Resumen de la Crítica
Valoración
El título ya nos hace presagiar lo que nos vamos a encontrar si nos decidimos a adentrarnos en el visionado de “Marea letal”, un telefilme de sobremesa y si leemos el argumento, la teoría se confirma, sólo los créditos nos hace darnos cuenta de que es un filme con ciertas pretensiones.
“Marea letal” (“Dark Tide”), es una coproducción entre norteamericanos y sudafricanos, estrenada en 2012, aunque a los cines españoles no haya llegado hasta ahora, y que está basada en una novela de Amy Sorie, también guionista.
La película, ambientada en la costa de Sudáfrica, en Ciudad del Cabo, cuenta como Kate (Halle Berry), bióloga marina especialista en tiburones, participa en una expedición en que un compañero muere atacado por los animales. Tiempo después y debido a problemas económicos, acepta volver a bucear con los escualos debido a una oferta de un rico empresario.
Este argumento ya, a priori, hace sospechar que el thriller que presenta es el habitual del género, si bien los nombres que están tras de ella pueden invitarnos a pensar que se encuentra dentro de las mejores películas sobre escualos, pero lamentablemente no.
El personaje principal no consiguen involucrarnos en la historia, absurdas las primeras escenas de Kate que hace que muchos espectadores estén deseando que llegue el momento en que sea comida de tiburón.
El resto de personajes tienen escasa profundidad, y aunque se tratan diversos temas intentando dar contenido a la película (relación entre Kate y Jeff (su exnovio), relación padre e hijo cuando la vida del primero se acaba…) quedan en simple anécdotas frente a la gran baza de la amenaza de los escualos que, sin embargo, lleva a aburrir desde los primeros momentos de película.
Además, la historia en sí se desarrolla sin, aparentemente, una lógica interna entre las motivaciones, los diálogos y los actos de los diferentes personajes.
Halle Berry es la gran protagonista, siendo acompañada por el francés Olivier Martínez (“Infiel”, “Antes que anochezca”) haciendo de su exnovio y Ralph Brown (“Jack el cazagigantes”, “Alien 3”), caracterizado como Jeff Ross, un millonario empresario empeñado en bucear junto a tiburones.
Como bazas positivas del filme, las imágenes de los bellos paisajes donde está rodada y, sobre todo, los minutos en los que se acerca a un documental, mostrándonos la fauna de la zona y algunas curiosidades.
Quizás los amantes del género puedan disfrutar con ella, puesto que ofrece algunos momentos de tensión y bastantes de los tópicos de este tipo de películas, y los fanáticos de Halle Berry, siendo para el resto, una película muy prescindible.
La película ha sido un gran fracaso económico, no llegando a recaudar ni el 5% de su presupuesto y, después de vista, no me extraña nada.
