Reseña: «Rebelión en la granja», de George Orwell
Resumen de la Crítica
Valoración
“Rebelión en la granja” es una fábula sobre la corrupción, la opresión, la mentira y la traición. Fue rechazada por cuatro editores antes de ser publicada en 1945.
En esta fábula, Orwell no pretende la sorpresa del lector. Desde la presentación de los personajes queda claro el carácter y la función que desempeña en la narración cada uno: Benjamín, un burro algo cínico y de pocas palabras pero que realmente siente afecto por el trabajador e inocente caballo Boxer, la maternal yegua Clover, la perspicaz cabra Muriel, las estúpidas ovejas sólo capaces de repetir consignas, el embaucador cuervo Moses y los cerdos, los animales de la granja con mayor capacidad de liderazgo, entre los que destacan el ingenioso Snowball, el charlatán Squealer y el taimado Napoleón; son algunas de las caracterizaciones con las que Orwell consigue una dura, divertida y a la vez entrañable parodia de la Unión Sovética, en donde se identifica claramente a Trotsky y Stalin como Snowball y Napoleón.
Rebelión en la granja, de George Orwell, encuentra dificultades para ser lanzada y fue rechazada por cuatro editores antes de su primera publicación en 1945, lo cual tampoco sorprendió al autor. El artículo «La libertad de prensa», que hace de prólogo, no fue encontrado hasta 1971 entre los libros del que fue editor de Rebelión en la granja, y todo parece apuntar a que desde el comienzo Orwell lo redactó como introducción a ésta. En él, como desde su columna “As I Please” en el Tribune, critica el carácter sacrosanto que había tomado el aliado soviético en Gran Bretaña durante la Gran Alianza.
Pero esta misma clase de censura velada actúa también sobre los libros y las publicaciones en general, así como sobre el cine, el teatro y la radio. Su origen está claro: en un momento dado se crea una ortodoxia, una serie de ideas que son asumidas por las personas bienpensantes y aceptadas sin discusión alguna. No es que se prohíba concretamente decir «esto» o «aquello», es que «no está bien» decir ciertas cosas, del mismo modo que en la época victoriana no se aludía a los pantalones en presencia de una señorita. George Orwell, “La libertad de prensa”
Lo que más inquieta a Orwell es que este “pudor” al que hace referencia no es consecuencia de una estricta censura por parte del Ministerio de Información, lo cual incluso le parecía aceptable en aquellos tiempos de guerra, sino de la autocensura por parte de periodistas y artistas.
Las ideas impopulares, según se ha visto, pueden ser silenciadas y los hechos desagradables ocultarse sin necesidad de ninguna prohibición oficial. George Orwell, «La libertad de prensa»
Rebelión en la granja es una lacónica obra sobre la corrupción, la opresión, la mentira y la traición. A pesar de que este libro está dirigido concretamente al dictador Stalin, su problemática sigue siendo actual y las artimañas de Napoleón no menos sutiles que las contemporáneas. Ya sea el cerdo soviético, británico, alemán o ibérico, tras su lectura apetece una generosa tapa de morcilla.
Adaptaciones al cine:
En 1954 aparece la primera adaptación de Rebelión en la granja bajo la dirección de Joy Batchelor y John Halas. De producción británica, es un largometraje de animación bastante fiel a la obra original de Orwell aunque con un final más esperanzador, en donde resalta la equiparación entre el régimen soviético y las sociedades capitalistas como sinónimas de esclavismo, llegando a convertirse en un film de culto.
En 1999 se estrena otra adaptación de esta fábula, esta vez de origen estadounidense, que aparentemente pasa sin pena ni gloria por las salas de cine.
Para 2015 se ha anunciado la próxima adaptación que contará con Andy Serkis (El señor de los anillos, El origen del planeta de los simios) como director después de haber colaborado en la dirección de El Hobbit. Como no puede ser de otra manera para la versión de Serkis, la técnica de captura del movimiento será la que dará vida esta vez a los personajes de Orwell.
Creo que hemos encontrado una manera bastante fresca de ver las cosas. Definitivamente usaremos la captura de movimiento, pero intentaremos utilizar una amalgama de estilos de filmación para crear los ambientes. Estamos en una fase de prueba del diseño y los personajes. No descartamos nada… La animación, los animales, todo se encuentra en fase experimental y es terriblemente emocionante. Andy Serkis para The Hollywood Reporter