Reseña: «La Guerra de los Hambrientos. Tormenta», de Alfredo Álamo

Kelonia Editorial apuesta por una nueva saga llamada «La Guerra de los Hambrientos«. La primera novela, «Tormenta«, se pondrá a la venta el próximo 10 de marzo. Nos han ofrecido un ejemplar en exclusiva y gracias a ello hemos podido realizar la presente reseña.

Señalar que el libro está ahora disponible en preventa en la web de la editorial, y que si lo adquieres ya, irá firmado por el autor y con un punto de libro metálico con un símbolo que tiene que ver con la historia.

En cuanto a «La Guerra de los Hambrientos. Tormenta”, se trata de la nueva novela de Alfredo Álamo, conocido por obras como “Kobold: El señor de las cadenas” y “Mañana será tierra”. Es el primer libro del subgénero new adult por parte de Kelonia, y para ello apuesta por una ilustración de Daniel Expósito con una combinación de colores agresiva, como suele ser habitual en el cada vez más conocido ilustrador.

La historia de la novela está protagonizada por Ángel, Toni y Diana, unos jóvenes de Valencia cuyo destino está marcado por unos acontecimientos que claramente les sobrepasan.

Todo comienza con una pipa que encuentra Ángel mientras vacía un piso de cachivaches… una pipa de inmenso valor. Su amigo Toni, un genio hacker, le ayudará a saber más sobre el objeto, pero siempre con la ayuda de una chica muy… peculiar.

Diana, uno de los ejes del libro. Una joven con poderes mágicos cuyos padres han desaparecido. Una criatura mágica llamada Aleister la cuida, pero ella siempre es capaz de escapar de su protección y meterse de lleno en la investigación de los misterios que entrañan la pipa, el ataque de los hambrientos y unos cambios extraños en el mundo…

Los hambrientos son la joya de la corona de esta obra, algo parecido a los zombis pero que sólo se nutren de magos y aquellas personas con cierta aura mágica. Personas recubiertas de llagas que necesitan devorar a sus víctimas para sobrevivir… La historia se viene arriba, sobretodo, con cada aparición de los hambrientos. Protagonizan escenas espectaculares que dejan con el corazón a mil por hora, y están muy bien distribuidas a lo largo de la narración de la novela.

Alfredo Álamo apuesta claramente por la sencillez y la naturalidad para dotar a «La Guerra de los Hambrientos. Tormenta” de una lectura fácil y absorbente. El libro te engancha y no te suelta hasta el final, con un ritmo creciente que te deja con hambre de “magia”, esto es, la magia de la imaginación.

Sin embargo, tanto la sencillez como la naturalidad son armas de doble filo. Al mismo tiempo que aceleran la velocidad de lectura y la emoción del lector, también provocan ciertos desajustes en más de una ocasión. Hay algunos fragmentos de conversaciones que pueden chirriar un poco, como si el autor buscara con tanto ahínco la naturalidad que, sobre todo al concluir ciertos diálogos, algunas frases suenan forzadas.

Otro arma de doble filo es la sencillez. A mi juicio, esta novela padece lo que denominaría como el “síndrome de la primera entrega”. Álamo ha sido capaz de crear un mundo con un potencial tremendo y unos personajes muy reales que se ganan fácilmente la simpatía del lector. Sin embargo, al tratarse de una novela corta, da la sensación de que la historia necesitaba más, mucho más. ¡Y el lector también!

Por supuesto, esto último no es un reproche, sino más bien un manifiesto de esperanza de que en las próximas entregas se ahonde más en todo lo que se ha comunicado a modo de retazo. El universo de Álamo tiene un potencial que no debe ser ignorado, y estoy seguro de que el escritor es más consciente que todos nosotros de ello.

Pero por encima de todo… ¡estamos hambrientos de más hambrientos! Una casta tan peculiar da muchísimo juego. Tanto es así que incluso invaden el título de la saga. Y el comienzo de la franquicia ha dejado con muchas ganas de saber más de Ángel, Toni y Diana. ¡Toca esperar a la siguiente entrega!