrá contar. La escribo una y otra vez a donde quiera que encontremos refugio. Escribo de lo que no puedo hablar, la verdad. Escribo todo lo que se de ella y luego arrojo las paginas al viento. Tal vez los pájaros puedan leerla…” Byzantium, una historia narrada por una hija que ha convivido demasiado tiempo con su madre. Un relato engañoso que se queda en palabras y no llega a las acciones.
Neil Jordan regresa a la pantalla grande después de su exitosa serie Los Borgia (2010). El director y escritor de grandes largometrajes como Juego de lágrimas (1992) y Desayuno en Plutón (2005), retoma su lado sobrenatural y regresa a la crónica vampírica después de su más conocido trabajo, Entrevista con el vampiro (1994). Byzantium es una historia contada por Eleanor (Saoirse Ronan), una “joven” condenada a huir con Clara (Gemma Arterton), su madre. Para sobrevivir ambas deberán guardar el secreto sobre su historia y realidad. Así como el tráiler, el inicio te engancha y te hace creer que esta película será algo nuevo y fresco después de tantos bodrios vampíricos que hemos soportado durante estos años de moda sobrenatural. Esos primeros minutos son un principio que promete momentos que nunca llegan. La joven actriz Saoirse Ronan posee soberbias actuaciones como en Expiación. Más allá de la pasión (2007) y The lovely bones (2009), y a la par tiene proyectos que no debería ni mencionar como La huésped (2013); y Byzantium se une totalmente a la lista de sus no tan agraciadas actuaciones. Pero la joven tal vez sea el menor de los problemas, y es que su co-protagonista Gemma Arterton, hace uso del único talento que le hemos conocido: su belleza. La exuberante y hermosa actriz sigue sin poder demostrar que merece un lugar en el mundo del cine, y es que hasta la fecha, no conozco ni un solo proyecto de ella digno de mencionarse. Ya sean las protagonistas, los actores de reparto o hasta los mismos extras, todos tienen algo en común y es que a todos les falta la intensidad necesaria para este tipo de films.
Byzantium tiene contados destellos de grandiosidad, lo que deja al descubierto que la falla principal de la película son sus actores y por consiguiente, el director. Una historia de vampiros que le falta lo más esencial al contar un relato de estas criaturas de la noche: la intensidad y la pasión. La sombra de Entrevista con el vampiro rebasó sin duda a Neil Jordan. Y es que en vez de entregar algo diferente pero igual de maravilloso, creó algo frío y sin vida. Es una lástima agregar esta película a la lista de fallidas crónicas vampíricas.
Y díganme ustedes, ¿cuál es su película de vampiros favorita?